Cuando intentamos algo por primera vez solemos hacerlo con grandes expectativas, por ejemplo, cuando buscamos el primer empleo o cuando intentamos encontrar mejores oportunidades profesionales que la actual.
Pero a mayores expectativas más posibilidades de frustración.
La forma de evitar la trampa de las expectativas es prometer y prometernos 80 y dar 120 y no fijarnos en el final de la escalera sino enfocarnos en la preparación para subir el siguiente peldaño.
No se trata de ser bueno subiendo escaleras, se trata de ser mejor en cada peldaño.
Por otro lado, es importante diferencia entre animar y motivar, porque motivación no es tener ánimo, sino motivos.
—Creo que no voy a encontrar un buen empleo nunca. La vida es una mierda, me pagan una miseria por estar 10 horas soportando a la gente. No sé además para qué estudié una carrera de Biología, total, para acabar trabajando de dependienta, joder…
—Mujer, no te preocupes. Ahora ves las cosas negras, pero ya verás cómo van mejorando poquito a poco…
Esta frase final que pretende ofrecer ánimo y consuelo, tiene buenas intenciones pero un perverso efecto secundario: crea expectativas de que las cosas mejorarán porque sí. Las expectativas sin contrastar son negativas a medio y largo plazos.
Podemos utilizar de forma bienintencionada las expectativas, el optimismo, y la actitud positiva, pero las cosas no mejoran por lo que uno pueda esperar, sino por lo que se ponga a hacer.
La esperanza de la buena no proviene de esperar o sentir que la vida mejorará, sino de valorar nuestras posibilidades y avances de forma realista y de seguir intentándolo, como al perro del chiringuito, lo que a su vez alimentará las conductas y la actitud de tener esperanza.
Por otra parte, la mala esperanza y el optimismo de salón son las que nos venden diciendo que las cosas mejorarán sin especificar de forma muy concreta qué tenemos que hacer para que mejoren.
Las buenas expectativas no son las que te hacen sentir bien o emocionarte fantaseando con un futuro mejor, sino las que te hacen esforzarte por hacerlo mejor cuando el objetivo merece la pena y es posible su consecución.
Con o sin esperanza, de forma optimista o no, para buscar empleo, piensa lo que quieras, pero haz lo que debas.
El objetivo no es tener esperanza, sino conseguir lo que nos proponemos, esperemos o no conseguirlo.
ABP dice
Oh my God! Ese padre con esa carita si que está previendo las consecuencias…
Yoriento dice
Ahí las dao ¡ Las personas que “ayudan” a otras a generar expectativas que luego difícilmente van a cumplirse lo hacen con buena intención, pero en muchas ocasiones también para evitar el marrón de dar las malas noticias, es decir, que su problema o su objetivo requerirán de esfuerzo, tiempo y planificación.
Gorka dice
Muy grande lo de los albañiles, muy grande.
Al final lo que queda en la busqueda de empleo es la “constancia” para que cambien las cosas. Si no haces nada por cambiar tu situacion laboral, no cambiará.
La “palmadita en la espalda” muchas veces es el mal remedio para estos temas.
A todos nos gusta que nos “regalen los oidos” pero la unica forma de afrontar una realidad, es conocerla.
Salu2
Yoriento dice
Como tú escribes en tu blog: œNegro Bajito y Cabezón solo puede ser peón de negras, lo mas chungo en ajedrez ¦luego con arrojo y tesón ¦llegue a peón de rey.
De todas formas no se habla de conformismo ni de resignación ni de que no se pueda uno marcar objetivos ambiciosos. Se trata de no crearse expectativas que no se basen en el punto de partida y en la planificación y esfuerzo que se estén dispuestos a hacer.
He trabajado con varias personas que teniendo la titulación de biología estaban en situaciones muy precarias o insatisfactorias laboralmente hablando. Independientemente de las expectativas de cada uno, lo que marcó la diferencia entre ellas fue eso: definir objetivos claros y seguir persiguiéndolos mucho tiempo, mucho. ;-)
Raiza Sommi dice
Yo particularmente no creo en las expectativas, creo en la acción efectiva e inmediata. La acción es la condición básica para forjar cambios.
Pasé a ver tu nuevo blog,luce muy ordenadito.
Por acá vendré a leer;)
Saludos y éxito en el nuevo camino
Yoriento dice
Es que las expectativas que no se confrontan con frecuencia con la realidad (con los intentos por mejorar) suelen ser meras ilusiones o conjeturas, no?
Gracias por pasarte. Ya llevamos mucho tiempo juntos en este camino ;-)