Llegó un hombre a pedir trabajo a un capataz en la obra de construcción de una carretera. El capataz le dijo:
– Necesito pintar la línea continua de esta larga carretera. Toma esta brocha y un cubo de pintura y empieza.
Al final del primer día, nuestro hombre había pintado 15 kilómetros. El capataz estaba impresionado; nunca había visto una cosa como esa.
El segundo día pintó 3 kilómetros. Era lo que solía pintar un operario normal trabajando a buen ritmo. El capataz pensó: es lógico, después de la paliza de ayer… Pero aún así, es muy buen resultado.
El tercer día pintó sólo 300 metros. Al capataz no le gustó pero lo achacó al cansancio acumulado.
Pero cuando, después del cuarto día, sólo había pintado 20 metros, el capataz le llamó y le pidió explicaciones. El hombre contestó:
– ¡Claro!, es que cada vez me pilla más lejos el bote de pintura.
Por mucho management y coaching que nos cuenten, como el de ayer, nada como la observación sistemática de la realidad y la autoevaluación para sacar nuestras propias conclusiones. Eso sí, algunas pequeñas grandes historias nos ayudan a enfocarnos de forma más directa en los factores relevantes del problema o del objetivo que nos ocupan.
Este ilustrativo chiste, que recuerda inicialmente al cuento del leñador tenaz, se lo debo a Félix Peinado que lo dejó con cariño en un comentario a 7 historias para iniciar el otoño con productividad. Seguramente ya habrás sacado más de una moraleja aplicable al mundo de la empresa e incluso a tu propia vida, como ha pasado en otros muchos artículos, no? :-)
Nunca debemos infravalorar el poder de una buena historia para inspirarnos y divertirnos, como nos muestra este video-anuncio de Canal +, Great story, que publiqué hace unos días en el Miniblog de Yoriento y que os dejo al final. Por cierto, no recuerdo dónde lo vi, pero debió ser en Twitter, cómo no. Si alguien lo sabe… [Actualización: Lo ví en el blog de Raúl Ordoñez ;) ]
Pero tampoco deberíamos sobrestimar la influencia de las palabras y de los consejos, aunque sean metafóricos, en la vida de las personas porque una cosa es ver, o que te ayuden a ver, el camino y otra muy diferente ponerse a recorrerlo. Animar no es motivar y una historia muy pocas veces cambia el comportamiento. Otra cosa es que nos saque una sonrisa. Y eso siempre es un buen comienzo.
Una sonrisa es el primer paso a la alegría, y ella y la felicidad están puerta con puerta.
Carpe Diem
.-= Último post de Cosechadel66… blog ..De nuevo, el Tango del Pabellón =-.
:-)
Gran historia (parecida a la del leñador), y excelente video, me he reído un rato…
Pues hombre, animar y motivar claro que no es lo mismo, parece que lo de animar es un “estadio inferior”, o más liviano, y que para motivar se requiere algo más. De hecho, es difícil motivar(se) si uno está desanimado, ¿no?
Un saludo
Pablo Rodríguez
La motivación y el ánimo son variables diferentes y que no necesariamente están relacionadas. Acaso no seguimos yendo al trabajo a pesar de estar desanimados? Una cosa son las emociones y otra los motivos para hacer las cosas. Se puede estar muy motivado pero no necesariamente contento, y viceversa. :-)
https://yoriento.com/2007/03/1440-el-anuncio-que-nos-ayudara-a-valorar-el-tiempo-pero-no-a-aprender-como-disfrutarlo-la-diferencia-entre-animar-y-motivar.html/
Hola, Alfonso; sí, ya había echado un vistazo a ese post del anuncio;
Tengo claro que no es lo mismo animar que motivar, lo que no tengo tan
claro es lo de que puedas estar motivado si estás desanimado, salvo que
saques tu automotivación para sacar las cosas adelante
por profesionalidad, por ejemplo (aunque por otra parte, creo recordar
que a ti el tema de la motivación que viene de dentro no te convence…)
Es decir, que normalmente el que está motivado está animado,
pero no viceversa.
Un saludo
Pablo Rodríguez
Aporto mi granito de arena:
Una historia o metáfora no puede motivar, animar… por sí sola. Al igual que nadie puede motivar a otra persona. La motivación es intrínseca. Cada persona debe buscar aquello que le motive e ir alimentándola y renovándola.
Las historias o metáforas son una herramienta más que se utiliza para que las personas veamos los escenarios / las situaciones desde un punto de vista ajeno y no en primera persona. Cuando actuamos es difícil salvar la distancia y observar nuestra actitud, en cambio, mediante una historia, esa distancia existe puesto que son otros personajes que actúan.
Ahí está lo que pueden aportar los cuentos y las metáforas. Evidentemente, si la persona no está receptiva, no le proporcionará o no significará nada. Son únicamente una herramienta de inspiración, no un pozo de respuestas.
.-= Último post de Cris Pérez… blog ..Coaching para recobrar el alma como dominio de aprendizaje =-.
Si “nadie puede motivar a una persona”, como es que hay tanto expertos, ponencias y cursitos sobre motivación? Aquí hay algo que no cuadra ;)
Los conceptos que se utilizan en el mundo del coaching, el management, etc, son tan confusos que es imposible evaluar la eficacia de las prácticas que se basan en ellos.
Gracias por el granito ;)
Quizá más de un coach debiera reflexionar sobre el último párrafo que escribes en el artículo. Hay perogrullos que aburren, pero también falsos mesías que matan.
Saludos, Alfonso.
.-= Último post de Germán… blog ..La felicidad no depende de la realidad =-.
Tu frase final sí que lo resume bien, Germán. De todas formas creo que también los mesías aburren, no pueden hacer mucho más :-)