Un filósofo cínico vivió largo tiempo en la Corte del rey Pirro. Pirro, que era un conquistador, una especie de Alejandro de los persas, estaba constantemente haciendo planes de invasión y de conquista. Un día llegó donde el filósofo, quién se encontraba tumbado a la sombra de un árbol en el jardín del palacio, y le dijo:
– He hecho un plan y mañana mismo salgo con mi ejército. Vamos a cruzar el estrecho y a conquistar toda Grecia, todo el Peloponeso.
A lo cual respondió el filósofo:
– Muy bien. Y después, ¿qué?
– Después continuaremos adelante, hacia Italia, respondió Pirro.
– ¿Y después?, interrogó nuevamente su interlocutor.
– Pues seguiremos y procuraremos llegar hasta el final del mundo.
– Bueno, muy bien, ¿y después?
– Bueno, ya después habré conquistado todo el mundo.
-¿Y entonces qué?, volvió a preguntar el filósofo.
Y dijo Pirro:
-Entonces podré descansar.
Ante lo cual el filósofo concluyó:
-Bueno, si de lo que se trata es de descansar, por qué no te sientas aquí conmigo bajo este árbol y empezamos directamente, sin tanto trajín.
La historia, en el blog La maldición de Sísifo
Hummm!! Yo diría que un título podría ser…”Primero lo importante y luego lo urgente”
Slds
SM
yo le podría, algo como: Lo importante no es la meta sino el camino
@SENIOR, otra reflexión complementaria podría ir en la linea de que lo urgente no va a dejar ver lo importante.
@LINA, y aprovechando tú título, también podría decirse que todos los puntos y momentos del camino pueden ser una meta.
Una dirección, cero sentido.
– Conquistar pa ná es tontería!
– Menos ansia de conquista y más relax.
@ANNA, qué buena.
Y @GREGOR, excelente, qué arte ¡
Pero fijaros en una cosa, realmente la mayor parte de las actividades que nos mantienen ocupados y satisfactoriamente activos no tienen un fin o un sentido a largo plazo ni un valor existencial de gran calado.
¿Seguro que “el sentido” es lo que nos impulsa a hacer cosas, o son las cosas que hacemos con cierta regularidad o satisfacción cotidiana las que dan sentido a la vida?
Digamos que la conquista, en este caso, no tendría como fin conquistar, sino que simplemente este es el hábito y la ocupación que a este hombre le mantiene activo y entretenido.
Quizás mi título sería “Que nadie te pare”
Lina, ayer justo hablaba de la importancia de recorrer el camino a raíz de otra reflexión diferente.
Yoriento, la foto me recordó esta que conseguí en Santander
@JAIME, otra alternativa complementario podría ser “que buscar un sentido no te haga perder el que ahora llevas” ;-)
(los enlaces que has puesto están, pero no se sí están mal o no se aprecian, porque todavía hay detalles por pulir en el blog. Sorry)
¡Lo primero es lo primero, y lo segundo lo tercero… Cuestión de prioridades!
@Carme, ay, la reflexión sobre los valores y sus prioridades ¡ En el caso de nuestro amigo Pirro, su motivación es ganar y conquistar territorios, para eso le educaron y para ello se entrenó desde pequeño. Ahora viene un coleguita filósofo y le dice, pero hombre, no ves lo bien que se está bajo éste árbol, pa qué tanto guerrear? Pero ese es un análisis racional que no tiene en cuenta los aspectos motivacionales, es decir, se centra en decir cómo debería ser las cosas en lugar de partir de CÓMO FUNCIONAN actualmente.
Aparte de lo complicado y largo que es cambiar esos valores motivacionales por otros menos bélicos, a corto plazo y en ese contexto, ¿cuánto tardarían los enemigos actuales de Pirro en merendárselo si cambia de vida? Me recuerda las vidas de esos gansters de película que no pueden retirarse aunque quieran ¡
Pues yo le pondria dos, en f(x) del cartel y del texto:
Al Cartel: Re-Afirmacion, Re-Negacion u Ojito que os vigilo :)
Al texto: Prioriza majo. Para que tantas vueltas si la meta esta al lado?
Saludos
Gorka
Yoriento,
Tu último comentario me recuerda una historia de gestión de recursos humanos. Era un taller de mecánicos dirigido por un jefe muy autoritario. Aunque las relaciones eran muy tensas, los trabajadores estaban acostumbrados a su forma de dirigir. El sustituto de este jefe cambio el estilo de dirección, era más flexible o más democrático. El resultado fue que los trabajadores se lo œmerendaron . Realmente estos trabajadores solo sabían interactuar con un jefe autoritario.
Si lo extrapolamos metafóricamente al entorno empresarial y observamos a muchos empresarios cuyo único fin es “amasar” sin más objetivo que ese podríamos titularlo:
“Hiperactividad hacia la nada”.
Muy buena historia que da que pensar.
@GORKA,
¿no crees que tal vez no sea un problema de priorización?
Si el amigo Pirro ya ha priorizado: quiere batallar y no descansar bajo un árbol leyendo libros, lo que le motiva realmente es conquistar.
Lo que pasa es que a la hora de explicarse, y más ante un filosofo preguntón y retórico por el medio, como nos pasaría a todos sus respuestas no necesariamente van a describir sus motivaciones reales.
El rey quiere conquistar no para al fin descansar, sino porque… le gusta conquistar en sí mismo, no? Y es que dar razones de por qué hacemos algo no significa necesariamente dar las razones reales ;-)
@GREGOR,
Qué buen apunte ¡
Creo que eso de perseguir los sueños es una recomendación que está sobrevalorada como responsable de la mayor parte de nuestras vidas.
Tal vez en un primer momento, en el caso de que yo fuese el rey, mis “autoinstrucciones” sobre lo que debería hacer con mi vida o las metas importantes que me marco, y/o me marcaron en mi educación como futuro monarca, fuesen las de conquistar el mundo, y esas reglas verbales (“un rey debe ganar territorios”) es lo que me llevó al principio a guerrear.
Pero una vez llevo algún tiempo haciéndolo, batallando, saboreando victorias, y siguiendo siempre hábitos parecidos, lo que motiva y mueve mi comportamiento cotidiano ya no es tanto ese sueño existencial de ser el rey más conquistador, sino las cosas que van pasando en el día a día y que ya SON mi vida.
Si cada uno de nosotros intenta responderse a esa misma pregunta, ¿por qué hago lo que hago?, seguramente acudiremos a motivos o razones grandilocuentes, pero los motivadores reales que “controlan” gran parte de nuestra vida no están en el futuro lejano ni en las grandes palabras (aunque las usemos para explicarnos), sino en las propios cosas en que nos implicamos cotidianamente.
Siendo un tanto simplista, en psicologia diríamos que nuestras vidas no están motivadas tanto por nuestros supuestos objetivos y razones que nos damos de por qué hacemos esto o lo otro, como por las cosas concretas que conseguimos y que nos pasan haciendo cosas.
Por eso los empleados con un supuesto jefe autoritario, que tal vez, imaginemos, siempre tuvieron el sueño de trabajar con independencia, con su propio negocio, o bajo la supervisión de un directivo flexible, tienen unos hábitos y una vida razonablemente satisfecha motivada por el día a día, y no por esos supuestos objetivos.
Y es que a veces los pensamientos sobre lo que supuestamente deberíamos estar haciendo, nos impiden disfrutar de lo que realmente hacemos.
@RAFA,
buena expresión, esa de hiperactividad hacia la nada. Lo que pasa es que es subjetiva, porque lo que para unos es hiper para otros es hipo, y conquistar territorios puede ser criticable, pero sin embargo querer que nuestras casas y propiedades sean lo más numerosas posibles, y una cierta ambición suelen ser considerados razonables, no? Y con esa subjetividad es difícil comparar estilos de vida, yo creo.
Creo que en el contexto de esta historia, yo saco tres reflexiones prácticas, a ver qué te parecen:
1) En primer lugar, que lo importante es que uno sepa o que sea consciente, de si está satisfecho realmente con su tipo de vida actual; y también de las pequeñas mejoras, objetivos y avances concretitos (nada de grandes cambios) que tiene previstos dentro de ese mismo estilo de vida, si es que los tiene previstos.
2) En segundo lugar, es interesante conocer e ir barajando otras alternativas al estilo de vida actual, y valorarlas pero no en abstracto, sino valorando pros y contras y esfuerzos concretos que habría que hacer para dar el salto a alguna de esas alternativas supuestamente mejores.
3) Y en tercer lugar, dejar de plantearse grandes objetivos relacionados con el estatus y los valores y motivaciones que uno supuestamente tiene o debería tener, y decidir mirando y conociendo las motivaciones diarias y concretas que son las que verdaderamente hacen girar nuestra vida, aunque de vez en cuando uno se sienta insatisfecho, quién no ¡
Pues yo veo claramente que es un coaching.
Título: El coaching persa.
Poco se inventa, todo se rehace
Muy Buena Reflexion.
La conquista por la conquista.
No te gustará comer ciervo? ;)
Saludos
Gorka
Vale a todo, pero yo pienso que un sueño debe engendrar un nuevo sueño (no el mismo)…
@FELIX, un día escribiré sobre eso del coaching, porque hay muchos tipos de coaching, tantos como inteligencias emocionales. Ya puedes imaginar lo que argumentaré en ese futuro artículo: “llámale como quieras, pero detalla lo que haces concretamente y así podremos averiguar qué es y para qué sirve.” ;-)
@GORKA, no me gusta mucho la carne en general, pero si es una metáfora, ya me dices ¡ ;-)
@CARME, ya se ha comentado mucho por aquí: la mejor forma de generar motivación y satisfacción en la vida es plantearse objetivos. Yo me quedo más con los concretos que con los grandes sueños, tú no?
Tal vez ponemos demasiado empeño en mirar muy lejos sobre lo que podríamos conseguir y que supuestamente nos gustaría mucho conseguir, y le dedicamos muy poca energia y cariñito a lo que podemos obtener mañana y a seguir desarrollando aquellos valores que ya nos interesan hoy.
Cada día me gustan más tus historias. Además Sísifo es un viejo conocido…
Tener cierta ambición es totalmente razonable e, incluso, necesario. Aún tener mucha ambición es razonable si esta no te ciega. Si tomamos la historia de forma literal la vemos como la “ambición por la ambición”. Si tu objetivo final es “descansar”, descansa antes, que seguro que a mitad de camino tienes más que suficiente para ello. Y si importan unas personas y un entorno, lo que debes hacer es “descansar” con ellos o podrás perderlos en el trayecto.
En cuanto a las reflexiones prácticas son semilla de tres amplios posts con los que se podría tirar de la lengua a más de uno.
@MIGUEL, un placer verte por aquí, construido también en parte con tus consejitos ;-)
@RAFA, claro, la historia tiene muchos matices y diferentes semillitas. Me ha gustado eso de “descansa antes”, porque cuando hemos probado parte de aquello que en teoría queremos conseguir, lo mismo cambiamos de opinión ¡ :-)
¿Qué es un sueño? Para mí un sueño es una idea que quiero poner en marcha, estudiar una carrera o crear mi propia empresa, y un sueño debe ser capaz de generar un nuevo sueño: ¡ya tengo la carrera y mi empresa! ¿Y ahora qué? Para seguir manteniendo la ilusión y la emoción de levantarse cada día hay que seguir generando ideas y poniendolas en marcha.
Desde mi punto de vista no es una condena como la de Sísifo, sino una aventura…
¡Todo es una simple cuestión de idioma!
Yo pondría dos. Uno con repecto al cartel y otro respecto a la historia.
Con respecto al primero: “Defíname lo que es un segundo”.
Con respecto a la segunda: “Empezar por lo que uno puede y no por lo que quiere”. O más en clave de humor: “Cansarse pa ´na, es tontería”
@CARME, estamos de acuerdo ¡ ¡
El sueño como una verbalización o una imagen que nos hace seguir un camino cuyas avances o retrocesos sean evaluables, no deja de ser un objetivo, ya sabes, de esos que motivan y apasionan, como dices.
Pero muy frecuentemente eso de los sueños se utiliza como arma arrojadiza contra la propia vida cotidiana, como un escape de los problemas diarios, como una queja: “no me gusta lo que hago, porque mi sueño es esto o lo otro”.
Todo aquellos supuestos “sueños” en los que no estemos implicados un poquito de forma frecuente se quedarán en meras excusas y/o en ilusiones, en expectativas que dan conversación pero que no sólo te harán vivir mejor sino que además te impiden desarrollar tus posibilidades actuales.
@JOSE LUIS, excelente aforismo ese de dedicarse más a poder que a querer, y tiene mucho que ver con esa frase que ya utilizamos hace unas semanas: cuando buscas empleo,sueña con lo que quieras, pero hoy haz lo que debas ¡ :-)
Hay que ser feliz con lo que se tiene, mientras se persigue lo que se desea. Así que Pirro, échate a la sombra y sé feliz y, mientras vayas conquistando el mundo, acuérdate de volver bajo el árbol y seguir sintiéndote feliz con lo que haces.
@NACHO, buena frase esa la de aceptar y/o disfrutar de lo que se tiene mientras se indagan otras alternativas, un difícil equilibrio, sin duda. La clave, supongo, está en dedicar mucho más tiempo y esfuerzos al presente y una pizquita diaria mirando al futuro, con eso debería bastar ¡ :-)
-=+, -es+, menosesmas, menos es más, …