¿La crisis está cambiando nuestras creencias y actitudes para mejor, o en cuanto termine volveremos a las andadas?Sobre creencias y también sobre actitudes se ha hablado mucho en Yoriento. Este artículo es la novena experiencia de sharismo sincronizado, ya sabéis, la publicación conjunta de artículos traducidos que nos traemos Carme Pla y un servidor en nuestros blogs.
Este post es una reseña-reflexión elaborada por Carme sobre Good things about the recession, un post publicado en The Art of Nonconformity, el blog de Chris Guillebau que está lleno de unconventional strategies por life, work and travel. Os dejo con el artículo que Carme también ha publicado en su blog.
Suelo leer el blog The Art of Nonconformity, de Chris Guillebeau, sobre emprendizaje, viajes y cosas casi tan diversas como las que hay en el mío. Pero realmente no esperaba encontrar un post sobre la recesión económica. En realidad se trata de contenido surgido a partir de aportaciones vía Twitter. El objetivo principal del artículo es encontrar vías para enfrentarnos a la recesión, como individuos, de forma positiva, un ejercicio para “pensar fuera de la caja” (think out of the box).
El autor habla de creencias profundamente arraigadas, la mayoría en torno a la seguridad. Estamos, por lo tanto, ante lo que José Miguel llama paradigmas; aunque también podríamos referirnos a los modelos mentales que maneja Juan Palacios. Este concepto también lo incluye Julen en su lista de 27 preguntas relacionadas con las empresas y el trabajo.
5 creencias que seguramente cambiarán gracias a la crisis
1.- Podemos tener todo lo que queremos al mismo tiempo. Creo que normalmente podemos hacerlo todo o tener todo lo que queramos… sólo que no pienso que podamos tenerlo todo al mismo tiempo. El diseño del estilo de vida consiste en elegir de forma deliberada y muchas de esas elecciones implican perder algo para recibir otra cosa a cambio.
2.- Todo lo que tenemos que hacer es ahorrar regularmente durante 40 años y luego podremos jubilarnos. Esto puede funcionar aún para algunas personas, pero para otras no. Las personas que invirtieron fuerte en la bolsa o en Madoff han visto sus ahorros aniquilados. Claro, podemos culparles por haber elegido mal, pero las opciones no es que fueran poco convencionales. El mercado bursátil funcionó por mucho tiempo. Pones dinero y más tarde sacas más dinero. Incluso las carteras que se diversificaron “adecuadamente” han visto tremendas pérdidas recientemente.
Siempre he visto un problema en esta creencia en particular, incluso cuando parecía cierta. Mis objeción es “¿Esto es lo mejor que podemos hacer? ¿Dedicar los años más productivos de nuestras vidas trabajando duro con la esperanza de divertirnos en los últimos años?” Ahora que ya no es un plan de seguridad garantizado, aún lo creo menos.
3.- Endeudarse es normal y saludable. Hasta hace poco, tener gran cantidad de deudas era socialmente aceptable, a veces incluso en boga. Si me daba por hablar sobre cómo la deuda es una cadena en nuestros cuellos que nos arrastra al fondo del océano, el silencio ocupaba la estancia y aprendí a guardarme mi opinión para mí mismo. Ahora no tengo que decirlo porque para la mayoría la creencia de que la deuda no es sana es ahora bastante convencional.4.- El empleo tradicional es seguro. Trabajar por cuenta ajena puede continuar siendo convencional, pero ya no se puede decir que sea seguro. De nuevo, sé que habrá personas que se sentirán incómodas con esto, pero intento ayudar. No estoy diciendo que todo el mundo debería salir y dejar sus empleos (aunque no sea mala idea para algunos). Creo que existe al menos el mismo riesgo cuando trabajas como asalariado que cuando trabajas por cuenta propia. Tal como están las cosas ahora, no veo cómo alguien puede continuar defendiendo una correlación entre empleo y seguridad. Por esta razón es incluso más importante que nunca que nos creemos nuestra propia seguridad e independencia.
5.- Siempre habrá alguien (otro) que nos sacará de esto. Mucha población de USA, y por extensión mucha población del mundo en general, está aparentemente esperando con la esperanza de que alguien en alguna parte resolverá el problema y se ocupará de nosotros. Esto es un error. No importa quien es el culpable de esta situación, tenemos que salir de ahí nosotros mismos… lo que nos lleva a la parte más importante de la conversación de hoy.
El primer punto me ha recordado una de las metáforas de Yoriento sobre la toma de decisiones y el pago de peaje que lleva implícito. Pero cuando más he recordado a Yoriento ha sido en la parte final del post de Chris, el paso a la acción, relacionado con la psicología paradójica contra las quejas porque, por ejemplo, no te gusta tu trabajo, y el famoso cree lo que quieras pero haz lo que debas.
¿Cuáles son las Respuestas?
Si nos encontramos ante un desafío importante de nuestra visión del mundo, ¿cómo deberíamos responder? Independientemente de nuestras situaciones individuales, existen esencialmente dos posibles respuestas. Puedes ver la primera, la respuesta más común, desplegándose por todo el mundo en este momento. La segunda, sin embargo, es la única que nos ayudará a superarlo.Respuesta #1: Quéjate de los demás
Si quieres desquiciarte con alguien, tienes muchos objetivos a los que apuntar. Quejarse de personas o entidades es una opción aceptable socialmente. Podrás encontrar manifestaciones y grupos de Facebook para cada uno de ellos. Además, ninguna de las quejas está realmente injustificada. Sí, los ejecutivos de la AIG son magnates avariciosos que no se merecen bonos millonarios por aprovecharse de su empresa. Pero… ¿qué tiene eso que ver contigo y conmigo? Mira, puedes coger un cabeza de turco, pero al final del día, el modo en que te haga sentir cualquiera de ellos no mejorará tu vida en absoluto. Lo siento. Pero alégrate, porque encontrarás opciones mejores en la Respuesta #2.Respuesta #2: Cambia y adáptate
Dedica un día o el tiempo que sea que te lleve quejarte del cabeza de turco que hayas elegido. Después, supéralo. Déjalo y piensa en la vida que quieres para ti mismo. Reconoce que el mundo es distinto ahora. Reconoce que algunas de las cosas en las que creímos no eran verdaderas. Las reglas han cambiado. Pero puedes arreglártelas y saldrás ganando respecto a la situación anterior.Una de las mejores cosas de la recesión es la oportunidad radical de cambio y crecimiento. Puedes usar este tiempo para empezar un negocio muy pequeño. Puedes descubrir en qué eres realmente bueno y usar esas habilidades para ayudar a los demás. Puedes ser extraordinario en un trabajo ordinario, y encontrar el motivo para levantarte cada mañana. Puedes cambiar completamente la trayectoria de tu vida, y cuando después la gente te pregunte cuándo ocurrió, podrás decir, “bueno, ocurrió durante la peor crisis económica de mi vida…”
A modo de Resumen. Oye, sé que la cosa está difícil. Pero también creo profundamente que este es un momento de un impresionante crecimiento personal. Muchas personas van a quejarse y esperar a que otros les ayuden. El resto de nosotros vamos a cambiar, adaptarnos y tener éxito en la nueva tierra de la oportunidad.
¿Dentro de un año, dónde estarás?Mi teoría sobre donde voy a estar dentro de un año no tiene nada que ver con los supuestos responsables de la crisis económica. Tiene que ver con las opciones que elijas a partir de ahora.
Si crees que te llevará más de un año, no te preocupes, pues lo normal es que lleve más tiempo. Yo creo que un año es una previsión muy optimista, no? :-)
Excelente post, como acabo de comentarle también a Carme. Me ha encantado. Por proximidad, la desaparición del empleo tradicional como garante de seguridad supone la caída de un paradigma fundamental. Veo un futuro donde las marcas personales, la artesanía en red (no sólo en consultoria) y otras formas de emprendizaje cambiarán la forma de hacer y entender las relaciones comerciales.
JM
En el blog de Jose Miguel Bolivar… El Consejo de los Viernes: Déjate de Tonterías
Fabuloso Post.
Quejarse es humano pero rectificar y ver que en un problema hay dos tipos de solucion simpre es mas complejo:
1) Intentar cambiar la realidad y cambiar tu mismo.
2) Si con eso no cambias nada , cambia el problema
La pregunta de ¿donde estas en un año? te la puedes hacer mil veces pero te das cuenta que generalmente no aciertas :)
Saludos
En el blog de Gorka… Cuento Clasico
Creo que la crisis está cambiando comportamientos sólo a corto plazo, y cuando la cosa repunte y se estabilice la economía las actitudes habituales tomarán el control. Aunque determinadas personas se estarán replanteando su vida profesional en estos momentos, creo que en general no habrá cambios importantes porque aunque el estilo de vida consumista sufra un poco eso no significa que cambie la cultura, no?
Gracias, JM y Gorka por pasar. :-)
Cada dia estoy más convencido de que, como decia alguien de quien no recuerdo el nombe, el sentido común es el menos común de los sentidos. Porque al fin y al cabo no dejan de ser “recetas” hechas desde la más pura lógica. Sin embargo, ha tenido que pasar todo esto para que nos demos cuenta de ello. Una lástima. Por lo mesno, esperemos que haya servido para algo.
Carpe Diem
En el blog de Cosechadel66… La Wikipedia mejora al DRAE
Pues lo dicho, Cosechadel66, que “darse cuenta” no necesariamente cambia la conducta a largo plazo. El sentido común tampoco. :-)
El pasado mes de enero escribí una entrada en mi blog ¿Cuántos? (http://ensalada-deortigas.blogspot.com/search?updated-max=2009-02-11T23%3A55%3A00%2B01%3A00) que responde a su planteamiento. Pero cada día que pasa creo más que es cierto que necesitamos tropezar en la misma piedra muchas veces hasta corregir el camino o decidirnos quitar la piedra.
Un saludo.
En el blog de Thomas… zoomorfos.
Thomas, es que tropezar te hace aprender a tener cuidado por el camino que pisas, al menos durante un tiempo, pero no necesariamente te enseña y te motiva a cambiar de caminos o a probar otros…
¡Excelente entrada! La comparto al cien cien por cien. Me ha recordado que:
“Si algo bueno tiene cualquier crisis (económica, social, política, familiar, personal o espiritual) es que nos obliga a cuestionarnos las cosas. Evita la modorra y el acostumbramiento, nos obliga a volver a lo esencial. Hace posible que podamos hacer algo mejor que adaptarnos al cambio: adelantarnos y ser agentes del nuevo cambio necesario”.
Es un fragmento de la primera entrada de un blog, que aconsejo: http://www.nuriachinchilla.com/
A todo SÍ. Pero como siempre la cuestión es otra. Estamos en crisis pero cuando se termine “nada” volverá a ser igual. No es una cuestión de sobrevivir hasta que se termine, es un problema distinto. Si sobrevivo… ¿Cómo será el futuro? ¿Que será lo que tendré que saber hacer? Si existe un futuro, ¿cómo será? Las cosas no son sencillas… pero… lo que no podemos continuar pensado es que las cosas volveran a ser iguales. No lo seran… Seran distintas y ahí está el “quid” de la cuestión. Tenemos que conseguir pensar de una manera distinta…
¿Que si volveremos a las andadas? Hummm, ¿a qué te refieres?
Estoy de acuerdo con Carme en que sea como fuere habrá cosas que no volverán a ser iguales.
Quizá entonces volveremos a acomodarnos? Es posible, pero hasta entonces tenemos camino que recorrer. Los cambios de modelo me imagino que llevarán su tiempo.
Cuanto antes nos pongamos manos a la obra, mejor, no?
En el blog de Carme… Técnica de Judo ante la crisis
Desde un punto de vista económico, sabemos que la actual crisis se debe a la falta de liquidez del sistema financiero. Esto provoca una reducción en la concesión de créditos, de manera que se reduce el consumo y la inversión, esto finalmente provoca el aumento del desempleo.
Teniendo en cuenta este análisis económico, nuestro comportamiento se adaptará a las circunstancias en la medida de lo posible. Pero el sistema socio-económico-cultural sigue siendo el mismo. Cambia “el como”, las formas, pero en esencia todo sigue siendo lo mismo, quizás a partir de ahora controlen más los mercados financieros.
En el momento que se abra el grifo del crédito, aumentará el consumo y por tanto volverán algunos comportamientos anteriores a los de la crisis, como por ejemplo el despilfarro. Quizás no sean iguales del todo pero seguro que bastante parecidos.
Creo que la crisis del 29 o los duros años de la posguerra de la guerra civil española o de la segunda guerra mundial son ejemplos de tiempos muchos más duros que los nuestros.
Después de las vacas gordas vienen las vacas flacas y así sucesivamente. Las crisis son cíclicas.
Por cierto, antes, durante y después de la crisis, siempre habrá grupos de personas, comunidades, organizaciónes o simplemente personas individuales que intentarán mejorarar las cosas.
¿Las crisis nos obligan a cuestionarnos las cosas? Tal vez, pero no necesariamente cambian nuestro comportamiento.
La inmensa mayoría de personas que han perdido sus empleos por cuenta ajena razonablemente pagados no cambian su actitud profesional o se vuelven más emprendedores. Simplemente esperan que pase la tormenta y seguramente rebajarán sus expectativas aceptando empleos más precarios.
Me da la impresión de que en el mundo de los “recursos humanos” debatimos mucho y utilizamos grandes conceptos, ponemos nombres a las cosas y montamos teorías sobre, por ejemplo, cómo una crisis puede generar oportunidades, etc. Pero me parece que no miramos demasiado a esos humanos de los que hablamos.
¿Cuántas personas que conocemos están realmente cambiando de estilo de vida profesional debido a la crisis? ¿Y cuántas simplemente se están adaptando? No dudo que algunas personas si se replantearán sus vidas profesionales, pero estadísticamente la cosa será insignificante. Creo que el análisis sobre cómo nos cambia la crisis hay que hacerlo más basado en estudios de caso que en análisis sociológícos que son bastante engañosos.
Eso sí, con o sin crisis, como dice Gregor, siempre habrá grupos de personas, comunidades, organizaciónes o simplemente personas individuales que intentarán mejorarar las cosas.