Si habéis echado un vistazo al programa de Evento Blog España 2009 ya sabéis que participo en una sesión denominada Gestiona tu vida en la crisis compuesta por dos presentaciones de 20 minutos cada una. Primero intervendrá Pedro Rojas y luego será mi turno. Tengo la intención de que mi intervención sea concreta, participativa y, si puede ser, divertida, siempre con un tono crítico inevitable en los tiempos que corren. Ya veremos, pero me gustará mucho tener vuestro feedback posterior.
La autoayuda de mercadillo te diría, “si piensas que puedes, podrás.” Generar expectativas es mentir para vender. Sin embargo, la psicología de la buena, la profesional, solamente puede decirte “si piensas que puedes…tal vez puedas.” Y seguramente añadiría “aunque pienses que no puedes, simplemente empieza, a ver qué pasa”. En fin, hace tiempo ya expresamos esa importante idea de una forma más sintética: buscando trabajo cree y siéntete como puedas pero haz lo que debas.
Mi ponencia tendrá un título antiayuda vendemotos: Mejora tu vida profesional en 20 minutos…tal vez. Y esa probabilidad final es una ironía contra la proliferación de expertos de salón que están apareciendo en la Web Social y que nos dicen con una soberbia pasmosa lo que “tenemos que hacer para alcanzar el éxito”.
No te preocupes que tú también puedes parecer un experto. Para ello tienes que seguir esta sencilla técnica: decir que lo eres. Corre a tu perfil en Facebook y a tu Bio en Twitter y descríbete como un mostruo en social media, un superman (o superwoman) de las TICs o un sensacional coach y orientador de todo lo que se mueve. No importa que no puedas acreditar experiencia relevante ni logros medibles.
Prepara el elevator pitch (o discurso del ascensor) que quieras, que está de moda. Afirma sin pudor que eres un gran community manager aunque sólo lleves unos meses en Twitter y tengas menos conversación que el blog del INEM. O declárate experto consultor en emprendedores o en empleo 2.0, aunque en tu vida hayas montado nada ni trabajado en selección de personal, intermediación laboral o en orientación profesional… En fin, que yo también me veo obligado a decir que soy un experto porque la competencia es dura ;)
Entre tanto ruido social media, ¿cómo diferenciar las informaciones con valor de la mera autopromoción? Gracias a los organizadores de Eventoblog 2009 (#ebe09), @benitocastro, @luisrull y @jlantunez, tendré la oportunidad de daros mi versión e intentar responder a esta pregunta: ¿cómo puede ayudarme la Web Social a mejorar mi vida profesional?
No me diréis que no he calentado la ponencia, eh? ;)
Hasta entonces os invito a echar un vistazo a algunos posts sobre búsqueda de trabajo, desarrollo profesional y networking. Y aunque hay muy poco tiempo, me gustará que sugiráis temas o dudas que podría tratar en esos 20 minutos.
Por cierto, espero conoceros en Sevilla a muchos amigos/as virtuales conversadores en este blog y compañeros/as en Twitter. Será emocionante y divertido, sin duda.
Alfonso, tenía la sospecha y ahora la certeza, de que voy a perderme una ponencia buena y honesta. Sufro a los expertos de salón en silencio. Me gusta como estás calentando el EBE.
Joé lo que me ha costado escribir el comentario desde la blackberry.
Suerte !!
Alberto
Alberto, con retraso pero con perspectiva, te respondo meses después. :) Creo que la ponencia en EBE fue razonablemente bien y pasamos un buen rato :)
Me encanta la línea crítica que sigues Alfonso, los que llevamos años trabajando en orientación laboral deberíamos ser conscientes de que “sólo quizás se puede”, pero sin duda, para ese “quizás” si que hay que dar algunos pasos. Una pena no poder estar en Sevilla para conocerte, espero que haya otra oportunidad más adelante. Creo que la web 2.0 nos ofrece la gran ventaja de compartir información, pero a la vez la desssventaja de la desmesurada cantidad de contenidos, que no siempre son buenos ni demasiado recomendables. Que vaya todo bien por Sevilla!.
Saludos, Oliver
Creo que hace falta más humildad y más evaluación sistemática en el trabajo con las personas, y menos brindis al sol. A los usuarios hay que decirles la verdad, y en muchos casos hacen falta meses, incluso años, para que una persona planifique y consigas sus objetivos. Y toda una vida si ni siquiera sabe qué quiere.
Hola amigo Alfonso:
Felicidades por quedar finalista en Bitácoras, Un reconocimiento bien merecido, por cierto.
Me alegro
Alberto
(Elevator pitch o elevator speech?)
El original es elevator pitch http://es.wikipedia.org/wiki/Discurso_del_ascensor
Pero da igual, lo importante no es la etiqueta sino el concepto.
Has dado en el clavo. Además empiezan a ser una plaga. El otro día hablando con uno de estos twiteé el término “social media” un par de veces y me agregaron como tres o cuatro gurús más. Encima, incauto de mi, me dio por seguir de vuelta a un par de ellos y cuando me llegó su DM automatizado de “gracias por seguirme, qué importante eres para mí bla bla bla…” pensé: “que les den, ya me sé de qué va este juego”
Me encantaría poder ver tu charla pero me pilla un poco a desmano. Suerte con ella.
Es inevitable el uso de etiquetas como, por ejemplo, “socialmedia” por parte de aquellos que quieren parecer expertos en ese ámbito. Es legítimo que lo intenten y cada vez será más difícil diferenciar a los buenos de los menos profesionales en cualquier ámbito. Es lo malo de vivir en una sociedad de las apariencias. Lo bueno es que todos tienen su oportunidad :)
Tienes razón, de buenas a primeras ha aparecido tanto Community Manager con más años de experiencia casi que Internet…. Leyendo lo que escribes me acaba de dar mucha rabia no ir a Sevilla el próximo fin de semana… Espero poder leer la ponencia como quede al final… Un abrazo.
Manuel, ya la pudiste ver en video? :)
y…los expertos que hacemos entonces? ;-)))
Parecerlo mejor aún ;)
¿Que te parece algo asi como “Desde 1966, cuidando de su comunicación personal”? Encima es que es verdad…
:-) Carpe Diem
Mucha suerte en el EBE
Hombre, al principio de ese periodo cuidaron también un poco del experto ;)
¡ ¡Vaya que si has calentado la ponencia!! Alfonso, todo lo que expones es muy cierto y se está convirtiendo en un fenómeno muy extendido. Lo difícil consiste en tamizar toda esa información y determinar “quién” tiene la razón, pues los señalados pueden también señalar y argumentar que el resto hace lo mismo… ¿No es mejor dejar “al oyente (cliente)” que determine a quién escucha? Tal y como sucede en todos los mercados que ofrecen productos, la competencia siempre tratará de opacarnos, por eso sólo queda demostrar la calidad y para eso el boca a boca puede más que los perfiles y Bios que cualquiera pueda publicar.
Será un placer y un sobre todo un honor compatir escenario contigo… Nos vemos allá.
SM
Pedro, toda la razón, lo comentaba también antes. Creo que en la línea de lo que dices es imposible diferenciar a corto plazo y sin haberlo probado, entre expertos que funcionan y expertos que sólo lo parecen. Lo mejor para valorarnos como profesionales es observar no lo que decimos sino lo que hacemos :)
Me queda la impresión que a los social media se les trata como un fin último y no como “parte de” o como “complemento a”. Mi sobrina de 13 años es un hacha en tuenti y facebook, su hermano de 15 tiene más seguidores en twitter que muchos de los que aquí escriben… entonces ¿qué determina a un verdadero “experto” en redes sociales? ¿cuántos meses en concreto se necesita twittear para “pasar” por un verdadero experto? y ¿cuántos post al día hay que escribir para ser un consagrado community manager? Necesito luces…
Pues tú estás dando muchas de esas luces. Esos familiares podrían ser profesionales de las redes sociales si encauzaran su actividad ya intensa a objetivos específicos relacionados, no?
Ahí está la clave, no en que uno se relaciona mucho en Twitter sino en que consigue objetivos haciéndolo. :)
Estupenda introducción Alfonso, también me uno a los que no podemos asistir a Sevilla y nos quedaremos con las ganas.
Sobre el tema de como puede ayudar la web social a la busqueda de empleo, yo llevo varios meses dandole vueltas de como utilizar este tema con mis ususarios del día a día, encofradores, peones de la construcción, personas que se incorporan por primera vez al mercado laboral… y exceptuando casos muy concretos es como si mañana me encuentro desayunando a Ignacio Cirac y me empieza a hablar de supercomputación.
A lo que si que le he encontrado muchisima utilidad es en las sesiones grupales con muchachos sin cualificación, y con un fantastico iphone en el bolsillo, es decir lo que no se debe hacer, como no colgar determinados contenidos
Sí, gran parte de la buena orientación empieza por reflexionar sobre lo que NO se debe hacer. Sobre lo que se debe la cosa ya es más complicada y hay que personalizar y adaptase a cada objetivo.
Si es que si no calientas la cosa, no eres tú, ;-)
Yo es que soy un tipo muy cálido ;)
Interesantísimo tu enfoque anti-experto de pacotilla cuando vas a compartir mesa con el experto de pacotilla por excelencia. Véase su comentario ut supra. Qué pena no estar allí para verlo.
Es verdad que a veces es díficil diferenciar entre los profesionales, pero muchas otras se ve claro que un experto no es tal. Sólo hay que hacerle preguntas concretas, hacerle hablar de casos y experiencias concretas y no de generalidades.
Cada vez es más necesario pedir referencias y no quedarse sólo con la reputación digital de alguien. :)
Ayyyy…y pensar que me pierdo vuestra ponencia y el debate que se puede generar sobre el síndrome de la “expertitis”…una frase que una vez me pasaron y a la que no puedo atribuir autoría por desconocimiento: “Los expertos son como los eunucos en los harenes; saben todo al respecto, pero no pueden hacer nada” Un saludo afectuoso desde BCN
En estos meses, esa frase ha tenido mucho éxito en Twitter, como ya sabrás ;)
La presentación del EBE ha sido genial. Enhorabuena.
Gracias ¡
Genial la presentación en el EBE09. Creo que el reclamo popular para que continuaras después de agotarse el tiempo, lo dice todo. ¡Enhorabuena!
Gracias, la verdad es que la experiencia y la relación con los participantes fue impresionante.
Buenisima la charla. Muy divertida a la vez que acertada.
Gracias, Orayo ¡