¿Hay formas de elegir estudios que sean seguras? ¿Qué estudiar? ¿Por qué estudiamos lo que estudiamos?
¿Por qué hacemos tanto por acumular títulos?
¿Y por qué hacemos tan poco por elegir los estudios de forma más razonable y por tomar mejores decisiones profesionales?
En este artículo, no voy a contarte cómo tomas buenas decisiones académicas, al contrario, voy a detallar las 10 formas de elegir mal los estudios.
En alguna ocasión he resaltado la mala práctica que implica ofrecer consejos no solicitados por parte de los supuestos expertos en orientación y coaching.
Generalmente las personas ya sabemos lo que tenemos que hacer, lo que pasa es que no lo hacemos. Decirle a alguien cómo vivir o qué NO estudiar cuando ya lo ha decidido, cómo mínimo, es de mal gusto. La precarización del mercado pone las cosas difíciles a los trabajadores, incluidos aquellos cuya formación académica está sobreofertada y que están obligados a subemplearse aceptando salarios bajos.
Ya sabemos de antemano que algunas titulaciones pueden ser pasaportes laborales para viajes con poco glamour y, a pesar de ello, las seguimos cursando. Y esta regla puede hacerse extensiva a muchos ámbitos de la vida. Eso sí, las quejas y lamentos posteriores sobre lo malito que está el mercado de trabajo vienen de serie. Equivocarse no es el problema en sí. Las complicaciones aparecen cuando uno se resiste a aceptar la responsabilidad de las decisiones tomadas y a afrontar de forma racional sus consecuencias, síndrome conocido como apechuguitis.
Y es que, tras años de estudios y expectativas, cualquiera se pone a hacer autocrítica. ¿Acaso el saber popular no hace lustros que viene confirmando que más vale fontanero en casa que historiador opositando?
Esa sobrevalorada leyenda urbana de que cada uno de nosotros tenemos una supuesta vocación a la que debemos seguir cual canto de sirenas, es un bulo como lo de la media naranja. Lo importante siempre es el zumo. Y hay muchas formas de exprimirlo.
El sistema es como es, más que imperfecto, pero nosotros somos como somos, animales de costumbres tozudos con la realidad y exigentes con nuestros deseos. Pero en fin, ya que se trata de cometer errores y de echarle la culpa a lo-dura-que-es-la-vida-y-yo-sin-saberlo, pues coño, vamos a hacerlo con elegancia y aplomo siguiendo a pies juntillas alguna de las 10 formas más seguras de equivocarse una o más veces en la elección de una titulación profesional.
Yo caí en la primera (como casi todos), y también en la tercera. Cuéntanos cómo te equivocaste tú.
LAS 10 FORMAS MAS SEGURAS DE ELEGIR MAL LOS ESTUDIOS UNA O MÁS VECES
(Nota: Cualquier parecido con la realidad de las situaciones descritas en este artículo es pura coincidencia. O no)
1. NO TE INFORMES SOBRE TODAS LAS ALTERNATIVAS POSIBLES
Llevas ya muchos años estudiando y ha llegado el momento de entrar en la universidad. Como muchos de tus compañeros, casi lo único que sabes hacer es aprobar exámenes y no tienes nada claro cuáles son tus intereses profesionales. Tal vez crees que te gustan los niños y la educación, o que no se te dan mal las matemáticas, los idiomas o la informática. Pero nunca te has planteado en serio tu futuro laboral, no has solicitado orientación profesional, ni conoces todas las alternativas ocupacionales que existen.
Recuerdas a un orientador que dio una charla en tu instituto que dijo que había 200 especialidades de FP, pero tú quieres ser universitario y crees que más o menos ya conoces las licenciaturas y diplomaturas que hay, al menos las más “normales”. Seguramente, te sorprendería saber que hay más de 3000 estudios en diferentes universidades. Pero tú no necesitas tanta información.
2. PIENSA EN TÍTULOS Y EN ESTATUS, Y NO EN TAREAS Y PROFESIONES
Te gustan las series Anatomia de Grey, y el Doctor House te pone, así que quieres hacerte médico/a. La sangre te da mal rollo, y tú eres más de letras, pero seguro que habrá alguna especialidad en la que no tengas que cortar ni coser a la gente. El médico de familia que te atiende en el centro de salud no está más de 3 minutos contigo, la cosa no puede ser tan difícil. Ser abogado defensor también sería chuli, “protesto, Señoría, mi cliente es inocente”. No tienes ni idea de las funciones reales ni de las exigencias del mundo de la abogacía, pero será parecido a lo que sale en la tele. Supones que con estudiar unas oposiciones y conocer las leyes será más que suficiente. Y si no, informático, siempre con tu ordenador portátil en aviones de acá para allá solucionando problemas.
No se te ocurre que si no planificas bien puedas pasarte el resto de tu vida picando código. O profesor, porque aunque tú no tienes ni idea o nunca te ha interesado la psicología conductual lo más mínimo, ni sabes cómo trabajar conflictos con adolescentes y familias, tampoco crees que la cosa sea tan complicada. Además, tienes muy buena mano con tus sobrinitos, y te ves como un maestro/a bondadoso dando clases magistrales. En fin, que sea lo que sea, antes ser y parecer un titulado universitario que un vulgar electricista de la FP.
3. ESTUDIA LO QUE TE PILLE MÁS A MANO
No te planteas estudiar fuera de tu ciudad, ni mucho menos trabajar. Y del extranjero, ni hablamos. La movilidad geográfica no está hecha para ti. Como en España, en Córdoba, en Andalucía o en…, en ningún sitio. Vas a decidirte entre las alternativas que tienes más cerca, rechazando otras posibles opciones por lejanas o simplemente por desconocidas (ver punto 1). El amor de cercanías te hará elegir, seguramente no a alguna de tus medias naranjas, sino a aquella que cae más cerca del árbol sobre el que estás recostado. Estudiar en las universidades locales o más próximas al domicilio de manutención familiar y al del novio/a y amigos/as, sólo por ser locales o próximas es uno de los errores más frecuentes. Pero seguro que tú no lo cometes.
4. HAZLO POR TUS PADRES. O POR TUS COLEGAS
Tus progenitores no pudieron llegar a la universidad, ni siquiera terminaron la EGB. Por eso te educaron para que hicieras una carrera y vengaras su afrenta como es debido. No importará la titulación que elijas, todo el mundo acaba encontrando trabajo tarde o temprano; tampoco el dinero ni el tiempo que tengas que dedicarle, Dios proveerá; ni que vayas renqueando en los estudios con triste mediocridad, total, ya aprenderás cuando termines. Lo importante es ser licenciado. Y la familia es lo primero. Sé un buen hijo.
También puede ser que todos tus amigos vayan a la uni y tú no quieres ser menos. ¿Qué sería de tu vida sin ellos? Tantos botellones entrañables, esas luchas con la Wii, los campamentos y las convivencias, conectados a todas horas por Messenger, SMS y Twitter para contaros todo, las discotecas de tarde a la que os llevaban y traían vuestros padres, las discotecas de noche… Todo eso que te gusta compartir con tu cuadrilla podrá seguir en la universidad si estudiáis lo mismo. La carrera es lo de menos, y el futuro ya se irá viendo. Lo importante es la amistad.
5. ACABA SIEMPRE LO QUE EMPIEZAS
Tras el primer o segundo año de licenciatura has comprobado que la cosa no es como imaginaste, que algunas materias te resultan imposibles o que la mayoría te interesan bastante poco. Incluso has llegado a pensar que te has equivocado. Viste el anuncio ese de Cocacola en el que el que decían “fuerte ese aplauso a la que dejó abogacía en 5º año para empezar Veterinaria, vamos, así, aplaudamos bien fuerte a todos los que prueban en la vida, ¡si señor!”. Menos mal que eres una persona razonable y sabes que lo mejor será terminar. Total, sólo te quedan 3 o 4 años. ¿Cómo vas a cambiar ahora? Tú familia se lo tomaría fatal, tendrías que dar muchas explicaciones, y ni siquiera tienes claro qué otra cosa podrías hacer. Ya que has empezado, acaba. Venga, que una vez que tengas el título seguro que se abren muchas puertas.
6. PERSIGUE UN SUEÑO SIN TENER UN “PLAN B”
Elige la licenciatura teniendo en cuenta sólo lo que te ilusiona en la vida, aunque tenga malas perspectivas laborales o sin ni siquiera haberlas considerado mínimamente. Has leído en un libro de autoayuda (que no ayuda) que la gente que “cree en sí misma y lo intenta con fuerza” consigue lo que se propone. Los que no lo logran es por falta de fe, seguro. Tal vez quieres hacer periodismo y te imaginas como jefe de redacción de un gran periódico nacional, o como reportero de guerra, como el Reverte. Pero no consideras ni por asomo la posibilidad de que sólo llegues a conseguir empleos temporales como reportero o empleado en pequeñas televisiones o empresas locales. Quizás te imaginas dirigiendo un gran museo de una capital europea. Sí, Historia del Arte es la mejor alternativa para ti. Conoces algunos titulados en esta materia a los que no les va nada bien y que no pensaron en planes alternativos, pero seguro que a ti no te pasa.
7. RENUNCIA A CUALQUIER SUEÑO Y RESÍGNATE
Elige lo fácil por ser fácil, no por ser mejor. Estudiar lo que realmente te interesa, y en una buena universidad, tal vez te exigiría desplazarte a otra ciudad y dejar a tu familia y a tu pareja. Además es posible que haya materias para las que deberías prepararte y esforzarte mucho, quizás incluso volver a presentarte a la selectividad para subir la nota y poder entrar. Eso sin hablar de los gastos y el esfuerzo que supondría. Y cuidado con las carreras difíciles. Mejor no complicarse la vida con unas Matemáticas, Ingeniería o Medicina. Mejor hacer alguna otra que, aunque no te guste, puedes sacar con más facilidad, tal vez Pedagogía, Derecho, Sociología…
Total, si seguramente acabarás haciendo una oposición porque lo demás no tiene futuro… Y como aprueba la gente que se lo propone y cree en sí misma, pues eso. En fin, que cuando estés titulado podrás hacerte funcionata, o si no ya conseguirás trabajo como sea y en lo que sea. Siempre habrá tiempo después para retomar otros caminos que te gusten más. O no.
8. CON SACAR LA CARRERA SERÁ SUFICIENTE
Tantos años de estudios y esfuerzos tienen que ser más que suficientes para conseguir buenos empleos. No te preocupes por planificar bien tu especialización y cualificación profesionales. Con algún que otro curso del Servicio Público de Empleo y algún master que no sea demasiado caro para completar el currículum tienes el éxito asegurado.
Tampoco te apliques demasiado en conocer el mercado de trabajo y cómo funcionan y cómo buscan a sus trabajadores las empresas que te interesan. Ya lo descubrirás cuando estés dentro. Piensas que el envío o presentación de curriculums es de las mejores técnicas de búsqueda de empleo, aunque sepas que la mayoría de tus conocidos que trabajan lo hacen gracias a su red de contactos, o porque han aplicado técnicas de networking, incluso los emperadores.
Seguro que en cuanto te inscribas en Infojobs empezarás a recibir ofertas de empleo cada semana. También has decidido que no debes especializarte nunca, así serás más polivalente y tendrás más oportunidades de empleo. Y los idiomas ya los irás aprendiendo cuando haga falta, porque por el momento no has pensando moverte de tu ciudad. Quieres ir paso a paso, ya habrá tiempo después si es necesario. Y con las aplicaciones Office, la contabilidad, la informática y cualesquiera otros programas o herramientas profesionales, lo mismo, que ya te especializarás cuanto te lo pidan.
Por el momento, con unos cuantos títulos de cursos relacionados puedes ir aparentando. Además, ya aprenderás cuando te contraten, para eso están los periodos de prueba.
Ah, y sobre eso de plantearte ser emprendedor o tomar iniciativa ni hablar que has oído que que es muy difícil. Tú no has estudiado tantos años para deslomarte gestionando un negocio, sino para trabajar de 8 a 15 h. Para qué has llegado a ser licenciado si no.
9. TU ÚNICO OBJETIVO ES SER FUNCIONARIO
Elige la carrera pensando sólo en unas futuras oposiciones. Nada de trabajar en la empresa privada, aprender profesiones concretas, o tener algún plan B (ver punto 6). Sólo codos y codos. Conoces a mucha gente que lo ha conseguido, bueno, a dos amigos, así que por qué tú no. Es cierto que otros colegas, tras haberlo intentado sin éxito, ahora con 30 años viven con sus padres y se encuentran totalmente fuera del mercado de trabajo, pero eso no te va a pasar a ti. Ni de coña. Primero estudiarás, por ejemplo, una licenciatura en Derecho, que vale para todo. Podrías ser notario, o inspector de hacienda, que se gana una pasta, aunque cueste unos añitos. Y si la cosa no sale bien, puedes hacer el CAP y estudiar algunas oposiciones a profesor que es más fácil. Y en el peor de los casos, siempre podrías presentarte a exámenes para administrativo o conserje para pillar alguna interinidad. Será por alternativas.
10. SIGUE EQUIVOCÁNDOTE. HAY TIEMPO
No importa la edad y la experiencia que tengas, siempre puedes volver a cometer alguno de los errores anteriores. Aunque ya lleves uno cuantos años como titulado universitario sin encontrar empleo de lo tuyo, y aceptando trabajos precarios, sigues invirtiendo en títulos por si acaso, que si un Master en Prevención de Riesgos Laborales por aquí, que si otro en Calidad por allá, uno en Recursos Humanos, un poco de Informática, nunca se sabe. No hace falta que te replantees tus objetivos y enfoques profesionales. Tú ya haces lo que tienes que hacer, lo que siempre has hecho, y el empleo ya mejorará. De todas formas lo más que puede pasar es que tu vida profesional siga siendo poco motivadora y/o precaria, pero, total, sólo son 8 horas diarias y todo el mundo está más o menos igual. Y al final lo importante es tener salud, que la familia te quiera y poder seguir pagando la hipoteca y la pantalla plana. Amén.
Y ya sabes, en caso de duda, sigue eligiendo el mismo camino, el “difícil”. Más vale lo malo conocido.
El artículo fantástico. Ahora para mí fatal, no veas como me he animado cuando he comprobado que soy un crack perdiendo el tiempo. Me declaro reincidente en la primera, tercera, quinta y por supuesto la décima..aunque si me fijo bien por otras cuantas he pasado en mi época estudiantil…ejem.. ¿para cuando un chistecito?
Oh my god! Esto es un artículo “elicitador-toca narices” y lo demás es tontería. Creo que no se lo recomendaré a mis conocidos, me gustaría conservarlos.
Buenísimos los dos videos.
Gracias!
Reincidente, la vida es dura pero da oportunidad y, sobre todo, tiempo. :-)Mejor no mirar atrás…ni adelante.
Y Beatriz, dejame patentar la fascinante “elicitador-tocanarices”, anda, porfa. Es lo más excitante que me han dicho en mucho tiempo.
Bastante bueno, simplemente quisiera diferenciar entre “picar MAL código” y desarrollar buen software, que son dos cosas muy diferentes, a la primera se dedica mejor o peor pagada gente que estudió lo que no le gustaba y se ha encontrado con que le pagan bien (los menos a día de hoy), es de lo único que se coloca (“para programar vale cualquiera” dijo aquél).
Otros estudiamos algo que nos convencía, coloquialmente “picamos código”, pq para saber diseñar buenso sistemas no te puedes salir de las trincheras, que es la gran meta de esos que se han metido y no les gusta ni saben.
Por lo demas el artículo muy majo, en especial ese incapie que se hace en los “opositores”, y por extensión funcionarios, verdadera lacra de la sociedad.
Cómo se juzga cuando no se tiene ni idea. La lacra es la precarización laboral cuando externalizan un servicio en las AAPP en vez de que el trabajador pueda optar a un empleo estable. Otra cosa, son las gestiones que lleven las AAPP para controlar a su personal interno.
Cierto, Raistlin, picar código o cualquier otra tarea por muy procedimental que esa, tiene sentido cuando sirve a un fin… Lo que se echa de menos es que le peña se siente un poquito para diferenciar entre medios y fines, que la cosa no está mu clara últimamente.
Tras las lágrimas vertidas (le echaré la culpa a la risa provocada por los minutos videomusicales ofrecidos) seguiré con el plan, toca ahora tema 7: Políticas Públicas de Manteniento del Empleo, otra ironía…
Si hay más formas seguras de elegir mal los estudios, ¡seguro que las cumplo también! :-)
Efectivamente, estudiar bien ese tema 7 puede hacer más probable el mantenimiento del empleo. Al menos el tuyo en un futuro aún lejano. Vivan las lágrimas cuando son elegidas ¡ :-) (o al menos no indeseadas)
Buen artículo…pero en clave pesimista. Mejor hubiera sido enfocarlo más optimistamente.
Quejarse de todo es fácil y con nuestras quejas esperar que otro lo arregle…
Si queremos cambiar el mundo debebos empezar por cambiarnos a nosotros mismos.
Totalmente de acuerdo. Ahora falta decir el cómo. O mejor, los “cómos”. Y en la línea de Bowlby, es con el apoyo adecuado, y conectando a través de otro con la conciencia de la realidad de lo que hacemos . (Por no decirlo en negativo, que seria ” la independencia no ayuda”).
Hola Anónimo, el enfoque del articulo es inverso (formas de elegir MAL…) pero más que el pesimismo desanimador he intentado encontrar la ironía despertadora.
Recomendar hacer aquello que normalmente ya hacemos mal de por sí, es una técnica paradójica, una forma de ver que si podemos elegir el lado oscuro, podemos también hacer lo propio con alternativas mejores.
Pero en todo caso prometo ser más humorístico y “proponedor” en próximas entregas ¡ :-) Un saludo.
Un antiguo amigo mío que ha llegado, por lo menos, a catedrático de universidad (hace tiempo que no sé de él) empezó a estudiar psicología por que estaba colgado de una tía que se matículó en esa carrera (y la cosa no pasó a mayores, no te creas). No subestimes los errores, brother.
Puede que no importe lo que estudies ni porqué sino qué es lo que eres capaz de sacar de cada ocasión o episodio biográfico.
En definitiva “uno nunca sabe para qué se está entrenando” ¿no?
¡Salud!
Siempre que llegar a catedrático sea algo por lo que merece la pena entrenarse :-) No debemos subestimar los errores como fuente de aprendizaje y de nuevas alternativas, cierto, pero cuidado con que ellos no nos subestimen a nosotros. ;-)
a mi me ha encantado el articulo. Lo he guardado para usarlo en el curro (orientadora) lo he mandado a sobrinos/as en la “edad”, hijos/as de amigos, etc. También un poquito de “por favor” para las personas que buscamos curros estables (aunque sea de funcionario) porque algunos/as vivimos de nuestro sueldo y no nos podemos permitir aventuras laborales, búsquedas espirituales, etc.. ah!!! y no lo digo por pagar la hipoteca, eh?… que yo vivo de alquiler, me niego a mantener a los bancos (mejor dicho a los banqueros) viva la libertad!!!
Uy, el tema del funcionariado tiene muy buena prensa, pero estadísticamente es más fácil conseguir “estabilidad” laboral intentando otras cosas…Aparte de eso, plantearse como posible objetivo ser funcionata es algo razonable, pero no como UNICO objetivo,y sin plan B, que luego vienen los lamentos. Oye, ¿quién eres? Nos conocemos? Esto del anonimato de la peña me tiene confuso ¡ :-))
Me dice Lusita1 en un comentario que no quiere que publique, que trabaja en Baleares y que ella me conoce, pero yo a ella no… Cómo me gustan las relaciones asimétricas ¡ :-) Ya nos conoceremos…
Muy bueno
Como nos mueve la conciencia a todos. Por hacernos recordar lo que hicimos en su momento, y lo que hacemos cada día como orientadores….
Sí, es que orientadores y orientados estamos aquejados de parecidos males, prejuicios y hábitos… El primer paso, reconocerlos…El segundo paso, ir cambiando poco a poco algunas cositas. El tercer paso…Bueno, para este, ir al segundo paso de nuevo. :-)
Muy bueno el artículo, por desgracia me siento identificado en no sé cuántos puntos. Os cuento, empecé Derecho porque si lo terminas puedes abarcar muchos trabajos, bien, pues lo dejé y me cambié a Pedagogía. Después de 2 años me dije, pero qué coño, si no puedo aguantar a estos putos crios chillando alrededor de mi todo el día en clase y me piré de nuevo. Y por último, pues me metí a Turismo jaja, pa flipar, verdad?? Pues resulta que ya estoy a puntito de terminnar y como he trabajado en este mundillo diferentees veranos, porque aquí en España será por curros de hostelería y turismo, pues me he vuelto a decir: “qué coño hago yo metido en estos putos trabajos que me queman el espíritu, tengo que currar a deshoras constantemente y que como mucho voy a llegar a los 1000 ‚¬!!!” Pues aunque a diferencia de las otras carreras, estas las terminaré pero ya me estoy preparando unas oposiciones que pintan mu bien aunque ya se sabe lo que cuesta sacarlas y que se va a ser funcionario toda la vida y la verdad que eso tb me agobia.
Conclusión: tengo 25 años, he hecho todas estas sandeces en mi vida para acabar opositando y aún así no estoy ni convencido del todo de ello y sin embargo, me siento afortunado por haber vivido de aquí para allá, de haber pasado por 40000 estados de ánimo y al final sacar algo ligeramente en claro y es que con estas oposiciones ganaré 2000 ‚¬. Sí, sólo me ha movido el dinero, pero qué narices, me he movido por algo, no como antes. No es ningún sueño maravilloso ni exótico pero ya es algo. En esta vida cada cuál ha de encontrar su sentido o al menos aproximarse.
Perdón por el rollo, me he pasado pero mucho mucho.
Saludos a todos
En primer termino , el articulo es bueno.Pero muy desilusionante, para una generacion en la que no quisiera estar ahora mismo…y de la que aun sufro las secuelas de los puntos mencionados.
Tengo 31 años, empeze la carrera en 2001 Trabajo Social, un FP de la rama , por aquello de que la fp tenia mas salida, y un Master en Gerontologia ya que la poblacion es mayor …
Soy de esas personas a las que no las ha ido mal del todo. ( mucho esfuerzo, mucha oposicion ,superada, y vuelta y vuelta a empezar, porque al principio te faltaba experiencia y ahora que la tienes te falta un padrino.)
Hay factores externos que no dependen de ti, son externos pero si influyen en tu vida .
Eso si siempre se comete el error de pensar que eso a ti no te va pasar , hasta que te pasa.
En esa que dices 2000 euros, lo importante no son los 2000 euros es la vida que tienes que vivir para que esos 2000 euros sean alguna vez para toda la vida, donde tu quieres y como quieres y con quien quieres , y eso no garantiza que despues de un largo recorrido profesional 8-10 años lo vayas a conseguir.
Y en esto luego influye elfactor de la movilidad porque , resulta que como has estado en mil sitios tu pareja es de un lado , tu familia de otro y vives en otro, y ¿como arreglas eso?Ser funcionario no es lo mejor , es una opcion pero no la mejor.Los que estais a tiempo elegid otro camino antes de que os atrape este.
Me siento afortunada de tener un trabajo , el que estudie, y ademas de vivir dignamente.
Aun lucho por conseguir la estabilidad deseada, porque aquí tambien hay un lastre de inversion, (economica, material, y lo que es mas importarnte , vida años que no vuelven, destinos en los que estar y comenzar de cero una y otra vez ,porque lo importante es VIVIR )
Si volviera a tras y hubiera elegido otra carrera, ejemplo magisterio, hoy lo tendria mas facil..Al final para opositar …….
Suerte con tus proyectos e ilusiones… para toda la vida es la doble contradiccion de lo bueno y lo malo.Pero no todos tenemos la vida que queremos sino la que nos toca y mas en este momento actual de escasez de trabajo.
Un saludo.
Hola Anónimo,
interesante recorrido el tuyo, seguramente que daría para algunos articulo en Yoriento ¡
Con esto de la toma de decisiones hay mucha milonga…Yo creo que la mejor decisión es…la que se ha tomado.
Por supuesto desde una perspectiva externa y supuestamente racional, obtener conclusiones de los pasos dados, plantearse objetivos y planificar con cierto método, son técnicas más eficaces que ir eligiendo aqui te pillo aquí te mato ( ¿has visto el articulo “Amor de cercanías”?). Pero cada uno elige su estilo de vida, y lo que para alguien pueden ser errores, para otros pueden ser pruebas o experiencias…
Pero eso sí, los resultados son importantes, y ciertos momentos vitales tienen más peso que otros y pueden hacerte cambiar estilos y valores. Ya nos contarás cómo te va con las opos ¡
¿Nos conocemos?
Excelente artículo, no lo había leído (me pilló en mi época de sequía de Internet, ya se sabe).
Tal como lo cuentas, da miedo y todo de cometer el más mínimo error. Pero ten en cuenta que, a pesar de que la gente a la que te refieres sea mucha, la mayoría ni se plantea este tipo de cosas porque: ya han encontrado un buen trabajo y bien pagado, tienen éxito, etc, por lo que para qué se van a quejar, o bien para ellos trabajar por dinero ya se justifica.
El resto de la gente es la gente “perdida”, esos que nunca tuvieron muy claro lo que querían y han ido dando tumbos porque fueron niños consentidos y nunca se les exigió la más mínima responsabilidad. Esos, me parece a mí, seguirán toda la vida igual, y si mira lo que te dice el Anónimo de más arriba.
Porfineslunes,
planificar el futuro desde el presente es un coñazo, y analizar los errores del pasado para tomar nuevas decisiones es un coñazo. Así que dejarse llevar es lo fácil, es un problema de autocontrol.
Por supuesto que la vida puede ir bien sin esforzarse en planificar demasiado…pero si ademas planificas seguramente irá mucho mejor.
De todas formas es cuestión de cultura y hábitos. Para comprarnos una tele de plasma seguramente visitaremos muchas tiendas y haremos muchas cábalas. Para buscar empleo o elegir estudios o pensar en nuestro futuro profesional, curiosamente dedicaremos menos tiempo y esfuerzo. ¿Dónde he leído que la peña tarda dos dias de media en elegir la carrera universitaria?
ya se que esto tiene mas de 1 año de antiguedad pero aun asi quiero hablar.
te digo que soy de la argentina y tengo 17 para 18. desde mi anteultimo año busco que estudiar. soy de una ciudad chica y turistica, asi que mi unuca forma de el complejo de lejania seria estudiar por internet. para decidirme estaba seguro de algo relacionado con economia, al final decidi administracion de empresa, aunque mi vieja me hinchava para que sigiera dee contador(porque tiene mas salida). para elegir universidad si me enquilombe, consegi info de muchas univeridades de el pais, la mas cercana a 100 km por una ruta hecha pelota, pero un dia lei que la uba(unibersidad de buenos aires) era masomenos la 7 de el mundo, a si que dije”a la mier… con las demas, me voy a la uba”. otra ves contra mi vieja que queria que fuera a la de los 100km en mar del plata, a pesar de que se de que estoy demaciado acostumbrado a el amviente tranquilo de villa gesell(donde yo vivo) como para vivir en una ciudad grande. luego empeze con el tema de la vivienda, encontre casi a 20 cuadras un edificio especificamente para universitarios que solo da habitaciones y lo demas es compartido a 500 pesos(un poco mas de 100 euros). todabia trato de convencer a varios amigos para que vengan, porqu para ese precio tenemos que ser 5 en una piesa. creo haber zafado de la mayoria de las malas eleciones asta ahora. por ultimo, hay algunas expresiones que no les entiendo, por ejemplo “coñaso”, a mi entender es algo bueno ¿no?, seria algo paresio a “una masa” como decimos nosotros?
de paso esta buenisimo el video, no se como sea alla pero aca vale mas un titulo estatal qu uno privado
@EL-HENRY, me alegra que estas recomendaciones te hayan servido de referencia. Y siempre te será útil contar con algún orientador o alguna otra opinión que no sea la de tus padres ¡ :-) Gracias por comentar
Chapeau. No, si al final incluso resultará que elegí bien. Al menos, esto de la publicidad es tremendamente divertido.
María, elegiste bien? Pues a ver si nos cuentas tu experiencia, que no estemos siempre hablando de malas elecciones ¡ ¡ :-)
Gracias por pasar y comentar.
Hombre, si Derecho te parece fácil, se nota que no la has cursado.
David, pues tienes razón porque exige mucho esfuerzo de estudio. Pero la idea que quise destacar es que algunas carreras tecnológicas son realmente difíciles, y que muchas veces no se eligen porque se toman decisiones pensando en factores relacionados con la facilidad y la comodidad más que con la inserción laboral o los propios intereses.
Lo mio es delirante:
Primero empezé fisicas porque mi sueño siempre había sido ese pero, claro, la carrera no era como yo esperaba (habia que estudiar). La ecuación del éxito: “más estudio y menos cafeteria” no me apetecía nada, pues ya lo dice el punto 10 “siempre hay tiempo”,asi que finalmente lo dejé.
Como siempre me han gustado los numeros, pense en algo mas asequible: Economicas. ¿Por que? Sonaba bien :) Lo malo fue que me aburria mortalmente, asi que tb lo deje.
Asi que hice algo de voluntariado en Cruz Roja y me dije, ¿por que no hacer enfermeria? Total, en las pelis mola mucho. He hice enfermeria, sin tener en cuenta que la vida real no es como en las peliculas.
Despues, ya trabajando en esto de la enfermeria, me dije, ahora a por la licenciatura: he hice Antropologia.
Y ahora,con mi diplomatura en Enfermeria y mi licenciatura en Antropologia y con un trabajo semiestable en la profesion para la que me he preparado pienso: pero que c*ñ* estoy haciendo con mi vida?!que carajo tiene esto que ver con los numeros y con lo que realmente me ha gustado siempre?!
No os conformeis con lo que os digan…el tiempo NO pasa en VANO. Haced lo que realmente os guste!La universidad solo es un camino mas y no os dara la felicidad de forma automatica.
Gracias por leerme :D
No puedo estar más de acuerdo contigo. Cuando hice selectividad pensaba que iba a estudiar Derecho porque era lo que mi padre había querido siempre. Yo quería estudiar música, pero nunca me dejó. El caso es que cuando me tocó rellenar el papel con la elección de carreras me di cuenta que el Derecho no era lo mío. Así que me metí en Filología Inglesa. Tras un trimestre supe que eso tampoco era para mí. Me cambié a Turismo, carrera inútil donde las haya, pero ya me dije que eso había que acabarlo sí o sí. Tras unos años trabajando en el sector turístico y odiando mi vida laboral a muerte decidí seguir la sugerencia de una amiga y hacer Magisterio. La verdad es que lo he disfrutado como nada. De hecho he sacado unas notas que yo imaginaba que podía sacar nunca. Y lo mejor es que por fin y aunque aún siga sin tener claro del todo hacia dónde me estoy dirigiendo, sé lo que me gusta y lo que se me da bien.
Siempre se lo digo a mis alumnos, haced lo que os gusta, porque al menos, habréis disfrutado el camino.
Monstruo, gracias por tu comentario ¡ Ha inspirado incluso un artículo. Ya me cuentas qué te parece. :-)
https://yoriento.com/2009/04/vidas-profesionales-de-pasion-499.html
El artículo está bien, pero quisiera resaltar una cosa. El valor de las equivocaciones.
Yo estudié una carrera ( filosofía pura) y después he ido definiendome como formadora, en cursos de doctorado, cursos de postgrado, y mil y un cursos más. A veces si tengo la sensación de que voy muy atras para la edad que tengo, pero estudiar filosofía fue la mejor equivocación que pude tener. Me ha permitido tener una perspectiva de las cosas que no creo que mucha gente la tenga. Y es la profundidad en el análisis de todo lo que hago. Estudiar los limites del saber ( que es eso al fin y al cabo la filosofía) enseña mucho y si no que se lo digan a Wittegenstein. que ,sin acabar ninguna carrera, lo aceptaron en Oxford como profesor por haberse atrevido a escribir el “Tractatus Logicus Philosificus”
Pero creo que cuando una persona ha estudiado clásicas (o química, física, o geografía, historia, o antropología o matemáticas), y después ejerce de ejecutivo en una gran empresa, como formador, como asesor etc.. también tiene mucho que aportar, al fin y al cabo, el método científico siempre le acompañará, o el relativismo historico, o el relativismo cultural.
Yo diria que todas estas carreras de humanidades “inútiles” o ciencias puras que no quieres enseñar te pueden dar una madurez intelectual que te acompaña siempre, Al fin y al cabo, los estudios de postgrado son obligatorios para todo el mundo ( incluso para la carrera con más salida en la mejor de las universidades.
Nadie se libra ( a dios gracias) de la formacion permanente. Pues al menos que tengamos una mente bien educada en la reflexion y en el aprendizaje.
siento si esta aportacion es larga. y si suena pedante. Pero insisto, las equivocaciones pueden ser solo parte de un camino, tiene muchos vericuetos.
bueno………creo
Hola,
También me llamo Ester (pero sin h) y he estudiado Filosofía. Me he licenciado (hace unos meses) y me han despedido hace nada por falta de trabajo xD (hacía de secretaria a media jornada para poder pagar la carrera)… Tampoco me arrepiento, a pesar de todo, aunque claro tal como están las cosas siempre te planteas si hubieras hecho lo mismo sabiendo cómo se pondría todo. Pero tengo un plan, o varios.
Lo bueno de estudiar algo así es que uno ya es consciente desde el principio de que no le van a llover los trabajos, porque es algo que de por sí ya está en crisis permanente. Así que sólo se puede ir a mejor desde el fondo del pozo. Tampoco es que deje muchas alternativas la lista porque parece que tanto perseguir sueños como resignarse es un error. Supongo que es inevitable caer en todo eso, uno no nace enseñado, se trata de aprender.
Cuando miras hacia atrás siempre cambiarías cosas, pero es por todo lo que has aprendido equivocándote. Por lo menos nos hemos atrevido a hacer algo que amamos, aunque sea una ilusión. Desde luego cuando haces algo convencido y llegas hasta el final, la satisfacción nadie te la quita. No da de comer claro, pero sí la garra para seguir creciendo y construyendo un camino propio. A pesar de las dificultades. Porque estoy de acuerdo en que las vocaciones no caen del cielo pero sí que uno siempre tiene unas tendencias naturales hacia unos temas o unas habilidades que le llaman más y en los que va a dar lo mejor de sí.
Con este panorama, todos lo vamos a tener crudo, así que aún más motivo para hacer algo en lo que creas. Con cabeza, claro, especializándote, formándote continuamente y luchando por hacerte un hueco en la vida real. Es lo que dices, eso hoy día no te lo quita nadie. Si tienes un plan y eres muy consciente de lo que supone, ¿por qué no? El mayor error de todos sería renunciar a ti mismo. Deberíamos ser coherentes, nada más, para bien y para mal. Eso sí, siendo muy conscientes y estando dispuestos a todo lo que se deriva de ello y teniendo algún que otro as en la manga, a ser posible. Estando muy al día sobretodo, porque todo cambia muy rápido. Y sí, totalmente de acuerdo, “La utilidad de lo inútil”. Ahora más que nunca. No somos máquinas de producir, ante todo somos personas. Irónicamente, en nuestros países ya no podemos limitarnos a vender productos, tienen que tener un valor personal añadido, porque por precio no podemos competir ya con China, India… Así que más motivo para desarrollarnos en humanidades.
Muchas gracias por tu reflexión, en gran parte la comparto.
Sin duda que los errores pueden ser una fuente de aprendizaje pero también una de pérdida de tiempo y de grandes oportunidades. A toro pasado está bien aceptar las cosas como fueron y no volver la vista atrás, pero concoernos mejor, planificar un poquito y tener perspectiva hará que nuestros errores sean menos y sean mejores, no?
A pesar del 2009, estoy en un momento de reflexión que hacer con mi vida y aunque no he sacado muchas conclusiones aún, me parece que no estoy perdiendo el tiempo básicamente porque ya he perdido demasiado sentiendome reflejada en cada uno de los puntos que mencionas. Y en este momento de reflexión me ha encantado este parrafo porque lo define a la perfección.
Hombre, yo no veo nada de malo intentar ser funcionario. Más que nada porque lo he conseguido. :) Aunque curiosamente no era mi intención al hacer la carrera.
En el blog de Miguel de Luis… Esto me pasa por hablar con Americanos (Otro informe del Escritor)
Ninguna opción es mala a priori, si no es la única opción y si la emprendemos de forma sistemática y tras un proceso de decisión.
Por cierto, ya somos dos funcionarios :-)
Yo creo que el problema está al salir del instituto, que mucha gente sale desorientada. En mi caso salí del instituto con media de notable,pero sin saber muy bien que hacer con mi vida. Elegí derecho (que uno piensa que vale tanto para un roto como para un descosido) y en 5 años, con pocas asignaturas para acabar pero una media subterránea, creo q malgasté mucho tiempo de mi vida en algo que no era lo mío…y lo peor, que dicha media te empieza a cerrar puertas y no sabes cuando parará :_(.
Ahora ya voy más espabilado que hace 5 años, e intento especializarme y mejorar idiomas (tengo buen nivel de inglés por suerte, y eso ayuda) así como mentalizarme en que debo ir allí donde haya trabajo (desterrada la idea de quedarme cerquita de casa a toda costa)
A ver como va la cosa en el futuro.
Hasta luego!
Tendemos a arrepentirnos de supuestos errores del pasado, pero lo importante es “no seguir equivocándose”. Yo empezaría definiendo posibles alternativas y recordando que el inglés es un medio y uno un fin: para qué lo aplicarás? :-)
Lee ofertas de empleo en empresa, toma nota de los tipos de actividades profesionales de amigos y conocidos, echa un vistazo a las especialidades de FP (hay más de 200)… Ve mirando opciones y tal vez encuentres uno o varios objetivos razonables. Algunos requerían formación previa más o menos formal, y otros arrojo y contactos.
Cómo me gustaría haber sido capaz de explicarlo tan bien.
Me alegro tanto de haberlas incumplido todas…!!!
Una incumplidora feliz ;)
Aún me acuerdo el patatús de estar sentada con un libro que nos repartieron a los 17 años, mirando carreras, universidades, asignaturas. Siempre habías querido ser A o B, pero descubres que no tienes aptitudes para la una, y que no hay salida para la otra. ¿Qué se me dará bien? Coño, aquí hay una carrera que parece que…
Y aquí estamos. Soy ingeniera de telecos. Telemática. Lo mío me ha costado, pero creo que acerté, al menos, me gusta mi actual trabajo. Ya veremos el siguiente. Pero realmente, es un faenón para críos tan pequeños. Mi hermano tiene 17 años y está haciendo un módulo porqué “no quería pasarse media vida en la universidad como yo”.
[Meneo que va. Buenísimo]
.-= Último post de Laia…… blog ..Curso del 63 =-.
Gracias, Laia.
Tendemos a atribuir nuestros errores de juicio a la edad o a otros factores contextuales, pero creo que el problema es que no aprendemos, no nos enseñan a ser mínimamente metódicos: buscar informacion, generar alternativas, probar, autoevaluar nuestros intereses… Y esa falta de “metodología personal” nos afecta en todos los aspectos vitales. Lo que pasa es que se nota en momentos más concretos, los típicos en que estamos obligados a tomar las decisiones más existenciales: qué estudio, con quién me caso (si es el caso), cuándo abandono esta empresa…
Buena entrada, muchos/as de los que estudian 2 º de BAC deberían leerla…
Saludos!
Gracias por pasar, Marta ;)
Me gustaría haber leido esto cuando aún estaba a tiempo de no matricularme en un master en el que probablemente pierda mi tiempo y dinero.
Lo mejor de un master no es la formación en sí, sino los contactos y las experiencias relacionadas. Los master caros son mejores porque se supone que los alumnos que pueden pagarlos tendrán más influencia y provendrán de organizaciones y entornos más interesantes.
Y los que no tengamos dinero suficiente como para pagarnos uno de esto masters caros en una una escuela con renormbre (sólo es apta para ricos), ¿cómo hacemos para hacer en la elección del master?.
Buffff!!! Yo he caído en varios puntos y, a pesar de haberlo sabido antes de leer este post, siempre me duele recordarlo porque perdí mucho el tiempo y a conciencia, aunque la cuestión no es lamentarse (que no lo hago y lo odio), sino ponerse manos a la obra, planificar el futuro, cumplir hitos, cambiar hábitos y aprender de los errores.
Me parece un post brillante, escrito de una manera muy llana de modo que transmite muy bien, y le da un toque incluso paternalista. Me gusta.
Yo soy licenciada en derecho, y soy de la opinión de que derecho no es difícil en absoluto. Es más, tiene un componente de lógica bastante grande, pero la mayoría de los estudiantes se empeñan en memorizarlo, y no en entenderlo.
Estudié 2 másters. Uno en ICADE y otro en el CEF. Hablo 3 idiomas y he hecho una infinidad de cursos de todo tipo. No soporto la idea de opositar, y menos la de ser funcionaria. Me dediqué al derecho sólo unos años, pero no me daba ni para pipas lo que pagaban y, lo más importante, no me gustó.
Yo estudié derecho porque tenía memoria, no por vocación o porque me gustara, por eso no lo soporté cuando lo ejercí. He trabajado en muchas cosas. Ahora estoy en paro y mi formación no me está salvando. Somos muchos los que tenemos estudios e idiomas. ¿Qué me está salvando? La creatividad, el instinto, el olfato y las ganas de prosperar a saco!. Desde que me lo propuse no he hecho otra cosa que sembrar, y ya estoy recogiendo frutos.
Es cierto que cometí errores, muchos y de los peores! pero que no me tumben los remordimientos ni el paso del tiempo, sino todo lo contrario. Eso sí, tuve que salir de mi confort y meter las manos en el fango, y esto no sé si está mucha gente dispuesta a hacerlo.
En fin…que quien quiere triunfa, sea como y cuando sea, pero que no existen los milagros y hay que trabajar mucho, pero bien! planificando, con un orden y sabiendo qué se quiere y a dónde se quiere llegar.
Gracias por tu blog,
Manu
Wow!! A mi me ha pasado lo mismo… Me gradúe con honores en la carrera de derecho hice post grados etc llevo casi tres años de haberme recibido y aun no me animo a aceptar que me equivoque de carrera… Cumplo con 8 puntos de los 10 jaja
Hola Manu…me sentí muy identificada con tu comentario ;)
Me quedo impresionado con el artículo. No dejas de tener razón en muchas cosas y planteamientos y te felicito por ello, pero procura en tus críticas no imponer puntos de vista u opiniones hacia determinadas opciones que no vislumbran más que interess o resentimientos hacia colectivos que se pueden ser ofendidos ( me refiero al colectivo de funcionarios9, que restan importancia y claridad mental al artículo.
Yo soy funcionario, nunca me han regalado nada,. tengo dos carreras y al final he terminado viviendo de lo que no esperaba. no me considero igual pagado que algunos de mis compañeros en las empresas privadas, aunque reconozco en mí esa más facilidad pra desarrollar mi trabajo sin tensiones.
Yo tuve una infancia de esfuerzo y sacrificio y para mí el estudio era una liberación de las penalidades a que me vería avocado de seguir trabajando, pero esa responsabilidad no se enseña, el rodar por la vida te lo da.
En la actualidad oriento y enseño a mucha gente pero en un 95% de los casos me reafirmo que el ser humano tropieza dos veces en la misma piedra, nos dejamos influenciar mucho por el entorno social, el márketing, el bienestar del que disfrutamos con nuestra familia y nos negamos a abandonar el nido.
Mi consejo es que tengais presente que “nada se nos regala”, que en l mundo global cada vez pintan más las necesdidades de comunicación, de ahí la necesdid de aprender idiomas, es neceario cambiar de perspectiva, mentalidad y pra ello es importante salir al extranjero, que nunca es tarde para cambiarlo todo si se es valiente, se mira adelante y aprendemos a creer en nosotros mismos, no compararnos con nadie.
Te animo a seguir escribiendo de estos temas, la pena es que no se divulgue más entre alumnos de 2 º de Bachillerato.
Repite, gracias. Ten la esperanza de que con tus artículos algo queda.
Yo elegi mal mi carrera se los informe a mis padres cuando estaba en 4to año de la carrera (son 5 años 1/2 totales)pero me dijeron que la términe que ya no pierda mis años, la he terminado y no fui ni mi a graduación, no me siento bn, tengo que hacer una tesis hace como 6 meses creo y nada me emociona o me llama la atención, siempre pienso que hice mal como no pude darme cuenta antes, mis amigas solo me dicen q ya no puedo hacer nada que tengo q trabajar 15 o 10 años para poder hacer lo q me guste y atraiga (y yo les pregunto a ellas, serías feliz trabajando en algo que no te gusta?), jalaba cursos me daba IGUAL, y cuando sacaba buenas notas, no sentia esa emoción ni nada me daba igual también, ingrese cuando tenía 16 años apenas había términado mi secundaria, y cada vez q pienso en ello me deprimo no se que hacer ya… seguir el camino de mi carrera por 10 o 15 años o nosé ya no quedan alternativas. Solo veo que me queda el conformismo y la resignación…
Te entiendo completamente… estudié ingeniería electrónica, me gradué el año pasado, tengo 23 años y definitivamente no me gustó para nada mi carrera…ahora ando trabajando, sigo teniendo miedo de nunca encontrar un trabajo que me guste, no sé que hacer, me deprime la idea de pasar mi vida de esta manera …de verdad es horrible, espero encontrar algo que me apasione y poder enfocar mi carrera en algo que me guste…todavía recuerdo lo eternas que se me hacían las clases, peor aún, la hora de estudiar para los examenes era imposible, no lograba concentrarme por el simple hecho de que no me gustaba…me fue bien en el estudio, pero el aburrimiento fue infinito, me dí cuenta muy tarde que no era lo mío y cometí el error número 5 de este artículo… ¿Qué hacer? no sé, me niego a resignarme…
Vaya, Vaya… no sabéis cuánto me alegra que haya gente en mi misma situación. Tengo 21 años elegí la carrera de derecho por varias circunstancias, de hecho la gente que llega a derecho lo hace casi siempre de forma muy circunstancial, casi nadie se plantea ser el superabogado a priori. Derecho era la carrera fustrada de mi madre, pintaba bien idílicamente hablando:prestigio social, una carrera ámplia y con contenido y varias salidas profesionales. Y repito que a mi madre le hacía mucha gracia.
El caso es que ahora estoy en cuarto de derecho, no me planteo dejarlo ni por asomo porqué en este país de “titulitis” no puedes hacer prácticamente nada sin una carrera universitaria; no me malinterpretéis con “prácticamente nada”.
Por otro lado des del primer día de carrera hice los mejores amigos que os podéis imaginar (cosa que incentivó más mis motivos para quedarme en ella) y sorprendentemente la llevo bastante bien. El caso es que no me motiva demasiado por no decir nada. No me veo ejerciendo, ni me gusta la dinámica de los despachos de abogados, ciert eso que no he ejercido pero de buenas a primeras no me acaba de convencer… en su día quise hacer oposiciones para juez pero la verad es que no me considero una “enferma o apasionada” del derecho como para estar 7 u 8 horas diarias dándole al tarro. No se trata del temor a no sacármelas, sinó de la falta de motivación inicial (que es lo más importante)
Lo estoy pasando bastante mal ya que siempre he sido una persona muy segura de mi misma, que siempre he sabido lo que he querido y tener estas crisis existenciales/vitales como lo querais llamar, me desestabilizan y sobre todo rompen el esquema que tenía planteado de tener una vida plena y feliz antes de los 30! Diósss ¿qué estoy haciendo con mi vida? ¿cómo es posible que no sepa cuáles son mis habilidades? ¿será que mis habilidades consistirán en no hacer nada y vivir la dolce Vita? Diós qué horror! no queiro ser así!
Pues yo veo mucha paradoja, por no decir contradicciones.
Hola!
Tengo 19 años y acabo de empezar 2 º de economia. La elegí por miedo, es lo que estudio mi madre y lo que ha estudiado mi hermana mayor (ella ADE, que ahora creo que es mejor que economía, pero de eso no me dí cuenta), me parecía que si estudiava una carrera así tendría un futuro asegurado. Nunca he tenido claro lo que quería hacer, no hay nada que me apasione o almejor esque nunca me lo he permitido plantear. Siempre me tirarón mucho las ciencias, sobretodo las ambientales o las biologicas, pero por problemas personales no rendi al maximo durante el bachillerato y en carreras como biomedicina, farmacia, etc no me llegó la nota, claro que también uno ha de tener en cuenta sus capacidades, y yo no sé hasta donde puedo llegar.
Empezé economía con ilusión no me gusta, tampoco esque la odie y aún estando en 2 º todavía no sé que me pedirán hacer cuando trabajé. Estoy preocupada por mi futuro, esque oyes por la tele que no paran de decir que si licenciados mileuristas, más vale que te hagas fontanero, etc y yo quiero una vida digna! poder pagar una hipoteca sin renunciar a mi vida! es tanto pedir??
No sé si repetir la sele ( ¿y si la proxima carrera que haga tampoco me gusta?), si seguir y haver que passa… no sé estoy estudiando ingles y aleman pq me gustan los idiomas y pq tb creo que me van a ayudar. Aunque hay un montón de gente que hace ADE y economía y sacan mejore notas que yo y estudian en mejoreS universidades…
Y si he pasado por todos estos puntos. Ahora deberíamos plantear cual es la mejor solución para plantearlo todo.
2002 en el instituto:
Orientador: a ver tus notas, muy buenas, eres bueno en matemáticas, sabes inglés, dibujas bien…qué tal una ingeniería?
Alumno de bachiller: bueno, ¿y tiene salidas?
Orientador: sí, sí, es lo que más salidas tiene, no vais a tener ni que buscar trabajo, ellos os buscarán. Además cobrarás muy bien.
Alumno: suena bien
Orientador: toma esta información sobre facultades diferentes y cuando vengas la próxima vez me dices qué ingeniería te interesa.
Esto es el trabajo que hacían los orientadores de mi instituto, y por lo que se, de muchos de muchos institutos más.
Me ha encantado el post!
Sobre el tema de los orientadores , es totalmente cierto , por lo menos a mí en vez de orientarme , me desorientó. Esta fue la situación :
– orientadora – Mira, … algo tienes que hacer , que te parece periodismo , se te asemeja , sino estas son las carreras que hay ( me da un cuaderno) y puedes llegar a través de ( me señaliza el camino de bachillerato a la uni y después a un Fp) : si necesitas más ayuda me llamas .
Lo mismo con el médico y con el psicologo . En resumen que de tanto profesional , no ha habido ninguno que me haya ayudado.creo que es algo preocupante , que cuando alguien quiere ayuda , pasen de ti . También es cierto que son decisiones a las que no te pueden ayudar!!
A mi me aterra mirar atrás y pensar que me he equivocado. Estudié una carrera de mierda, con muy poco glamour; pero la verdad es que estoy trabajando desde que terminé, tengo un contrato fijo y supero con creces los mil euros mensuales. Aún así…todavía no estoy contento. Necesito algo más. Creo que Maslow volvería a rediseñar su pirámide si me conociese. Saludos y enhorabuena por el artículo.
Mike, si tuviera que elegir las claves más importantes a tener en cuenta seguramente serían seguir indagando alternativas, siempre, de manera continua; encontrar modelos, personas y profesionales que nos interesan y que podrán ser referencias; y tener experiencias, algo compatible con mantener el trabajo actual, por ejemplo. Un saludo.
Anoche leí el artículo que llegó a mí por casualidad, o más bien por causalidad, pues desde hace meses me planteo qué hacer con mi vida.
Estudié Derecho porque creía que era lo que quería hacer, entré en una Universidad elegida por mis padres porque quedaba cerca de casa. El no rotundo a ir más lejos como yo quería aún suena en mis oídos.
El primer año sentía que aquello era una castaña, aguanté, incluso saqué sobresalientes. En tercero de carrera dejé de ir a las clases. Me busqué curros para sentirme algo más libre, me fuí a una ciudad costera y estuve un año de practicas en un despacho. Lloraba todas las tardes en la playa. Aquello no me gustaba. Regresé a la ciudad elegida por mis padres para terminar, pero me salieron nuevas prácticas, me presenté a la entrevista y me eligieron. Cualquier cosa para evadir las clases y los apuntes. De hecho estuve cuatro años simultaneando con ADE porque pensaba que estudiar Derecho en aquel lugar iba a ser mi ruina profesional y academica. Creía que mi problema era la ciudad y su Universidad, ocho años mas tarde consigo cambiar mi expediente porque sentía un gran vacío en mi. Llego a la ciudad que me hubiera gustado ir, pero me doy cuenta que el problema no era la ciudad elegida por mis padres, sino la carrera elegida por mí. Cierto es que si hubiera ido el primer año de carrera me hubiera dado cuenta antes, pues no hubiera estado obsesionada por aquella Universidad impuesta. La gente me decía que disfrutara del camino, ahora veo que nunca pude conseguir disfrutarlo porque aquello no me gustaba en absoluto. Continué por la idea de: tengo que responsabilizarme y terminar lo que he empezado.
Ahora, tengo 28 años, no he terminado la carrera, de hecho la he dejado porque cada vez que me ponía a estudiar me entraban los siete males y acababa con ansiedad.
A veces pienso que se me han acabado los sueños, otras veces pienso que la crisis es una oportunidad para volver a empezar y no todo el mundo puede disponer de una oportunidad así, y otras veces, busco desesperadamente algo que me llame tanto la atención como para dedicar mi vida a ello.
He mirado tu enlace sobre 3200 estudios. No he encontrado nada que me guste dentro de la FP como para dedicarme a ello.
Elegí la carrera porque quería un gran sueño, llegar a ser algo grande, ganar mucho dinero. Me doy cuenta de que nunca quise ser abogada, ni notaria, ni juez… no entiendo porqué estudié aquello. Teniendo en cuenta el consejo de una comentarista, de dedicarse a aquello que a uno le gusta para disfrutar del camino, puedo decir que me gusta aprender, que me gustaría crear cosas que supongan un provecho para los demás, que me gusta viajar, y que por nada del mundo quiero pasarme el resto de mi vida entre las cuatro paredes de una ofina. Mi cuestión es, y te rogaría un consejo orientativo: qué profesión reúne estas cuatro cualidades? pues… a mí me está costando ver cuál es.
Muy buen artículo,
Un saludo
Gracias por tu interesante comentario, Paula.
Te diré brevemente que no creo en la vocación ni en las decisiones sobre la vida profesional tomadas en abstracto sin tener experiencias. Tampoco en intentar cuadrar el círculo haciendo una media de lo que nos gusta para encontrar la profesión ideal, que no existe.
Lo importante son las competencias, es decir, las habilidades concretas, las actividades específicos, el valor añadido de lo que haces. Los intereses (‘viajar’) no tienen contenido laboral a menos que sean transformados en servicios relacionados: animación en viajes, orientación e intermediación para viajar (agencias de viajes), didáctica de los viajes (escritores de viajes, por ejemplo)…
En todo caso, insisto, más que razonar en abstracto hay que tener experiencias que de verdad nos digan si nos estamos acercando o al menos vamos por un camino razonable. A veces la pasión y el interés se despiertan simplemente por la actividad y por la dedicación, como le pasó a la afiladora de lápices (ver enlace)
No se trata tanto de ‘decidir sobre profesiones’ como de decidir qué experiencias vas a tener para ir aprendiendo más de ti y sobre lo que quieres hacer. Y tener esas experiencias al ritmo que se pueda y se quiera.
Un saludo cordial.
https://yoriento.com/2007/01/la-afiladora-de-lapices-lo-importante-es-hacer.html/
Nadie mejor que tú sabe lo que siente y lo que debe hacer con su vida.
Pienso que en estos casos los consejos no sirven. Puede haber muchas opciones posibles, muchas más de las que ves ahora.
Estoy segura de que existe una forma de vivir tu vida que sintoniza contigo. Y mi único consejo es que una vez que hayas descubierto la forma de vivir tu vida, que te hace feliz, tengas el coraje de llevarla a la práctica.
Un saludo y ánimo ¡Tienes toda una vida por delante!
claro q lo hay … una ing. en geomatica geologica… y quedarte en gabinete :) o un oficio :3
esta lectura me llego en un momento de caida total en mi vida profesional!! estudie administracion de empresas – comercio internacional y he descubierto que me da temor enfrentar trabajos afines a esta carrera, el simple hecho de levantarme e ir a una empresa y ejercer una labor administrativa donde tenga que estar en una oficina, atender a mas personas, contestar muchos correos comprometedores, sacrificar horas de estar con mi familia me cuesta!!!! pero con esto espero encontrar el camino!!!
Bien, reuni todos y cada uno de los puntos!!! Me gustaria aver leido antes esto!!
Me gustaría mucho que sigas con artículos con este tono, llega directo a la actitud, que es lo que lo mueve todo. Estoy de acuerdo, con buscar alternativas y probar. Pero siempre sabiendo lo que persigues porque si no nunca sabrás adónde vas.
Durante este tiempo en la Universidad, me he dado cuenta que la Universidad llena tu cerebro, pero se ocupa poco o nada de enseñarte a llenar tu cartera. Me quedo con lo dijiste en el #TandT: busca modelos a seguir y aprende de otros.
Muy bueno el artículo :-)
Localizado en Twitter! :-) Gracias por tu reflexión, Jorge.
Genial artículo, Alfonso. Yo caí en 1, 2 y 3… Cuatro años de informática, porque “se me da bien y tiene salidas”, desoyendo a los 2 o 3 mejores profesores que tuve en BUP. Nunca llegué a visualizarme. La abandoné a su suerte a 45 créditos del final y me llamaron loco. Empecé sociología, estudié idiomas, aproveché todos los programas de movilidad que pude y me esforcé en establecer una buena red de contactos. Mientras, trabajaba como técnico de sonido ‘freelance’. El último año de carrera (2009) conseguí mi primer cliente. Ahora tengo cinco, con los que colaboro en otros tantos proyectos que me encantan. Todos han llegado de boca en boca. Aún no me da para alquilar una oficina o pagar a un gestor que me lleve los papeles, pero hace 6 años conseguí visualizarme, diseñé mi estrategia y emprendí camino. Aunque ratos voy en AVE y a ratos en patinete, la satisfacción suele ser enorme.
Mi pareja sabe bien que cuando empiezo una frase diciendo “Yo lo mejor que he hecho en mi vida…” es que voy a contar esta historia.
Joaquín, a veces decidir hacer lo más valiente es también hacer lo más inteligente :-) Tienes Twitter?
Que increíble tu historia Joaquin, yo por ejemplo empece en ingeniería civil, luego matemáticas y ahora informática. Y he sido duramente criticado por familiares y conocidos. Quisiera saber si conoces otros casos como el tuyo o como el mío, ya que en el ambiente donde yo vivo aquí uno parece como raro, anormal, inadaptado; entre otras cosas. Espero poder compartir experiencias contigo y con personas con experiencias similares.
MI ADMIRACION POR TU DECISION
ATTE NESTOR
Hola Alfonso. La verdad es que me costó tomar la decisión, pero el primer mes ya estaba seguro de que había sido lo más inteligente. Tengo twitter: @quinosanchez si bien es cierto que la estrategia 2.0 la tengo en el horno, y hasta ahora he utilizado las redes sociales para mis contactos personales y suscribirme a info que me interesa, poco más. Supongo que estoy en esa fase por la que todo el mundo pasa, ese triángulo de las bermudas formado por los social media, la vida personal y el perfil profesional.
Aprovecho para darte las gracias por el blog, a mí particularmente, que gran parte de mi trabajo lo desarrollo en casa, me ayudan mucho tus consejos sobre productividad.
Saludos.
muy buen articulo… he quedado perplejo la verdad, porque bueno, yo estoy acabando mi carrera pero aun tengo unos vacíos enormes… pero me hizo reflexionar y ala, definitivamente me tengo que ir por lo que me gusta. es increíble 6 años estudiando en Colombia y lo que realmente deseo es viajar a estudiar cocina :) es un cambio abismal que creo que a mi familia no le caería bien, pero me tengo que arriesgar, abajo la tradición burocrática empresarial de la familia, tengo que pensar en la felicidad y no en comer solo dinero.
has clavado mi propia vida.. no sabía si reir o llorar, pero me he alegrado de verlo tan ridículo..es de coña..ayy Dios mío…
Este artículo acaba de inspirarme para una entrada en mi blog:
http://traducirco.blogspot.com/2012/03/no-hay-crisis-dentro-de-mi.html
Bueno, ahora que el gobierno ha decidido recortar puestos públicos creo que es hora de replantearse el tema de lo seguro que es el funcionariado, y trabajar para una empresa. Los que nos vemos empujados al autoempleo como único modo de subsistencia laboral lamentamos no haberlo hecho antes…
Igual nos hemos olvidado de que estamos en Españistán, donde reina la cutre empresa, que no valora méritos, sino enchufes.
Donde sin un contacto que te introduzca, sin un estatus que te abra puertas jamás llegarás a nada. Solo espero que cuando llegue el momento de suicidarme, esa vez acierte a la primera. Maldita puta mierda de país y de sistema.
Muy interesante el artículo! Estoy muy de acuerdo en muchas cosas, sobretodo a la hora de empezar en la universidad, aquí todos tienen opinión: métete a ingeniero que no te faltará trabajo, a ADE que tiens muchas salidas, etc… y es complicado decidirse cuando tienes 18 años y no sabes bien por donde tirar, y salvo excepciones somos bastante influenciables.
Yo empecé así, estuve a punto de dejar la universidad aunque para bien o mal la acabé. A partir de ahí he ido modificando mi trayectoria a veces con mayor acierto que otras, a veces con unas “hóstias” mas grandes que otras y siempre aprendiendo y adaptando el rumbo.
Aunque una cosa tengo clara “aprender de los errores está sobrevalorado”, si los cometes aprende y no los vuelvas a hacer y será una gran expriencia, pero mejor, como has dicho, informate, investiga sobre lo que quieres hacer (o sobre cualquier cosa) y te ahorras en problemas y tiempo, si la cagas al menos aprende, pero como experiencia, prefiero aprender sin muchas “hóstias” en el camino que tambien es posible aunque requiera mas de nuestro esfuerzo.
Un saludo
Muchas veces eliges tus estudios para tu futuro trabajo por “esto creo que me gustara” o “esto no tiene mucho esfuerzo y ademas se gana dinero” y realmente no es así tienes que tener una vocación, no se pueden elegir por una simple suposición.
Aunque este artículo tiene “algo” de razón en lo que dice, debería de haber sido escrito hace muchísimos años atrás (hace 20 ó 30 años) porque habría ahorrado muchas penas a muchos… Ahora mismo, solo sirve para reconocer culpas o algo así, y eso puede resultar también frustrante. A toro pasado, cualquiera hubiera sido previsor. La famosa frase que se le pasa a una persona por la cabeza es la de siempre: “si yo hubiese sabido el resultado de aquello jamás hubiese osado hacerlo”. Sinceramente, en esto encuentro el fallo del invento. De hecho, con esto que he dicho tampoco estoy suponiendo que muchos de los fallos que estamos cometiendo ahora mismo solo serán vistos por las futuras generaciones porque eso también es falso. Me parece que deberíamos de hacer también un ejercicio de sinceridad y ver el montón de mierda que nos rodea de una santa vez. Yo soy de los que piensan que hubiésemos hecho lo que hubiésemos hecho en el pasado, al final nos habríamos quedado en la misma posición en el presente. ¿Por qué pienso esto?… Porque por desgracia (para mí) he podido tener cara a cara la ENORME CORRUPCIÓN que anda campando por nuestra querida España y me doy perfectamente cuenta de ello. Y aunque sé que alguno se me tirará como un león a decirme que esto no es prejuicio para no hacer las cosas de otro modo, tal y como supone el autor de este artículo, yo defiendo justo lo contrario: que mientras que el sistema en el que nos vemos envuelto todos no cambie, no tenemos nada que rascar. Algunos se salvarán (pocos) y los demás perecerán indefectiblemente (HAGAN LO QUE HAGAN O RECTIFIQUEN EN LO QUE CREAN QUE TIENEN QUE RECTIFICAR) para favorecer a los cuatro sinvergüenzas de siempre. Y lo desastroso es creer que la culpa la tuvimos nosotros mismos por no haber hecho aquello o eso otro… Y eso que teníamos que haber ido haciendo todos desde hace muchísimo tiempo es rebelarnos de una vez contra los que nos están ocasionando vivir de este modo. No le deis más vueltas, o siempre caeréis en la trampa de creer que sois los únicos culpables de vuestra desgracia… Y ESTO NO ES CIERTO.
Maldita sea ¡ ¡ ¡ Demasiado tarde. Acabo de descubrir este artículo justo en 5 º curso, en mi año de erasmus, cuando comencé mi carrera en el 2008 ¡ ¡ ¡ Ah si hubiera leído este artículo antes.
Yo estoy en 5ª año de Ingeniería Industrial y creo que decidí mal, mi vocación es otra y siempre tiré más para letras que para números :/
Uff… muy fuerte, ¿eh? La verdad es que me ha gustado y es muy inteligente, pero, sinceramente, creo que es prácticamente imposible no cometer ninguno de esos errores. Por otra parte, pienso que, por suerte, a pesar de cometer alguno se puede conseguir desarrollar una carrera satisfactoria. La vida siempre guarda en la memoria las opciones que no tomamos en el pasado.
La 1, la 3, en parte la 4 y, si no hubiera tenido suerte, la 10. Pero coincido con quien dice por ahí que es (casi) imposible no haber caído en alguna, ¿no? Y ‘vistos los cojones, macho’: ahora todos nos reconocemos muy fácilmente en el texto.
Hola a todos,
releyendo este artículo (que me parece muy interesante) estaría bien que subieras un artículo con las profesiones del futuro. Para los mayores de 25 años que tenemos todavía el tiempo (parados) y la capacidad intelectual para emprender un nuevo camino, pero claro estamos perdidos, cuál? qué carrera o titulación nos garantizará un futuro con ofertas?
Siempre se ha dicho que la economía digital es la rama más buscada a la hora de hablar de ofertas de trabajo y como nuevas profesiones:
1. Comunity Manager
2. Atención al cliente (área digital)
3. Informática y Telecomunicaciones
4. Marketing y Comunicación
5. Diseño y artes gráficas
etc
Seria muy interesante hacer un estudio lo más realista y práctico posible de nuestra realida futura.
Un saludo!
Ojalá hubiera leído este post hace 7 años!
Elena: lo que comenta bien podría ser el punto #11 de este artículo, algo así como:
11. ELIGE LAS CARRERAS “CON FUTURO”.
Voy para 48 y decidí estudiar Ingeniería Eléctrica en 1983 pensando en que, por la tecnología, la robótica y todo eso, esa carrera sería una excelente opción. Desde entonces mi vida ha sido una perfecta MIERDA, al extremo que lo considero como UNA CONDENA en una penitenciaría cuyo plazo de cumplimiento es indefinido. NUNCA me atrajo la electricidad, es más, ni siquiera la tomaba en cuenta. Así que es UN GRAVE ERROR lo que menciona, simple y sencillamente porque existirán muchas personas en dichas profesiones quienes SI TENDRAN VOCACION y sobresaldrán sobre uno. La elección de carrera es de alguna manera hasta sencilla: elige LO QUE TE GUSTE, porque si te falta capacidad lo compensarás con voluntad, aunque no siempre aplica, y si te sobra capacidad pero te falta empeño siempre lograrás salir adelante. Buen aporte el tuyo, pero para verlo AL REVES.
totalmente de acuerdo. Al final somos esclavos de nuestro trabajo, por lo tanto más vale escoger algo que nos guste. Parece que cuando nos metemos a estudiar se nos olvida que al final, vamos a depender de un trabajo que consumirá al menos 8 horas diarias durante el resto de nuestra vida (por lo menos hasta los 67 no??, aunque hoy por hoy ya no se prevee ni jubilaciones para las nuevas generaciones)
muy de acuerdo
Me parece un artículo buenísimo, desde la perspectiva opuesta a la habitual, se nos aconseja qué no hacer. Yo me he equivocado siempre, una y mil veces he hecho el tonto…ahora tengo 30 años y ninguna perspectiva de futuro.
A los 18 años no me llamaba demasiado ninguna carrera, pero claro, algo tenía que hacer. Sinceramente, en aquel entonces era una chica sin sueños, ni ganas de nada. Si no hubiera sido por mis padres y por mi gran inseguridad, me habría puesto a trabajar de cualquier cosa…pero mi madre me empujó a estudiar algo, una FP de administración. Y la verdad es que me fue bastante bien, me esforzaba mucho y saqué buenas notas. Luego vieron 6 meses de prácticas que no me aportaron absolutamente nada y en los que me daba cuenta de que la profesión que escogí no me gustaba en absoluto. Pero, claro ¿a quién le gusta estar 8 horas metida en una oficina entre 4 paredes rellenando solicitudes, sellando papeles y metiendo datos en un ordenador, cual autómata? la profesión en sí es aburrida y vacía. La odiaba tanto que se me daba fatal, era torpe, lenta..etc.
Sin embargo, empecé a cogerle el gusto a estudiar, no se me daba nada mal. Sobre todo me gustaban los idiomas. Entoncés dedicí estudiar más, meterme en la universidad y hacer algo que de verdad me gustase. Por supuesto, al no tener selectividad, las carreras a las que podía optar eran bastante limitadas. Lo verdad es que de las que se me ofrecían sólo dos o tres me parecían interesantes. Al final opté por sociología. Empecé la carrera con ilusión y convencimiento, pero la dejé al año por falta de motivación y malas notas. No era una carrera difícil, pero muchas de las asignaturas me resultaban demasiado aburrídas y teóricas, y lo peor, no veía ningún futuro. Todo el mundo me hablaba de oposiciones o el paro. Cuando se enteraron de que dejé la carrera, mi familia se decepcionó bastante. Yo me sentía fatal, una fracasada sin futuro. No sabía qué hacer, así que cogí las maletas y me planté en Francia. Me quedé dos años en el país, aprendiendo el idioma y trabajando en lugares sumamente precarios. Esa experiencia me ayudó mucho. Me mostró el mundo real y su dureza. Volví a España arruinada y esta vez (creía) decidida a coger el toro por los cuernos y encaminar mi vida por la dirección correcta. De nuevo iba a estudiar. Me matriculé en LADE bilingüe, pensando que con esa carrera al menos tendría un trabajo fijo asegurado y una buena base de inglés, además del francés que ya hablaba. Sin embargo las circustancias me pudieron una vez más. Cuando empecé ya no era una niña (tenía 25 años), por lo que no conectaba en absoluto con mis compañeros de 18. Por otra parte me independicé de mis padres, y no daba a basto entre la carrera y el trabajo. Los estudios los sacaba a duras penas, ni me gustaban ni se me daban bien. Total, que (milagrosamente) aguanté 3 años de angustia, ansiedad, penurias financieras…hasta que un verano, al quedarme sin trabajo, y harta de mi vida, decidí dejarlo.
Hoy en día trabajo de camarera en un hotel. Creo que mis mayores errores han sido:
1.- En primer lugar, cuando tenía 18 años, mi inseguridad y falta de motivación.
2.- La elección de unos estudios (FP), por los motivos erróneos: era fácil, estaba en mi ciudad, mi madre los escogió por mí.
3.- Volver a escoger estudios (sociología) sin informarme bien, y teniendo en cuenta, una vez más, la cercanía respecto de mi casa, y la supuesta facilidad frente a otras carreras más exigentes.
4.- Escoger estudios (Lade internacional), por lo prestigioso de su nombre, porque estaba cerca de casa, y porque en principio es una de las carreras básicas y con muchas salidas.
Me he dado cuenta (aunque ya tarde) de que lo realmente importante es informarse bien, y ya con una información completa elegir aquello que más te guste, porque la motivación va a hacer que llegues a un lado u otro, casi seguro, y va a permitirte trabajar en algo, al menos, minímamente relacionado con el campo de tu interés, lo cual te permitirá ir siempre en una dirección correcta. En mi caso nunca tuve una vocación definida, lo cual ha hecho que fracase.
Muchas gracias por tu comentario, Martika. Me ha parecido tan buena aportación, por ser directo e ilustrativo, que le he dedicado un artículo específico, con cariño :-)
https://yoriento.com/2013/03/como-no-elegir-los-estudios-el-caso-practico-de-martika-770.html/
Probablemente, los dos mayores errores que cometemos cuando se trata de tomar decisiones acerca de nuestra vida profesional sean éstos:
1) NO CONOCERSE. No dedicar suficiente tiempo a descubrir nuestras pequeñas pasiones, en lugar de ponernos a estudiar y esperar que aparezcan. Dicho de otra forma, nuestro error es no intentar conocernos un poco mejor
2) ESPERAR LA VOCACIÓN. No dedicar suficiente tiempo a una actividad para convertirla en una pasión profesional. En la vida nos puede interesar casi todo si le damos una oportunidad. La ‘vocación’ no surge ni se espera, se construye. Muchas vocaciones ‘surgen’ con la especialización: cuanto más sabes de algo más te gusta. Esperar la vocación puede ser baldío.
Alfonso, te prometo una respuesta con referencia a este artículo espero que hoy mismo (si el amigo deporte me deja con fuerzas).
Me he sentido muy identificado con Martika y puede que mi caso le sirva como ejemplo, tengo 30 años también y me equivoqué en varias ocasiones con los estudios y me volví a levantar, apuntando de nuevo y disparando con más calma, y parece que cada vez estoy más cerca de la diana.
Mucho ánimo Martika, te nombraré en mi post e intentaré echarte una mano, insuflando algo de motivación porque, como diría el dueño de este blog, por el dinero no te preocupes que dinero no hay XD.
Un abrazote a ambos.
A los 18 años pocos chicos tienen claro lo que quieren en su vida. Estan llenos de dudas y piden mil consejos. Hace años al que le gustaba escribir y leer lo tenia muy seguro, se dedicaba a las humanidades sin temor de que al terminar, el desempleo le estuviera esperando. Ahora parece que todos tienen que estudiar doble grado, o carreras de ciencias ( ingenieria industrial, Dobles grados de ADE con matematicas, o con ingenieria, telecomuniaciones) es dramatico ver como las vocaciones quedan acalladas por los resultados de busqueda de empleo, como sin oposiciones no eres nada, Los idiomas enriquecen pero se han convertido en una condicion sinequonumn para buscar trabajo fuera, algo que parece ya obligatorio. Que triste pais
Joder, me siento totalmente identificado con tu frase del segundo punto:
“Y si no, informático, siempre con tu ordenador portátil en aviones de acá para allá solucionando problemas. No se te ocurre que si no planificas bien puedas pasarte el resto de tu vida picando código.”
..y aquí estoy, Ingeniero en Informática. Vida llena de trabajos precarios, malpagados, explotados y, cuando llegas a los 30, joroba en la espalda y calvo del estrés (con perdón de los calvos).
Por suerte justo al acabar la ingeniería y estudiar el mercado laboral y la vida que podría depararme me planteé seriamente prepararme unas oposiciones a conciencia… y tras casi dos años aquí estoy, Policía!
Quizás hubiese triunfado por el mundo de la empresa privada o viajando al extranjero con el status de Ingeniero (que suena muy guay), pero tomé mi decisión. Ahora soy una persona super feliz con mi trabajo, totalmente distinto en cuanto a labores profesionales se refiere… y lo que es mejor, tengo la suerte de haber aprobado en mi ciudad.
Animo a todo el mundo a lanzarse a crear su propia empresa, especializarse o a buscar nuevos caminos (ya sea cambiando de estudios, profesión o país). Estoy harto de escuchar amigos y compañeros que se quejan de su situación laboral sin hacer nada por cambiarla…
Me encanta tu blog Alfonso, eres un crack.
Interesante decisión, Ingepolicía :-) Para cuando tu blog contando las experiencias en las Fuerzas de Seguridad del Estado? :-)
Buen texto, es entretenido, una guía para no equivocarte… te diré una cosa, los que no se equivocan en este tipo de asuntos como en la mayoría de los asuntos son los que nunca tuvieron dudas, nunca se pararon a pensar si estaban haciendo lo correcto, personas que con 9 años ya sabían que serían grandes abogados médicos o ingenieros y que con el paso de los años lo han conseguido pagando el precio de haber pisado muchas cabezas y dejando a muchos iguales atrás no siempre con juego limpio, las personas que triunfan y están bien adaptadas a una sociedad tan criminal como ésta por fuerza de una manera u otra son cómplices de esta basura y por lo tanto son otra basura con estatus, para no equivocarte y tener la certeza de que no te equivocas debes ser un psicópata sin conciencia y los demás “pringaos” a mendigar.
Hola ingepolicia. Una pregunta tal vez absurda o indiscreta pero… ¿como sigue tu espalda y tu cabello?
Corren malos tiempos Javier, hay que sacar esto adelante entre todos… aunque no es fácil.
¡Sublime reflexión! Iba a contestar con la historia de “porqué la hippy ibicenca que soñaba escribir novelas, quería ser asistente social para ayudar al prójimo pero decidió que mejor ser psicóloga, y al final… ¡Se hizo periodista!”. Pero ya en la mente me sale la Biblia en verso, así que me reservo un post :) Pero ya os avanzo que como “reincidente” me parece que he pasado por varias fases, ay.
Hola, yoriento, me encanta tu blog y hace poco que lo he descubierto. Una amiga me lo recomendó. Me interesa especialmente porque tengo un hijo que pronto tendrá que tomar la gran decisión, ésa que nos marca nuestra vida de adultos: a qué dedicarse. En mi caso, yo soy la pura encarnación del punto 6: persigue un sueño sin tener un plan B. Yo estudié Filología, Clásicas: latín y griego para más señas. Me encantó hacerlo. Y tenía claro que quería ser profesora. Mi padre me alertó sobre mi poco sentido práctico, pero ya sabes, eres joven, rebelde e idealista… Tras tres infructuosos años de hacer oposiciones y no obtener plaza, me planteé en serio hacer una profunda re-orientación profesional de mi fracasada vida laboral. Barajé varias opciones y al final me decanté por estudiar Enfermería, al terminar, hice la especialidad de Salud Laboral y eso me abrió las puertas del mercado laboral. Muy pronto conseguí trabajo en un Servicio de Prevención de Riesgos Laborales. Hace 14 años que trabajo allí. Me gusta mi empresa y me gusta mi trabajo y eso no significa que en mis horas de ocio no me dedique a mi otra afición. Es una gran verdad eso que dices de que la vocación se puede construir. Todo a lo que uno se dedica con ahínco y de lo que empieza a conocer puede ser altamente interesante.
Hola a todos. Muy chevere el artículo. Aunque no me quedo claro algo: estoy completamente de acuerdo en que debemos tener un plan B para perseguir un sueño o para estar laboralmente bien, es decir, no puedo quedarme solamente en la carrera que estoy haciendo sino buscar otras alternativas, por ejemplo, los hobbies pueden ser otra opción para rebuscar algún dinero en el futuro (pero los hobbies que puedan dar dinero, como por ejemplo, hacer un curso de pastelería, panadería, etc.). El caso es que actualmente estudio para ser profesor de Inglés, me ha gustado demasiado. Dicen que no es tan buena paga aquí en Colombia, pero es mi pasión. Me pregunto si esto podría ser factor desencadenante para abandonar la profesión. Es decir, aunque tengamos una motivación intrínseca por lograr nuestros sueños, ¿no siempre se nos va a dar?. Por que en realidad lo que siempre he pensado que cuando haces una cosa con pasión y motivación, serás el mejor. Ya he tenido la experiencia y eso que aún no me graduó y me siento muy bien estudiando esto, pero es una duda que me agobía en el fondo. ¿Creen es posible mediante la motivación, el esfuerzo y la pasión que uno le ponga, subir escalones en la píramide laboral?. Bueno, aunque ustedes me dirán que también es imprescindible hacer una especialización, y eso quiero hacer, ya sé que en qué quiero especializarme, pero me surge esa simple pregunta.
Mil gracias y disculpen si no me he hecho enteder bien.
Hola! La verdad que en cuanto iva leyendo el artículo me he dado cuenta de que estoy totalmente equivocada.Tengo 18 años y he comenzado este año Magisterio. Soy una persona muy inseguro e indecisa a la hora de tomar cualquier decisión. Elegí estoy sin saber, puesto que siempre he sido buena estudiante mi madre nunca me ha influido y me ha dejado tomar mis propias decisiones. Mi nota de selectividad era bastante buena pero creo que no he tomado la decisión adecuada. Magisterio es una carrera bonita pero creo que no me llena además de que no tengo vocación. A mi lo que me gusta es las letras, escribir quizás Periodismo pero se que soy muy timida para esa carrera o algo relacionado con la Salud…. La cosa es que se que voy a seguir estudiando esto aunque no me guste porque no puedo permitir empezar otra carrera ya que sería un año mas de gastos y mi madre le ha costado mucho esfuerzo pagarme mi primer año de carrera para ahora decirle que su hija no quiere estudiar eso. En fin, yo quiero estudiar algo que me guste y poder ayudar económicamente a mi madre y a mi hermano. Supongo que todavía no es tarde…
Hola Inma, permiteme y perdoname si me meto en lo que no me llaman. Tengo una hija de 18 años que aun no tiene muy claro lo que quiere. Soy divorciada y me cuesta Dios y ayuda pagar los estudios de mis dos hijos. Ella ha decidido irse fuera puesto que vivimos en un pueblo con pocas posibilidades universitarias y laborales. Tambien como tu es de letras , le encanta escribir y expresarse y tambien como tu, su madre ( yo ) le he dejado tomar sus propias decisiones. Lo que quiero decirte es que no permitas que el miedo a enfadarla o dececpcionarla te bloquee. Estas eligiendo tu propia vida y tu futuro y sabes o intuyes que estas equivocandote, asi que antes de que sea demasiado tarde cambia el rumbo, ella te quiere y va a respetar y valorar si se lo explicas con sensatez. Posiblemente te convaliden asignaturas, asi que no estará todo perdido, pero sobre todo, reacciona antes de que sea demasiado tarde y de que te veas inmersa en un mundo laboral qeu luego odiaras.
Asu, me siento identificado, no solo con una, es mas, con casi todas, me esta yendo mal en la universidad, no creo que sea por falta de capacidad, sino por falta de voluntad, estudio una carrera de ingenieria porque ingrese, ademas es una buena carrera, al menos en mi pais(soy de Peru) hay buena remuneracion y el titulo de ingeniero no me molesta para nada, otro punto es que mis padres se sentirian orgullosos, se sienten orgullosos, tambien mis tios, pero me cada vez la carrera se pone mas dificil, y me doy cuenta que la capacidad ya no es suficiente, necesitas voluntad para seguir adelante, pero ahora que ya tengo 2 años estudiando, no me llama la atencion el titulo de ingeniero, no me llama la atencion aprender mas, solo quiero aprobar y acabar la carrera. Mis padres han gastado ya mucho en mi, y a esta altura decirles que ya no quiero estudiar los decepcionaria, seria un golpe muy fuerte para mi y sobretodo para ellos. No veo otra salida que seguir, terminar lo que empece, asi me cueste demasiado, e imponerme la vocacion, reo que no me queda de otra, tu post me sirvio para sentirme mas miserable, tal vez si lo hubiese leido hace un año me hubiera armado de valor y le hubiera dicho a mis padres que no quiero seguir, obviamente todo lo que me pasa es mi responsabilidad, muy buen post, ojala a pesar que ha pasado tiempo desde que lo publicaste ayude a mucha gente.
El problema es que vivimos en una sociedad que nos obliga a trabajar para vivir. Si eso no fuese así, este artículo no tendría ningún sentido y no os estaríais flagelando por haber elegido mal los estudios.
Somos esclavos a tiempo parcial. Flagelaros por eso!
Bueno, lo primero quiero felicitarte sinceramente por el artículo. Me ha encantado y me ha hecho pensar, lo he leído varias veces. Mi historia es la siguiente: Empecé una ingeniería mecánica porque siempre me han gustado mucho los números, pero la dejé a los pocos meses porque la veía muy complicada y requería gran esfuerzo. Me metí a magisterio sin tener muy claro lo que quería hacer, porque “tenía que hacer una carrera”, ser un buen hijo. Cuando hice las primeras prácticas me di cuenta que los niños no eran lo mío, pero aún así la acabé, ya que me quedaba sólo 1 año. Al año siguiente de acabarla empecé otra cosa que he vuelto a dejar por falta de motivación total, y lo peor es que ni siquiera me hace ilusión el título de profe ni quiero buscar trabajo de ello, estoy bastante pérdido. LLevo muchos días dándole vueltas a qué hacer este año y todavía no lo sé, a pesar de que me he informado bastante más que la primera elección. Sé que tengo que buscar algo que me motive, que cambiar algo en mi vida, pero también que no puedo volver a equivocarme, ya que tengo 23 años. Me consuela que haya otras personas en mi misma situación, aunque no sea nada bueno. Tu artículo me ha abierto algo más los ojos aunque a pesar de ello siga siendo complicado tomar la decisión correcta. Pero bueno, no se que más puedo hacer o probar ya…
Perdón por el rollo y gracias Alfonso.
Hola, debo decir que con mas de 2 formas me senti identificada, pues yo elegi mi carrera sin pensarlo 2 veces, guiandome por lo que me convenia, en vez de por lo que queria. Tengo 18 años y estoy empezando mi primer año de ingenieria, soy inteligente, pero las ganas no estan, la motivacion, lo hago mas que por cumplirle a mis padres, mis notas no son las peores pero no son buenas, no doy todo de mi y es porque siento que no es el camino que debi tomar, yo queria estudiar med. veterinaria pero no luche por estudiar esto porque debia de cambiarme a otra ciudad que esta al otro lado de mi pais y mi familia no me apoyaba en esto, y porque pense que una de las pruebas que se rinden para ingresar a esta carrera no me lo permitiria, pero no fue asi, si quede, y aun asi elegi estudiar ingenieria. Quiero decirles a mis papas que ya no quiero seguir con mi carrera actual, e irme a hacer lo que me gusta, pero seria haber gastado plata (aunque tengo beca), y quizas puedo decepcionarlos, y lo mas seguro es que no me apoyaran a irme a otra ciudad para estudiar lo que realmente quiero, y es que les dije a unos amigos esta situacion y nadie me apoya, piensan que debería seguir con la carrera, que seria muy brusco el cambio de ciudad con un clima totalmente distinto y estando sola; pero es que si vieran lo infeliz que me hace saber que podria hacer lo que realmente me motiva, nose estoy demasiado confundida. No se si es peor nunca decirles a mis papas que no quiero seguir estudiando ingenieria, o decirles y decepcionarlos.
Www, este artículo me impactó. Yo a los 18 años entré a la facultad de contaduría influenciada por mis padres, pero a los 2 años la dejé para seguir “mi sueño”, entré a literatura cuando tenía 20 años, y ahora, a dos años de terminar, me di cuenta que la carrera no fue lo que esperaba, pero, ya tengo 23. Años e igual me pregunto si vale la pena empezar de nuevo, o seguir en literatura.
Lo prometido es deuda. La respuesta “De cómo la niña que quería ser escritora, pensó ser psicóloga para trabajar de asistente social pero acabó siendo periodista” se me alargaba tanto que al final escribí un post. Está en http://en1000palabras.blogspot.com.es/2013/06/la-importancia-de-llevar-las-ideas-cabo.html y espero que os guste, especialmente a tí, Alfonso. Pero en positivo, mirando adelante, viendo lo bueno del rumbo errático pasado y sobre todo lo mejor que está por venir. Porque ahora sí, ahora ya he tomado consciencia que “no hay mejor momento que ahora” y que nunca, y digo nunca, es tarde (a menos que ya estemos en la otra vida, en cuyo caso ya me callo). Gracias, Alfonso, por la inspiración aunque sea años después.
Hola, pues yo tengo 17 años y me encuentro en segundo de bachillerato, osea que entro a la universidad este año. La verdad es que me metí en el bachiller de ciencias por no saber que estudiar y porque me abría más puertas, y no me ha ido mal con este, pero me da miedo entrar a la universidad, porque tengo varias opciones pero ninguna vocación definida, así que me da miedo elegir una y luego equivocarme y tener que estar cambiando de carrera constantemente. Siempre he sido alguien que le ha costado tomar decisiones ya que llevo bastante mal la incertidumbre, lo que hace que también me decante más en carreras que tienen salida aparentemente. ¿Algún consejo?
hola, pues mi historia es muy parecida casi identica a la de todas las personas de mi edad tengo 23 por cumplir 24,y aun no estoy seguro de que hacer con mi vida, si tengo talentos y me apasionan el dibujo artistico y la psicología transpersonal, la filosofia y la musica, pero realmente estos gustos y talentos encajan en la vida laboral?? asi como para desarrollar un plan estrategico que me permita realizarme en por ejemplo: “licenciado en musica con especializacion en metal/rock”, y si sarcasticamente hablo por que estoy que reviento de no saber que elegir! primero a los 18 años comenze en arquitectura y si me gusto, sobre todo la historia, todo estaba bien, tenia buenas notas, y en quinto semestre comenze a perder interes y termine por dejarlo casi en lagrimas por que ya estaba a la mitad, y desde la preparatoria siempre fue un tabu para mi los estudios, aun asi llegue a esforzarme tanto que logre las mejores notas, mas siempre llegue a un punto al final de cada semestre que me sentia, como vacio y frustrado,retomando el momento en que deje arquitectura, comenzo mi “viaje” por las carreras profesionales, les explico: me inscribi en psicologia en la universidad de mi estado y decidi no presentar para mejor estudiar diseño grafico, ya que tengo talento para dibujar ;)… ahora al ingresar a una universidad privada en esta carrera, me comenzo a asustar el de que trabajare, de fotos y dibujos, y ahora me decian mis maestros, aqui no se trata de dibujar, se trata de publicidad.. muy bien pues me volvi a cambiar, a arquitectura, dure menos de un mes, y me volvi a salir, y ahora me meti la idea en mi cabeza que lo que yo necesitaba era pensar en ser como…”empresario” y ya que me faltaba seguridad, y toma de decicisiones, se me ocurrio meterme a la carrera de comunicacion ya que ahi me desenvolveria, y asi me relacionaria con la gente y asi podria tener mi empresa…dure tres meses y me volvi a salir para regresar de nuevo a arquitectura, mis padres ya estaban ( y estan pues bastante preocupados) ahora regerse a arquitectura mas seguro que en ningun otro momento, y aguante un semestre con buenas calificaciones y nuevos retos, al siguiente semestre casi a mediados me comenze a sentir muy vacio y sin sentido para lo que yo iba a trabajar si terminase de arquitecto, y comenze a pensar casi un mes y medio de desvelos, plegarias, filosofia …todo esto a solas, y un pequeño test vocaional, donde decia que mi mayor vocacion era el SACERDOCIO… por supuesto que por el gusto a la historia y a la filosofia, por lo cual decidi por tercera vez salirme de esta carrera tan idealizada de arquitectura y decidi entrar a psicologia, (la cual yo me la estoy paganado) y pues comenze como todos y todo al 100% diciendo ya no puedo fallar mi padre doctor, mi madre psicologa, claro que tengo madera y talento para apoyar al ser humano y trabajar no se…en clinica!… ahora que casi termina mi primer tetra, me encuentro con una profunda ira hacia mi mismo por tres razones:
1.- el cansancio mental, y emocional de tanta inestabilidad y cambio,
2.- el mentirme cada mañana diciendome: ” vamos esta es la buena por esto y por aquello”.
3.- la frustracion de no saber que carajos me pasa…(comienzo a pensar que no soy yo el del problema, mas bien es el sistema educativo y social y laboral, cerrado y antiguo).
ahora me pregunto que quiero hacer?.. honestamente ya no se y la verdad, es que por ahora estoy tan fastidiado que ..pues no me queda mas que desertar de nuevo y buscar la manera de o la forma de estructuraaaaar…..un plaaaaan….de vidaaa…..(eco en mi cabeza), esa es mi historia, he estado al borde de ya no querer vivir y eso si que no se vale! ANIMO! debe haber cosas realmente mas importantes por las cuales vivir que no tengan que ver con “desarrollar un plan de vida para autorrealizarte” y toda esa “realidad” (por que si pesa). mas pues no se hay que ser valientes, y elejir tal vez …opinen porfavor. diplomados?…, cursos?…o simplemente disfrutar la vida al 100 andando por aqui y por alla? saludos, y un abrazo desde mexico..!
pues creo que debes enfocarte en lo que mas te guste y en lo que te aperte dinero y sociabilidad…porque estar solo y analizando mucho…eso no es bueno…ya tienes tu panorama de loque pasa ahora toma accion
mucha suerte.
claudia
mmarquezclaudia@gmail.com
Muy buen su historia me identifico contigo quiero saber que hiciste abrazos me agregas a skype carlos.vergel8
muy bueno el estudio es lo mejor lo primero que ay queay en la vida
Creo que eres una persona muy valiente . Yo no he tenido que soportar tantos cambios , pero sé como te sientes .Despertarte muchos dias y tener miles de dudas en la cabeza , rondandote y pensando , mierda esto que es , porqué no me aclaro!! Porque no me pasa como a la mayoria de la gente, y me meto en una carrera que luego resulta que si me gusta??Pues no .Sabes, tu eres más sabio ahora , olvidate de arquitectura y si no estás bien en psicologia también salte , yo creo que serias más feliz haciendo muchas de tus pequeñas cosas . encuentra algo, no digo que tenga que ser una carrera , pueden ser muchos cursos , etc algo con lo que mantenerte y que puedas compaginar con lo que te guste : TTambien puedes volverte un emprendedor y poner una tienda de algo y al mismo tiempo disfrutar de pequeñas cosas que te hagan sentir bien , dibuja para tu placer , hazte voluntario , lo que quieras , y sobretodo , sal y habla con la gente , porque lo peor que puede pasar es estar 8 horas siete dias a la semana preocupado.
que un buen articulo,me identifico mucho con el.
En mi opinion el sistema educativo de este pais (colombia) hace que las personas salgan al mercado al buscar empleo y no ser empresarios,mantenemos esa actitud de estar dependiendo de un salario,ademas en la mayoria de las carreras no enseñan a como manejar su dinero ,he hay cuando vemos profesionales endeudados hasta la coronilla.
gracias por las opiniones
Lo de “funcionata” no me ha gustado nada, quizás sea porque soy funcionaria (docente). Me sorprende que tú que afinas tanto y precisas con gracia normalmente hayas caído en ese vulgar commonplace, excusa la redundancia. No me molesta el término pero sí que se use de forma tan ladina y peyorativa.
Aunque te parezca mentira a muchos nos entusiasma trabajar para la ciudadanía a cambio de un sueldo y unas condiciones laborales que no están mal, han gozado de tiempos mejores pero dadas las circunstancias no se puede quejar una sin que te caiga el tan manido “no te quejes que tienes trabajo”. Lo odio.
Soy la primera en pasar de corporativismos, no me malinterpretes.
Funcionarios como yo, orgullosos de serlo, hay a porrillo y hemos elegido la función pública por vocación. A la mayoría nos ha costado sudor y lágrimas, años y muchas renuncias lograr aprobar la oposición, ese esfuerzo y trabajo se merece un respeto, digo yo.
No puedo dejar de comentar que estoy de acuerdo en casi todo lo que apuntas en tus recomendaciones y te agradezco que las compartas de forma tan generosa en múltiples y variadas plataformas online.
Dejo aquí un enlace con parte de mis modestas aportaciones a esa ardua y pesada tarea de aprender inglés (de una p* vez)
http://edcvs.co/15f6GsY
Saludos
espero que nunca llegues a darle clase a mis hijos. la típica profesora retrasada que va de culta . thos who know do, those who don ´t teach. ale, aprende inglés ahora payasa.
Yo he pensado exactamente lo mismo. Los profesores deberían pasar unas pruebas de competencia exigentes, y no sencillamente un título universitario (ahora también un máster). Una cosa es saber matemáticas y, otra muy distinta, saber enseñar matemáticas y -tiremos la casa por la ventana- ayudar al alumno en su desarrollo personal.
Idiotas como la de arriba (de algún modo tengo que calificarla, señora) son una auténtica plaga, es que con solo analizar el espíritu pedante y auto-indulgente de la redacción de su mensaje ya puede adivinarse sin apenas margen de error lo inepta que es en la docencia.
Como dato: he tenido profesores peores y mejores, normalmente todos caminaban por la misma linea de mediocridad y pasotismo, aunque en casi todos los casos mantenían una actitud razonable y correcta. Sin embargo, no he tenido NINGUNA profesora buena, al contrario, seres ineptos que no tienen la más mínima idea de lo que significa educar, y apenas enseñar. Se muestran desconsideradas y condescendientes con los alumnos, y cuando se muestran interesadas es para cotillear y/o para sentirse auto-realizadas.
Respecto al blog: prefiero morir de hambre con un anhelo de vocación y esperanza que morir con una pensión miserable a cambio de haberte deslomado, haberte “prostituido” durante 50 años -toda tu vida- sólo porque “era lo que debías hacer”. Eso no es vivir: el capitalismo es como un dragón inmisericorde que devora y quema todo lo que se le antoja, y el que hayamos escogido éste engaño miserable como estructura social y existencial irrevocable me produce decepción y tristeza hasta la arcada.
Estudiad a muerte lo que os gusta, todo tiene salida si se lleva hasta el final, sólo hay que tener muy claro lo que se quiere y, más importante, se tiene que ser plenamente consciente de que estamos a la altura de lo que queremos, es decir, nos “quiere” lo que queremos.
…y si no, estudiad un grado superior y dad la vida y parte de la siguiente en las prácticas.
Saludos.
Que barbara leyendo esto me di cuenta que hago y pienso el 90% de lo que dice el post, que falta de visión y sentido de la realidad, no me gusta nada y no me llama la atención nada según las letras mas ingles pero no me atrevo a ver si eso es realmente lo que me gusta tengo 20 años y estoy empezando el segundo año de psicología y no me gusta. Me estresa mucho la parte estadística y la odio tampoco me gusta mucho la parte experimental, odio eso de los diseños experimentales las leyes de skinner y pavlov cuando se complican que si ensayos de razon que si de proporción que si la extinción de la respuesta provocada, que si contingencia puaj lo de psicobiologia se me da fatal, me aburre escuchar a los pacientes, no no un desastre nunca me imagine que la psicología fuera tan difícil y multidisciplinaria. No la quiero dejar pero no me veo de psicóloga, no se que haré de mi vida. Morir no se no se como estudiar algo q no te gustaaaa!!! Me parece imposible.
tranquila a cualquiera le pasa yo he entrado a la mejor universidad y no me gusta nada de lo que me dan :( m3e vuelve loca quimica fisica matemà tica y geometria igual que tu yo ya no se que hacer de todas maneras mira bien si te gusta de verdad aùn estas a tiempo mirate en algunos años si crees que puedes ejercer la carrera xq literalmente esa profesion es eso escuchar a los pasientes todo el tiempo … no te frustres tanto intenta conllevar la situacion …
Muy bueno el artículo!
Creo que todo el mundo hemos cometido alguno o algunos de ellos. Lo comparto con tu permiso. Muchas gracias!
¿Y qué pasa con la elección de carrera cuando estás casada y con hijos? Tengo 34 años y he realizado una investigación intensiva de carreras y opciones ya sea presencial o a distancia, esta última con pocas opciones a elegir, y estoy totalmente confundida. Mis áreas son la educación y humanidades. Tengo un certificado en inglés y he trabajado como maestra, los chiquillos definitivamente no es lo mío, las clases para adultos si las he disfrutado. El asunto es que siento que me formaron para esto desde niña, desde el colegio en el que me matricularon , todo era inglés, el certificado en inglés, por que les decían a mis padres este era el idioma del futuro. Pero viendo hacia atrás veo que mis deseos y perfil eran otros y no sé si valga que regrese a ellos, siempre amante de la literatura, me hubiera gustado cursar letras o tal vez sociología, eso sí me gustan los idiomas, estoy auto aprendiendo poquito a poco italiano. A veces creo que ya ni para qué estudiar mejor me pongo a trabajar como empleada en algún negocio o empresa, se necesita la plata. O sigo con lo mismo dando clases aunque sienta que esto fue algo impuesto. Me preocupa el futuro, qué voy a hacer de vieja y sin jubilación. A mi edad siento que más que cumplir sueños o perseguir metas debo cumplir responsabilidades.
Otra cuestión, ¿porqué nunca se habla de profesiones como chefs, peluquería, cosmetología, etc. cuando se realiza la prueba de perfil de carrera? ¿porqué sólo entran en debate la elección de carreras universitarias?
Empecé el bachillerato, repetí segundo, me aburrí y lo dejé. Hice la prueba de acceso a grado superior sin estudiar, aprobé; empecé el grado superior de Realizacion de Audiovisuales. Me encantó, lo terminé y no encontré trabajo. Me frustró. Decidí empezar un nuevo grado superior, no me gustó, a los 3 meses lo dejé. Este año he empezado la universidad, estudiando el grado de Geología y ya estoy pensando en si me gusta. ¿Porque me sucede esto? Mi problema es que he trabajado 3 años en un trabajo en el que me he sentido como una pu..ñetera mier..da, y esto empezó cuando tenía 17 años en un McDonald’s. Ahí me dí cuenta de que necesitaba urgentemente encontrar un trabajo en el que me sintiese motivado. Y tras estudiar y probar, he llegado a donde estoy ahora. No creo que los que hayamos llegado hasta aquí tengamos un problema de inseguridad, simplemente somos impacientes y queremos resultados rápidos. He tenido diferentes trabajos y todos terminan igual (quemandome). Cuando trabajo soy el mejor, y trabajo el que más, pero realmente ODIO TRABAJAR. Hasta ahora no he encontrado mi trabajo perfecto, y la gente que sabe cual es su trabajo perfecto no sé como lo han averiguado, si posiblemente no haya entrado ni siquiera en materia práctica. Lo que pasa es que esa gente no lo piensa y nosotros SÍ, somos personas que ansiamos conocer cuál será nuestro futuro elgiendo determinado camino. Por lo tanto, como tú tampoco sabes cual es tu camino, prueba diferentes materias hasta que encuentres la que más te gusta, y te sientas agusto, pero eso sí, date tiempo. A mí por ejemplo la Geología como carrera no me gusta, pero si que me gusta el tema de salir al campo recoger minerales y después investigar con ellos, pero aparte de esto también me gustaría trastear en laboratorios, adiestrar animales o quizás hacier reir a la gente. Lo que no quiero ser lo tengo muy claro, pero lo que quiero ser no tanto ¿porque? porque aún no lo he probado. Así que, para quitarme la espinita de incertidumbre, me he apuntado a un curso de Adiestramiento de Animales Salvajes, para conocer si realmente me gusta y empezar a decidir mi futuro mientras tengo algo que me permita mi existencia.
Hay gente que puede estar en un trabajo 50 años y estar felices, yo, no soy así, me gustan las novedades, y los cambios continuos por eso decido entretenerme probando con varias cosas a la vez, e ir decidiendo. Puede que algún día encuentre lo que me gusta, puede que no, lo que sí que sé, es que nadie se conforma con lo que tiene, y el que se conforma es porque miente.
El que no arriesga, no gana.
de todos los comentarios que he leído en este post… el tuyo es el que mejor explica lo que he sentido siempre. esta frase es de libro para mí: “Hasta ahora no he encontrado mi trabajo perfecto, y la gente que sabe cual es su trabajo perfecto no sé como lo han averiguado, si posiblemente no haya entrado ni siquiera en materia práctica. Lo que pasa es que esa gente no lo piensa y nosotros SÍ, somos personas que ansiamos conocer cuál será nuestro futuro elgiendo determinado camino”.
hola soy naty neira p tengo 24 años y desde ke termine el cuarto muy bien me meti en la u y no me gusto la carrera y me retire y ahora trabajo en un negocio propio y soy feliz no tengo novio no me gusta pololear y soy feliz soy sin profesión y descubri ke esto me gusta el negocio vivo con mis papas aun y me preocupa a mi altura no tener carrera universitaria y madurar pero tengo mi negocio propio tengo solo cuarto medio con negocio propio mi pregunta es en ke me podre especializar a futuro y madurar mi proceso futuro
tengo 24 y me siento cada ves mas vieja sin profesión me preocupa a lo uniko ke me dedico es a mi negocio kisas mas adelante me especialice en algo relacionado con finanzas siempre me han dixo ke soy inmadura y yo digo ke no soy madura no me gusta pololear pero tengo metas de dinero en mi vida y viajar
el uniko problema ke e tenido en mi vida ke me molesta la gente ordinaria infantil pedófila y ke abusa y ke es mala y ke mata y ke es lesbiana y ke me dice eres inmadura siempre presenti ke había algunas personas malas en mi vida pero desde niña pero ahora siendo madura me gusta el negocio y me carga ke los hombres anden detrás mio una persona me dijo ke me cuidara por que hay gente mala por ahí no le hice caso y me gusta el negocio y relacionarme con personas toda clase tengo 24
me carga ke algunas personas me digan eres inmadura y no sabes hacer esto oooo me carga esa wea de niña me ha molestado ke me digan eres inmadura de chika fui madura de chika me gusto el negocio de chika dije lo mio es el negocio nose si tal ves mis papas me hubieran dejado mas libre hubiera sido mas madura
Es interesante leer todas las opiniones y sobre todo el artículo. Estoy seguro que a varias personas sin importar el país nos ha sucedido ésto.
Considero que somos seres de costumbres, y podemos adaptarnos a casi todo, el asunto es poder entender como funciona nuestro entorno y sentirnos seguros de lo que queremos en la vida.
Muchas veces la presión social nos hace tomar decisiones erróneas, así como nuestras inseguridades.
De lo que si estoy seguro es que al cometer muchos errores, en el camino me fui encontrando a mi mismo, y ahora aprendo a disfrutar lo que hago, no de una forma conformista, mas bien porque encontré el medio en donde puedo seguir educándome en lo que hago y así mismo ganarme la vida.
Confieso que los libros de autoayuda me sirvieron mucho en todo el proceso, sobre todo para no rendirme y tener una actitud mental correcta, luego de varios fracasos, que en realidad he tomado como experiencia adquirida de la vida.
Algunos solo quieren un título para ganar dinero(yo era uno de esos), cuando deberíamos estudiar para mejorar nuestro entorno y a consecuencia nuestras vidas.
Luego de probar con 3 carreras universitarias distintas, luego de incursionar e invertir en 3 negocios diferentes, finalmente… después de tanta prueba y error, ahora puedo vivir gracias al Internet… por lo menos en esta etapa de mi vida.
Posiblemente mas adelante obtenga otra diversidad de ingresos, y así mismo siga estudiando para mejorar mi entorno, por eso opino que no es lo mismo sacar un título para ganar dinero, que prepararse y capacitarse para entender como funciona la economía a tu alrededor y entonces así ganar dinero.
Es importante la educación, pero también es importante tener sentido común, criterio propio y mucha creatividad.
En primer termino , el articulo es bueno.Pero muy desilusionante, para una generación en la que no quisiera estar ahora mismo…y de la que aun sufro las secuelas de los puntos mencionados.
Tengo 31 años, empeze la carrera en 2001 Trabajo Social, un FP de la rama , por aquello de que la fp tenia mas salida, y un Master en Gerontologia ya que la poblacion es mayor …
Soy de esas personas a las que no las ha ido mal del todo. ( mucho esfuerzo, mucha oposicion ,superada, y vuelta y vuelta a empezar, porque al principio te faltaba experiencia y ahora que la tienes te falta un padrino.)
Hay factores externos que no dependen de ti, son externos pero si influyen en tu vida .
Eso si siempre se comete el error de pensar que eso a ti no te va pasar , hasta que te pasa.
En esa que dices 2000 euros, lo importante no son los 2000 euros es la vida que tienes que vivir para que esos 2000 euros sean alguna vez para toda la vida, donde tu quieres y como quieres y con quien quieres , y eso no garantiza que despues de un largo recorrido profesional 8-10 años lo vayas a conseguir.
Y en esto luego influye elfactor de la movilidad porque , resulta que como has estado en mil sitios tu pareja es de un lado , tu familia de otro y vives en otro, y ¿como arreglas eso?Ser funcionario no es lo mejor , es una opcion pero no la mejor.Los que estais a tiempo elegid otro camino antes de que os atrape este.
Me siento afortunada de tener un trabajo , el que estudie, y ademas de vivir dignamente.
Aun lucho por conseguir la estabilidad deseada, porque aquí tambien hay un lastre de inversion, (economica, material, y lo que es mas importarnte , vida años que no vuelven, destinos en los que estar y comenzar de cero una y otra vez ,porque lo importante es VIVIR )
Si volviera a tras y hubiera elegido otra carrera, ejemplo magisterio, hoy lo tendría mas facil..Al final para opositar …….
Suerte con tus proyectos e ilusiones… para toda la vida es la doble contradiccion de lo bueno y lo malo.Pero no todos tenemos la vida que queremos sino la que nos toca y mas en este momento actual de escasez de trabajo.
Un saludo.
cuanta razón tienes Alfonso, gracias!
Encantada con el articulo y con todos los comentarios! esto me llega en el momento justo! aunque hubiera agradecirdo haberlo leido tres años antes.
Mi historia es diferente a todas y a la vez se asemeja por eso me gustaria compartirla :
.hace unos 8 años(año 2006) mi familia y yo recibimos la grata noticia de que nacera un primo en barcelona, nosotros que viviamos en una ciudad pequeña de argentina, nos mudamos de continente felices motivados por conocer europa y vivir aqui.
Para poder viajar, yo, que solo tenia solo 18 años y me faltaban tres meses para terminar la escuela secundaria asique hice un monton de peripecias… estudiando en casa y sacando examenes rindiendo libre para poder venir con mis estudios terminados.
Llegados aqui a barcelona (2006) ,mios tios, me inscriben sin peder tiempo en una academia preparatoria para sacarme la selectividad. Casi sin entender para qué servia aquello, y siendo bastante aplicada, mi nota sera muy ajustada, un seis..
a todo esto me piden desde la academia, que escoja una carrera y una unicersidad que quiero ir…claro…sin intereses claros, acabada de salir de la escuela, llevando menos de 1 año en un pais totalmente diferente al mio…ppffff….no sabia si reir o llorar…asique cerré los ojos, y dije..a mi me gusta ingles, pues me mando a turismo que seguro me va ir bien y me va a gustar y blah…blah..
en el 3er año de carrera no habia aprovado casi nada, me gustaban solo 3 de todas las asignaturas…las demas no las podia pasar…pagando por una universidad privada…trabajando para poder pagarlo …dejé de asistir a clases…. y me dediqué a trabajar….
y bendito todo este tiempo!! me he dado cuenta de muchas cosas y sobretodo a arreglarmelas sola para buscar informacion! aunque aun hoy sigo sin saberlo…tengo claro que los idiomas y la linguistica es lo que mas me interesa..
hace ya 3 años de esos tres años cursados y la verdad fue un sacrificio impuesto por el ideal de futuro de mi familia… que no creo que llegare a terminar…
antes decia que me llego en el momento justo, pues me he quedado sin trabajo y estoy pensando en terminar la carrera por eso que dicen la familia de que un titulo te abre a otras puertas y te llena de otros conocimientos ..que todos sabemos sumar dos mas dos….y eso nos garantiza una relativa comodidad… y que el tener unos conociminentos mas profundos nos hace ser independientes — profesionalmente–ante cualquier sistema enconomico establecido…ya sea aqui o en la china… no es el titulo….sino todo lo bueno que puedas llegar a aprender y profundizar sobre eso que te interesa…y de lo que terminaras dedicando tu vida para poder cobrar minimamente algo….
intentare hacer lo que pueda por compartir tu archivo pues me parece de lo mas justo para quienes necesitamos unas palabras de apoyo y orientacion.
un saludo, Jezabel.
Holaaa!! No sé si ,alguien verá este mensaje , pero suplico que alguien de su opinión .Vereis, yo también me encuentro en uno de los peores momentos que nunca antes se me habian presentado. Mi paso por el instituto no ha sido un camino de rosas y no me refiero a las notas , soy más bien de ese tipo de personas que se esfuerza mucho en sus estudios para sacar lo que quiere, al menos me sentia así antes . El caso es que por multiples motivos tengo 18 recién cumplidos y ya me he quedado un año aqui en mi pueblo , porque después de echar los papeles de la uni para una carrera (que eche de chiripa, porque pensé que me gustaría y después me di cuenta de que no me gustaban lo crios))El caso eche también para módulo , pero un profesor mío me dijo que hacer el modulo iba a ser un error porque yo era capaz de sacarme una carrera. El caso , llevo un año horroroso y me da la sensación de que he malgastado mis 17 y mis 18 , estoy tan sumamente preocupada por mi futuro profesional que he tenido problemas de ansiedad y sobre todo acabo llorando muchos dias porque me siento como una persona que no ha encontrado su finalidad en la vida: Sinceramente , si he mirado todas las carreras y los lugares donde se desarrollan , he mirado los planes de estudios de las que más o menos me interesaban , pero al final , o no me gustan las asignaturas o no me veo aplicando sus trabajos , el caso es que hay varios fp , que me llaman la atención pero yo siempre he querido ir a la universidad , ha sido la ilusión de mi vida , pero también sé que debe convertirse en un infierno en el momento que te haces una idea de lo que podría ser y te das cuenta de que no es así.El caso , sinceramente ahora no tengo ninguna carrera que me guste verdaderamente , bueno me llama bastante literatura comparada pero tengo dos problemas no tengo ni idea de latín, ni de historia del arte porque hice el bachillerato de C. de la salud , que está bien , pero no me llaman las carreras de cicatrices y sangre .Además tengo miedo de acabar trabajando de profesor en un instituto : Por eso después de muchas lagrimas y disgustos con mis padres y amigos y la preocupación de mis familiares he tomado una decisión : Voy ha hacer alguno de los Fp que me gustan y voy a prepararme latin e historia del arte .Se me pasa este año la asignatura específica de la select , pero o la repito o entro con la nota general .En fin , tengo mucho miedo de equivocarme , pero YA ESTA BIEN , yo quiero dejar de ser una estupida llorona y pensar que todo está mal , y he aprendido algo cuando lo veas todo oscuro y difícil , la solución no es quedarse quieto , tienes que caminar sea cuál sea el camino que elijas , porque no puedo asegurar que no vaya a equivocarme , es más probablemente y seguro que me vuelve a pasar .No soy una de esas personas que tiene un sueño que adora .A esas personas yo las envidio .En fin , quizás soy una cobarde?? El caso es que me niego a entrar en la uni sin ilusión , por eso voy ha hacer mi Fp , que es mi plan B , porque en caso de que no me guste la carrera o me equivoque al meterme al menos sé que tengo un titulo ahí que me da cierta estabilidad:Quiero hacer muchas cosas , me gustaría poner una libreria , y sobre todo dar clases de baile , no tienen que pagarme mucho , ni tampoco quiero que haya un profesor de Ballet que esté tan obseso por la técnica que haya perdido el norte y que me haga aborrecer el baile , quiero bailar sin que la sociedad de m*** en la que vivimos convierta algo que me gusta en una cosa horrible. Perdonar está parrafada , yo tambien coincido con una gran cantidad de puntos y equivocaciones , y por supuesto hay momentos que odio el mundo donde vivo y otros que lo adoro , pero aquellas personas que lo estais pasando mal os mando un abrazo muy fuerte y quiero daros mi opinión porque pienso que es algo que también me esta pasando a mí.Si no os sentis realizado y si veis que no encontrais un verdadero trabajo que os guste , no os obligueis a aceptar vuestra situación porque la vida da tantas vueltas que asusta , en algún momento de vuestra vida lo vais a encontrar aunque tardeis cincuenta años:Sé que no es un consuelo , pero pienso que una vez hallamos experimentado todo lo que creiamos querer ser lo encontraremos , nunca se sabe.A vosotros que os parece ?? Es una buena meta la que me marqué , o pensais que deberia ir directa a la uni.Muchas gracias de verdad por el artículo , es una realidad. !!! =) Animo
Yo lo vería al revés:
Voy a terminar mi G. Superior, y no lo considero un “salvavidas”, sino el barco entero. Cuando termine, amueblaré ese barco con mi carrera de letras, que voy a estudiar en la universidad a distancia a la par que trabajo.
Se tiene la idea errónea de que el G. Superior es para los que “no pueden” con la carrera. Es una estupidez. La utilidad y el carácter de ambos estudios es completamente divergente. Siempre hay gente en el G. Superior que viene de terminar una carrera, y no les resulta más fácil que al resto.
Honestamente, si no se quiere estudiar una carrera como ADE, Ingeniería, arquitectura, medicina, derecho, química, física, matemáticas, economía; lo que se va a hacer con mucha probabilidad es estudiar una carrera que no te va a dar trabajo. Si te gusta la literatura o la historia: ¿por qué no estudiarla por tu cuenta, por qué enredarse en la boba titulitis? Y si, después de todo, quieres estudiar la carrera, hazlo a la par que trabajas, o después de haber obtenido un G. S.
Y si las primeras carreras no son de tu vocación (que pasa la muchísimas veces), pues no las estudies, lo contrario sería algo así como prostituir tu conciencia.
Saludos.
tengo 34 y pienso que hasta los 28-30 puedes empezar tu vida de 0 a partir de ahi olvidalo.
vamos voy ahora a una entrevista para ser fotografo diciendo “no tengo experiencia laboral, porque he sido siempre informatico y queria cambiar” y entre eso y la edad no me cogen ni es mis mejores sueños.
Se que me vais a lapidar mucho por lo que voy a decir pero ahora mismo si tuviera que dar un consejo a quien va a empezar a estudiar sin duda les diria:
“Estudias para el trabajo que mas te paguen, sea el que sea”
Se que muchos diran “nooo hay que trabajar de lo que gusta o seras infeliz!!” no nos engañemos, que % de la gente acaba disfrutando de su trabajo? un 1%? 2%? Ya que todos vais/vamos a ser de ese 98% que mirara el reloj a ver cuanto queda para irnos a casa mejor es que al menos te paguen muyyy bien, porque con dinero todo se lleva mejor.
Lo de “trabaja de lo que te gusta realmente” es lo que se les cuenta a los niños para dormir, pero luego eso no funciona en la vida real.
ya te puede encantar jugar a videojuegos que si eres probador de videojuegos acabaras hasta los huevos, te puede encantar el sexo que si eres actor porno estaras harto cada dia de lo mismo, o simplemente cortar el pelo a la gente que cuando lleves muchos años cortando el pelo solo querras irte a casa y miraras el calendario a ver cuando es la fiesta mas cercana para no tener que ir a trabajar.
Es triste, pero es asi.
Asi que repitiendo hacedme caso…haced una lista de las profesiones mejor pagadas y escoged una de esas, ya hareis lo que os gusta en vuestro tiempo libre y dado que eso no lo hareis como un trabajo SI sereis felices haciendolo.
Pues será por culpa del grado que estoy haciendo pero no le veo ni pies ni cabeza a este articulo, por una parte no seas tonto de seguir tus sueños porque seguramente no tengan futuro, pero por otro lado no te pongas a hacer algo que no te gusta porque ¡menuda perdida de tiempo!
No sé… llamadme tonta… pero pensé que me iba a ayudar en algo esto (sufro de crisis de qué hacer con mi carrera) y solo me lio mas la cabeza.
Saludos.
Madre del amor hermoso, creo que por fin he encontrado el artículo más desmotivador que existe en castellano. Esto está a la altura de “en el futuro habrá 100% de paro y seremos todos esclavos”, así es como veo el artículo.
¿Y el autor del artículo, nunca cometió errores? No, seguro que no ;-)
Me ha encantado el artículo!!!… aunque me ha dejado un sabor de boca amargo…amarguísimo… Pues creo que prácticamente cumplo los 10 puntos!!! Aunque lo peor de todo es que nunca aproveché la oportunidad utilizar esos errores para ser funcionaria…
Ahora con 35 años, estoy en el paro, no he vivido mal, pero no sé cómo afrontar el futuro a nivel profesional.
A estas alturas, con una hija y una hipoteca y viviendo en el pueblo sí me he planteado hacer oposiciones… pero no por realizarme, si no por tener una seguridad laboral y poder alcanzar mi verdadero objetivo: tener un horario que me permita estar con mi hija y mis aficiones y además cobrar un sueldo más o menos digno… No todo es el trabajo!!!!!
Yo no acabé el bachillerato, me salí en segundo porque empecé a rallarme con mi futuro. Me presenté a las pruebas para grado superior, las aprobé y termine el grado superior de Realización de Audiovisuales. Tras terminarlo no encontré ni un solo trabajo relaccionado. Tras dos años, y probar con turismo online, fp de electrónica y grado en geología, me he dado cuenta de que no se que quiero esperar de la vida. Hoy tras investigar en mi mente y decantarme por algo, no encuentro una solución, así que, mientras busco, estoy estudiando FELICIDAD, disfrutando con mi amigos, haciendo deporte, viajando y compaginandolo con un trabajo que no es el trabajo de mis sueños pero no me come tiempo ninguno para hacer lo que quiero cuando quiero y como quiero. Solo hay que encontrar ese equilibrio en tí mismo.
muy bueno el articulo, y pues yo estoy a punto de entrar a la universidad toda mi vida eh estudiado informática y la verdad no me ah gustado del todo, quiero probar cosas nuevas y he pensado en estudiar Biotecnología, lo ilógico es que no soy muy buena ni para química ni para física,así que cuando se lo conté a mi familia y amigos me dijeron que iba por un mal camino ya que si no se mucho de eso me iría muy mal.
estoy muy confundida ya no se si irme por . en sistemas ya que ya tengo todas las bases o arriesgarme por Biotecnología aunque todos me den desánimos. :(
No te preocupes en el Secundario/Bachillerato nunca me fue bien Matemáticas y ahora no creerias estoy estudiando Ingeniería Electrónica y solo es cuestión de ponerle mas PRACTICA y dedicación a esas materias difíciles que las sortearas sin problemas y al fin de cuentas trabajaras de algo que disfrutas y hasta que lo harías GRATIS piensa eso. Suerte!
Muy interesante el artículo Alfonso. Mi caso se puede asemejar bastante (que no del todo) a los de otras personas que han comentado: desde el instituto y durante años, tenía muy claro que quería estudiar Física. Logré entrar sin demasiadas dificultades pero cuando acabé el primer año, acabé bastante mal. Mi media de notas había bajado mucho y la carrera no era lo que me esperaba. Decidí aguantar y seguir (cometí el error 5, que en realidad era por el 4, y también cometí el 6) y llegué a 3º, donde fue el desastre total. Estuve en la última promoción de Licenciatura, y al suspenderlo casi todo me vi obligado a pasar al plan nuevo/Bolonia (era una locura matricularme en varias asignaturas sin clase presencial). El mayor problema fue que, al cambiar de plan, muchas asignaturas cambiaron: pasé de tener los 2 primeros años limpios a tener que aprobar 6 asignaturas de esos cursos (totalmente nuevas o no convalidadas con asignaturas de Licenciatura, lo cual me hundió aún más. Llevo dos años más sin levantar cabeza, cada vez más convencido de que he elegido la carrera que no debía, pero no soy capaz de decírselo a mis padres porque se ha puesto mucho tiempo, dinero y esfuerzo en esta carrera como para abandonarla. Estoy cada vez más desesperado, no soporto esta carrera y sentarme a estudiar se me hace un mundo. Mis padres me dicen “Sólo te falta un año y medio, ya que estás, termina” pero vistos los últimos 3 años, en dos años esto no se va a acabar. ¿Qué debería hacer?
No dudo que cada unos de los comentarios tienen un buen fundamento y ya sea que se estudie una licenciatura, maestría o doctorado, una cosa es muy cierta, una institución no solo le da prestigio y buenas bases los docentes, el alumnado tiene muchísimo que ver pues como sabemos el esfuerzo es personal y aún que el sistema no sea el mejor sí se puede.
Aun que ya soy una mujer entrada en años, me aventé a estudiar psicología en la UIC, y afortunadamente no tengo queja de mi escuela, bueno, al menos de lo que es mi carrera, pueden consultar este sitio http://www.uic.edu.mx/psicologia.htm tal vez puedan ver algo que les interese.
Por último pero no menos importante recordemos de con una buena administración de nuestro tiempo y recursos podemos hacer que las cosas pasen y hablo de buenas cosas.
Saludos.
Yo me quedé fuera del mercado laboral. Conseguí que me contrataran de Contable y media hora antes de que finalizara el período de prueba me dieron la patada. Antes habia estado de comercial pero decididamente no era lo mio.
Nada mas salir del mercado me monté por mi cuenta y estuve 11 años aprendiendo a golpes hasta ser un profesional, trascurrido ese tiempo comencé a tener crisis de ansiedad y tuve que traspasar mi empresa o me moría de la angustia.
Actualmente no me cogen ni me llama nadie, llevo 3 años deprimentes sin encontrar un trabajo. He decidido retomar los idiomas pues en el período que trabajé por cuenta propia lo dejé de lado. No sé si actualizarme al grado, opositar o que narices hacer. Preocupadisimo de no tener ningún futuro y viviendo con mis padres que están jubilados.
Alguien podría aconsejarme que hacer?
Gracias
El artículo me ha encantado, pero al mismo tiempo me parece un poco pesimista. Da la impresión de que uno no puede hacer otra cosa que equivocarse. Lo cierto es que creo que he cometido todos los errores alguna vez salvo el 5 y, en cambio, puedo confesar que actualmente tengo un trabajo que me gratifica un montón y ayuda a hacerme feliz. Mi mayor duda es con el punto 6. Yo creo que sí que hay que estudiar aquello que te gusta, que será más fácil involucrarte en ello, buscar formación complementaria o especialización, trabajar en red con otros profesionales… En cambio, creo que si eliges algo que no te motiva, pero tiene salidas, puedes acabar siendo uno del montón y no dedicarle el espacio suficiente, pe: creo que un filólogo interesado en el tecnología lingüística tendrá más salidas que otro que haga farmacia sin tener ningún interés concreto. No obstante, estoy deseando leer tu libro.
Hola Bubu, gracias por tu comentario.
Como habrás leído yo también hago autocrítica, también he cometido algunos de los errores que menciono.
El objetivo del artículo es hacer conscientes de los potenciales errores que podemos cometer en la elección de objetivos profesionales, algunos errores no tan evidentes y otros repetidos una y otra vez.
No se trata de obsesionarse con las decisiones ni de fustigarse con los posibles errores cometidos sino de tomar perspectiva antes de decidir y de aceptar las consecuencias de las decisiones. En todo caso, si las decisiones no nos llevaron a buen puerto, es mejor tomar iniciativa en lugar de esperar y resignarnos.
Enhorabuena por el esfuerzo con un artículo que pasa por describir un abanico tan amplio de situaciones, tiene mérito. Es inevitable pasar por alguna de ellas. A veces, es más fácil hablar de ello a posteriori. Lo que observo, como Orientador , es que para tomar decisiones, a veces se mira sólo “afuera”, al estudio del mercado, o no. Y otras veces, sólo se usa de guía algo procedente de “dentro”, una sensación, una expectativa, etc. En mi opinión se descuida la indagación entre el adentro y el afuera. Y creo que habría que construir modelos de simuladores que analizarán esta interacción. Y aún así, estos modelos no contemplarán lo imprevisible. Quizás, si nos olvidamos de la lógica cartesiana, y nos posicionaramos en la teoría del caos o sistemas complejos no lineales, nos aproximariamos algo a la realidad actual la que cuesta tanto acceder, y que es íntima de cada cuál, y genuina de las relaciones íntimas que tuvimos, con nuestros padres y familiares cercanos, en quienes confiamos para dar pasos en momentos que aún no estábamos suficientemente maduros para tomar esas primeras decisiones, si nos decidimos confiar en esos apoyos. Del otro lado, quienes desconfiaron de esos apoyos y se apartaron de las típicas profesiones familiares. Estos últimos, los aventureros, requieren intimar con apoyos nuevos que les sirva de guía, y que ayude a diferenciar entre la realidad y la fantasía, de las que este artículo da buena prueba de ello. Para mi esta es la importancia de tener mi orientador o mi orientadora. La opción de dudar tanto y no elegir es la peor de todas. Me invitas a participar monstruo.
Gracias, Luis. Creo que tendríamos que cambiar nuestra cultura de decisión, experimentar y probar más en lugar de elucubrar en abstracto. Hay que equivocarse más rápido y más barato en lugar de tomar caminos tan caros que exige mucho esfuerzo desandar.
Lo mejor de todo es que el artículo es del 2007 y hoy sigue más vigente que nunca.
Alfonso, lo has clavado.
No estoy de acuerdo,cada caso en la busqueda de empleo es distinto, metes la pata solo cuando no intentas,no buscas,te quedas en casa,todo lo que hagas para formarte es bueno (el saber queda en ti) prefiero gente que haya estudiado algo que le gustaba a uno que estudio para trabajar,quiero gente con vocacion,ahora bien no hace falta un titulo universitario para trabajar y la cuestion es saber si quieres trabajar o seguir estudiando, dependera de la nesidad de trabajar.Meter la pata es no intentarlo
Yo me siento totalmente identificado
Mi caso:
Acctualmente tengo 21 años. Estoy en 3ero de Derecho y ADE “repitiendo” un año. En el colegio era prácticamente wl mejor de mi clase y “obviamente” tenía que hacer una carrera prestigiosa para continuar mi trayectoria. Gran error.
Ni me informé acerca de ella. De lo que suponía hacer un doble grado, del esfuerzo que conllevaba… Esfuerzo que por otra parte sólo es posible ser soportado si te gusta la carrera. En mi caso, no es que no me guste, ES QUE LA ODIO. Sin embargo, era muy díficil el paso de dejarla después de 4 años. Al fin y al cabo solamente me quedan un par de años, y afortunadamente creo que tengo baatante cabida en la rama del marketing.
En cuanto a nnotas, con respecto al colegio han bajado estrepitosamente. Yo por mí, no estaría estudiando ninguna carrera, pero parece que en esta sociedas te tieneenes que especializar en algo sí o sí. Esto parece un videojuego malo. Además, que el sistema actual lo que más valora es la memoria pura y no la creatividad y la originalidad de cada uno. Es lamentable. Yo personalmente estoy harto de todo y con una gram incertidumbre acerca de mi v8da.
Aconsejo a todos los que estén a tiempo que se informen bien bien de lo que hacen y que no se dejen aconsejar por nadie, excepto ellos mismos. Es su vida, no la de los demás.
Gran artículo.
He cometido los diez errores del articulo en el siguiente orden: siempre quice estudiar ingenieria eléctrica, pero no pude entrar a la publica y no contaba con fondos para la privada, asi que me decidí por la ingenieria industrial que era mas barata, pero despues no pude seguir por problemas con los horarios de trabajo, luego pude contar con los fondos pero luego me tocó salirme luego despues de dos semestres, otra vez por dinero (En los que me fue muy mal academicamente) pero bueno, tengo una alternativa: cursar una carrera tecnológica afin con la ingeniería eléctrica, espero que me resulte bien, joder.
No estudies psicología. Es una fabrica de parados frustrados engañados por las facultades.
Buenas a todos, aunque veo que el último comentario es un poco antiguo considero que tengo que hablar de mi caso que es un poco especial.
Pues resulta que tuve un problema de pequeño, y no se dieron cuenta hasta primero de primaria, pues no oía bien, aunque ellos creía que sufría un leve retraso. En el colegio quisieron que repitiera, mi madre se negó porque ya tenía los libros comprados, así que pasé de curso pero me pusieron a clases de refuerzo al terminar las clases. No recuerdo muy bien esos años de mi vida, lo único que recuerdo es que después de la operación en seguida me puse al nivel de los demás compañeros, destacando en lectura, escritura y sobre todo, dibujo.
Sin embargo, me pilló la Educación Secundaria y fui a parar a un instituto que no me motivaba, eran unos barracones mal montados, en verano hacía mucha calor y en invierno te morías de frío. Los compañeros tampoco ayudaban, pues la mayoría era gente que estaba hí por “obligación” hasta cumplir la edad mínima para ir a trabajar. En esos dos años (tercero y cuarto) ya que hice hasta octavo de EGB, no estuve demasiado motivado así que mis notas bajaron drásticamente, dónde sobresalía y sacaba excelentes era en las optativas, sobre todo en materias artísticas en las que se tenía que aplicar el dibujo. Como no sacaba muy buenas notas mi tutora habló con mi madre y le dijo que le aconsejaba que estudiara un fp en vez e bachillerato. Mirando las diferentes ramas de fp decidí elegir electrónica, más que nada porque mi hermana trabajaba en un taller de electrónica y a ver si al final me podía enchufar.
Al terminar el grado medio me preparé la prueba de acceso a grado superior porque con el grado medio me era imposible encontrar un empleo y ahí elegí el de sistemas de telecomunicaciones e informática. Al terminar, no me veía capaz de trabajar en ello, no consideraba que tuviera los conocimientos suficientes, así que al ver que varios compañeros estaban animados a seguir con la ingenieria técnica, pues decidí embarcarme en esa aventura. Algo que fue factor decisivo fue la convalidación de ciertas asignaturas. Estando en la carrera me dí cuenta que no era lo mío, pero para eso tuvieron que pasar unos años, aunque me dí cuenta que algo que me costaba mucho al final empezó a gustarme, las matemáticas. Terminé la carrera por miedo a lo que dirían los demás y para demostrarme que podía hacerlo.
Más tarde, con la intención de hacer algo de animación 3D me apunté a un máster de multimedia, que al final resultó ser puro teórico y una perdida de tiempo. Sin saber que hacer ni encontrar un empleo estable, había trabajado como comercial y dando algunas clases, decidí hacer el máster de profesor de secundaria pero al acabarlo me di cuenta que tampoco era lo que motivaba estar delante de más de 20 alumnos dando clases de informática, algo de lo que me había negado a trabajar y que al final es lo que me da un sueldo a final de mes ya que he terminado en un consultora.
Con esto quiero decir que el artículo me parece muy acertado y ahora si pudiera volver hacia atrás tengo claro que elegiría bellas artes o diseño gráfico y que luego me especializaría en animación. Ahora con mis casi 34 años estoy planteándome hacerlo como hobby para no arrepentirme el resto de mi vida.
Así que elegid muy bien los estudios y pedir orientación si hace falta.
Saludos.
PD.: Mi padre siempre decía que el dibujo no me daría de comer y que había gente muy buena. Pero ahora no me siento a gusto como informático y tampoco tengo ganas de avanzar en este sector
Gracias, Pedro.
La mejor orientación profesional es la que aportan los casos reales, a veces la realidad supera la ficción, y muchas veces las malas decisiones son producto de la falta de paciencia y de apoyo, no de criterio.
En todo caso, añadiría una sugerencia: todos estamos en tiempos de reinvención y tiempo para reinventarnos.
La vocación no se espera, se construye: trabajar en lo que podemos pero persiguiendo lo que queremos, aunque sea un minuto al día.
Bueno justamente acabo de salir de la licenciatura y estoy terminando la tesis. Aunque ya terminé la primera etapa del proceso, me ha venido muy útil este artículo para las reflexiones que debo tomar para elegir bien donde hacer mi posgrado.
Por un lado, pues si me arrepiento un poco no haber podido estudiar exactamente la carrera que quería (Lic. en Física, 4 años) puesto que no se encontraba en mi ciudad, y no contaba con los recursos ni el apoyo de mi familia para irme a otro estado donde se ofreciera (en mi país las becas de licenciatura no alcanzan ni para pagar la mitad de la renta de un piso en otro lugar, ni aunque seas alumno de excelencia). Por eso me vi obligado, al igual que muchos de mis compañeros, a irme por lo más próximo (Ing. Física, 5 años) donde pues, por una parte, tuve la oportunidad de hacer una movilidad en Europa con una beca del 100%.
Ahora yo quiero ser investigador por lo que busco hacer mi maestría y doctorado, donde ahora puedo estudiar en otra ciudad ya que las becas de posgrado en mi país son muy buenas y permiten subsistir individualmente (muchos las consideran prácticamente un sueldo). Y aunque mis padres se siguen oponiendo a que estudie en la capital (donde es algo peligroso pero están las mejores escuelas), pues como dice el artículo ya debo tomar el riesgo y pues buscar los medios para irme ahora que puedo, pues ya tengo bien trazado mi objetivo y tengo mi plan B y plan C (si no puedo ser investigador en la academia, tengo muchas opciones para entrar a la industria por el tipo de habilidades que voy a adquirir).
Por ello yo les sugiero a los que van empezando la licenciatura que busquen como sea estudiar donde quieren, y si no pueden pues traten de realizar una estancia en otra parte de su país o en el extranjero (con beca obviamente) para complementar su formación, además de que se vayan acercando con la gente que pues es afín a su área para ir formando sus redes profesionales con tiempo (eso me ha ayudado mucho no sólo a buscar posgrados, sino que gracias a ello a pesar de todo tengo oportunidades de trabajo relacionadas).
Vaya, no sé como he acabado en este artículo, y me alegra saber que no soy la única que ha cometido estos errores. Mis amigos la mayoría parecen saber lo que quieren, lo hacen, algunos están con la carrera que aunque tal vez no era la que querían igualmebte siguen hacia delante y no le dan muchas vueltas, porque total, ya que están ahí… Siempre me sentí muy sola por ello. Empecé a estudiar farmacia porque me gustaba la ciencia y por probar r básicamente, pero nunca lo vi como algo que terminaría, era algo más bien en lo que entretenerme mientras descubría lo que quería.. Sí, es tan estúpido como suena, pero en mi mente adolescente todo me parecía correcto, qué coño estaba pensando? En fin, el resultado han sido años perdidos y llenos de estrés y ansiedad y pensar que podría hacer algo mejor, ya que sólo me ha hecho sentir que no me llevará en la dirección que quiero que vaya mi vida. Con el tiempo he descubierto lo que quiero, lo podía ha e r logrado sin pasar 3 años atascada en un lugar que odio estudiando algo que odio, sólo era muy inmadura para averiguarlo, y este hacer un fp superior para meterme a enfermería, con dos cojones 6 años más estudiando, total, peor que estudiando farmacia no podré sentirme. Pasé mucho tiempo culpandome por las decisiones que tomé, por no haberlo pensado bien ya que el tiempo no pasa en vano, por pensar que las cosas me irían bien de forma mágica, por evitar tomar decisiones por mi misma intentando contentar a mis padres y no por mi misma, por compararme continuamente con los demás que se dejan llevar y no luchan por lo que querían, pero estoy cansada ya de ello, yo no puedo hacer lo mismo y quiero mirar por mi futuro, quiero estar orgullosa de lo que haga, y aunque parezca un paso hacia atrás deja una carrera para comenzar un ciclo superior, creo que es un pequeño paso en la dirección correcta.
Cada persona es un mundo aparte. Las circunstancias de vida son tambien diferentes. La realidad es compleja. No hay formula definida q sea adecuada para todos. Seguir el instinto parece ser la unica solución. Cada uno lo sabe, no hace falta preguntar. Uno tiene dentro de si la solución, porque se conoce bien; aunque no lo suficiente para tomar una perfecta decision. Dios tiene la respuesta para cada persona, sabe cuál es el particular camino de cada quién, lo q le conviene. Si lo ignoramos tendremos que confiar en el instinto. pero aun así, confiando solo en nosotros, podemos llegar a buen puerto si hacemos estas cosas en la plena angustia: respirar un momento, reflexionar, mirarse a sí mismo y sentir él impulso del corazon. Una vez tenido en mente la decision, cuidadosamente elegida, ir hacia adelante, sin mirar hacia atrás, nunca hacia atrás, respaldándose en el afecto y el apoyo de la familia o la pareja o algún confidente para no estar solo. hacerlo todo con amor, con humildad, porque cuando se ama y se es humilde todas las puertas se te abren, y vives, que es lo más importante (nunca olvides esto). Al final las cosas se solucionaran, tenlo por segur@, porque lo has buscado con buen carácter y no con rebeldía. Paciencia, corazon (pasión), perseverancia, amor y, sobre todo, ESPERANZA, fe…
Es total, indudablemente. Aunque difiero en la lectura general que se hace. 1) Claro que vamos a elegir carrera por alguno de esos factores. Ni a los 18, ni a ninguna otra edad, eres Dios y lo sabes todo. Como tú dices, lo único que sabes hacer es aprobar exámenes. Ni puta idea de lo que implica trabajar en lo que sea (quizás deberíamos poner a la gente a trabajar y luego, que estudien, pero el sistema es así). Te vas a guiar, pues, por las asignaturas que se te dan bien, lo que te interesa, el éxito de tu cuñado en tal cosa, el sufrimiento de tu padre en tal otra, por proximidad o por el contrario, ganas de pirarte. Más o menos es como elegimos la mayoría de las cosas en la vida: yo voy a ver una peli por muchas de esas razones y puede que no me guste, pero no tengo otros criterios. Es que no soy Dios. 2) La realidad siempre es peor. Trabajar EN LO QUE SEA durante 8 horas, en un ambiente de mierda, con jefes y compañeros de mierda…al final es eso. Los procesos y las tonterías pueden hacer que acabes odiando lo que has estudiado.
En resumidas cuentas: culpar a la peña de cómo es el mundo y de las opciones que te da es un poco…. simplista? Naturalmente, uno no va a dejar una carrera que le va bien solo porque “no le convence del todo”. No es una camiseta, no es un tío que has conocido en una disco. Has sacado una nota, has entrado, estás ahí y va bien. Recordemos que no eres lo que sientes o lo que piensas, sino lo que haces… la sociedad de la productividad. No puedes pararte un año a pensar porque tienes una mala sensación y dejarlo todo. Por proximidad también se eligen las cosas porque uno tiene el dinero que tiene….tener un plan B tampoco es lo más recomendable. Ahora hay gente que se mete a estudiar diferentes cosas al mismo tiempo por si (dobles grados) y es un puto desastre. Mucho trabajo para idéntico resultado: el mundo laboral es el que es. Eso sí, más negocios y más expectativas a crear para luego soltarle al pobre tío con su esfuerzo que nadie va a pagarle un buen sueldo por tanta carrera….o conocimientos inútiles, porque al final el trabajo es simple: o contestas al teléfono, cargas cajas, escribes chorradas que te dicen, picas código o limpias o ordenas papeles. Todas las profesiones no dejan de ser así de simples, por más maquillaje que le pongamos.
Así que yo anoto:
– Estudiar es un puto negocio
– Estudiar sustenta un mercado laboral de miseria
– Estudiar ayuda al sistema a individualizar los fracasos de la sociedad
– Crea depresiones y ansiedades
No estudiéis.
Ah! Y precisamente, los “errores” individuales que citas no son tal cosa: son presiones sociales. A mí me han gritado para que sea funcionaria, me han gritado para que acabe lo que empiezo, me han gritado para estudiar cerca, me han hecho pensar en status y en dinero, me han machacado cuando he tenido sueños porque debo resignarme, etc y etc. Luchar contra todas esas “imposiciones” me ha llevado a pelearme con mucha gente, o me lo han tirado en cara en entrevistas de trabajo (no les gusta que no acabes lo que empiezas) y me ha llevado al psicólogo. Pretender salirte de la senda también te puede complicar, y mucho, la vida. Así que, por favor, DEJAD DE CULPAR A UN PUTO SER HUMANO DE COSAS DE LAS QUE NO TIENE NINGUNA CULPA. SI ESTO ES AUTOAYUDA, CONSIGUE PRECISAMENTE LO CONTRARIO: HUNDIR. Lo que estás describiendo son IMPOSICIONES SOCIALES y lo estás tergiversando para echarle la culpa AL INDIVIDUO. ASÍ QUE MUCHO OJO LOS QUE LEÁIS ESTAS COSAS, QUE NO OS COMAN EL COCO. DEBERÍA ESTAR PROHIBIDO ALGO ASÍ.
Y voy a decir más: acaso, sugieres que la gente no piense en dinero? Cómo te vas a pagar la casa y tu manutención? Ahora nos vamos a poner a pensar todos en imposibles? No crees que eso es cagarla? O qué pasa, no elegiremos por proximidad, y entonces nos vamos a estudiar fuera con el dinero que conlleva? Y vamos a decir “es que no quiero ser como el rebaño”. También sugieres dejar algo empezado por nada, porque no estamos seguros… O sugieres que no pensemos en ser funcionarios cuando el mundo privado está como está… o como si fuera algo indigno…es que yo qué sé. Todo esto no son más que LUGARES COMUNES para dar una visión simplista de algo que es mucho más complejo. Yo vengo aquí con el Santo Grial y te digo todo lo que no tienes que hacer. Como si hacer lo contrario sirviera de algo. POR SUPUESTO hay gente que no quiere ser funcionaria, que no estudia algo por estatus, que se va lejos a estudiar y etc. Y LES VA MEJOR? QUÉ TIENE QUE VER LA GIMNASIA CON LA MAGNESIA? Yo no elegí carreras por colegas, por ejemplo, e igual si lo hubiera hecho me hubiera ido mejor. O si hubiera preparado una oposición mucho antes. Total, para acabar ahí mismo. O si hubiera pensado en status antes que en chorradas. Porque las cosas boniquíssimas que (se supone) cambian el mundo y son maravillosas pues no lo son tanto. Mira, al final concluyo que es una MIERDA DE ARTÍCULO LLENO DE CHORRADAS.
Me has hecho sentirme menos mal, y tienes en parte razón. Gracias.
Hola,
Leí esta entrada cuando tenía 20 años. Ahora, con 27, paso a contar un poco mi experiencia:
Nunca he sido buen estudiante. Repetí 6º de Primaria y, posteriormente, 4º de ESO (de hecho la ESO la fui salvando a base de quedarme sin veranos y aprobar en Septiembre unas cuantas). En gran medida, el hecho de repetir 4º se debió a la repentina iluminación de escoger la opción más complicada (el 4º científico), siendo que era bastante desastroso en ciencias. Pero me entró el arrebato de la autosuperación, de llegar a algo importante (Ingeniería Informática), y, claro, el tortazo fue espectacular. A pesar de ello, no hay mal que por bien no venga: se me fue el romanticismo a tomar por saco, a la par que descarté de pleno el siquiera intentar Bachillerato (no podía permitirme repetir más veces, a la par que lo veía un título bastante inútil más allá de servir de acceso a).
Gracias en gran medida a la optativa de Informática de 4º, me di cuenta que me gustaba bastante la edición en general y la gráfica en particular. Tuve la suerte de que en el propio centro impartían el Grado Medio de Preimpresión, así que me metí de cabeza. Es una experiencia muy tranquilizadora el encontrar algo que te gusta, que no es muy difícil y que tiene ciertas expectativas laborales. Hasta entonces, mi experiencia con el sistema educativo había sido absolutamente kafkiana. No me gustaba el sistema, ni los profesores, ni las materias. Todo me parecía absurdo. La subjetividad, la creatividad del alumno completamente cercenada en pos de un absurdo memorizar una interminable sarta de inutilidades varias, en pos de una decisión que no se ha tomado aún (y descartando casi por completo a la gente que es afín a la FP, para los que el 80% del contenido de la ESO sirve entre poco y nada, como fue mi caso). No me enseñaron nada las asignaturas humanísticas a expresarme, sino el hecho de leer asiduamente desde muy pequeño. Y, en cuanto a las ciencias, no aplico absolutamente nada de lo que me obligaron a aprobar (y ya en aquella época era perfectamente consciente del absurdo tremendo).
En el GM, por fin, todo tenía sentido. Por fin me enseñaban cosas que tenían sentido, que eran útiles de verdad. Es una sensación acogedora el estudiar algo que te gusta, que no sea difícil y, que además, tenga aceptables expectativas laborales (sin tampoco tirar cohetes ni mucho menos claro).
Sin embargo, ya en ese punto sentí que mi evidente afinidad hacia lo humanístico comenzó a tirar de mí. Además, en un primer momento, me acomplejaba que la mayor parte de mi generación estuviera iniciando sus carreras, tan “elevadas”, y yo estuviera en un GM con elevada presencia de fuma porros sin dos dedos de frente (ojo, los GM me parecen perfectamente dignos, pero es cierto que puede entrar bastante gente que…). Yo, entre Photoshop, Illustrator e Indesign, iba leyendo con voracidad a Nietszche, y la idea de estudiar Filosofía se asentó en mi cabeza como evidente. Sin embargo, al comentárselo de pasada a mi tutor, recuerdo que me miró y me dijo “¿Para qué?”, en una clara alusión a que eso podía tenerlo como hobby. En realidad, en mi cabeza era una idea obvia, a la par que abstracta. Me decía a mí mismo que trabajaría de profesor de instituto, y me persuadía. Era lo suficientemente inteligente para entender perfectamente el Zaratustra de Nietzsche, y lo suficientemente tonto como para creer que era accesible ejercer con Filosofía.
Tras aprobar el GM, aprobé en septiembre la prueba de acceso al GS. Dudé en si meterme en un GS de web, para complementar el GM de Artes Gráficas, pero finalmente me decidí por el equivalente de la misma rama en Superior: Diseño Gráfico y Producción Editorial. En el GS, gracias a Dios, la gente estaba más entrada. Sin embargo, y a pesar de empezar con muchas ganas, se me fue tornando rápidamente en insufrible. Tenía una parte de GM (que yo ya manejaba perfectamente) y una gran dosis de teoría (mucha paja, incluso en GS). Durante el GS, fui descartando, progresivamente, la idea de estudiar Filosofía al terminar. Intenté convencerme a mí mismo mirando los pocos dobles grados que había: “Filosofía + Derecho” (era ver las asignaturas de Derecho por ahí mezcladas y me daban náuseas), y, mucho más apetecible: “Filosofía + Periodismo”. A pesar de que esta última encajaba perfectamente con mi perfil, lo descarté porque era una universidad en Navarra (yo soy de Madrid) que, para colmo, era privada (vamos, imposible). No solo eso, sino que son dos carreras sin prácticamente salidas (enchufes aparte, por supuesto).
Así pues, sopesé la idea de estudiar Filología Hispánica (había más posibilidades de ser profesor de lengua que de filosofía) o Filología Inglesa (si fracasas por lo menos subes inglés). Pero las salidas seguían siendo muy escasas y, además, no me motivaban ni la mitad que Filosofía.
Ya terminando el GS, no se me olvidará que, parcialmente decepcionado y hastiado de lo que había estudiado –aunque, repito, empecé muy motivado tanto el GM como el GS, y me gustó mucho aprender el uso de los programas–, una noche, tuve una pesadilla como no la recuerdo. No fue nada, a priori, aparentemente espantoso. Estaba yo solo, en la Facultad de Filología, y las columnas y techos del edificio se empezaron a hacer enormes sobre mí, hasta que, en mitad de una terrible angustia, me desperté de golpe en mitad de la madrugada. Estuve un buen rato andando por la casa en silencio, presa de un ataque de ansiedad. Me había dado cuenta de que lo que había estudiado, sin disgustarme, tampoco me entusiasmaba, y que en aquello que podría destacar (Filosofía, Literatura, Periodismo), no había trabajo (consultaba minuciosamente en foros y artículos: desolador). Entré en un bucle sin salida entre la opción razonable (que observaba mediocre, desperdiciarme, por decirlo así) y la opción “vocacional” (que observaba suicida). Al llegar las vacaciones llegué a valorar Magisterio, con esa pulsión latente de aumentar las posibilidades de dedicarme a la docencia (aunque Magisterio, bastante suicidio también…).
Por suerte –roza el milagro, a decir verdad–, a mitad de verano encontré trabajo de lo que había estudiado. El sueldo no estaba mal, y la empresa era sólida, con unos 80 trabajadores en departamentos que englobaban diversos aspectos de la comunicación y el marketing. La gente resultó ser muy maja, por lo que, tras mi larga introversión inicial, logré poco a poco ir hablando y llevándome bien con todo el que tenía trato laboral directo (que eran unos cuantos). Esto resultó un hecho insólito, porque en el colegio y la FP no hablaba apenas. Se me da mal vender (y, por tanto, venderme). Pero en el trabajo, muy a diferencia de en lo académico, he sido muy responsable, minucioso y entregado. Durante los dos primeros años la ansiedad desapareció: el querer sobrevivir en el trabajo, y el trabajo en sí (trabajar a destajo, los meses pasan volando ahí), se me quitó la “tontería”, y yo había sufrido tanto que tampoco quería pensar en ello.
Sin embargo, a pesar de todas las características favorables comentadas, me di cuenta que la exigencia del trabajo era tal que la gente caía como moscas. La mitad, despedida, y, la otra mitad, salían corriendo de ahí al año por lo general. Contagiado por ese desaliento general, llegué a la conclusión de que, a pesar de sus innegables ventajas, se trataba de un trabajo bastante esclavo, en el que había picos de hasta 80 horas extra mensuales (en dicha ocasión llegué a trabajar jornadas de hasta 24 horas seguidas, sin apenas parar para comer). Como mi papel en el equipo se había tornado rápidamente en relevante, dado mi cuidado y abnegación horaria, subí a Recursos Humanos para pedir un aumento. “Si me lo niegan, tendré la excusa perfecta para irme”, pensé, un tanto tranquilizado. Pero no, me subieron 4000€ brutos anuales. Si bien me pareció de justicia (aunque el trabajo sigue sin “estar pagado”), quedé un tanto chafado en el fondo: me habían arrebatado el clavo al que me agarraba.
Me decía que dejaría ese trabajo a los 2-3 años. Llevo 5, y aquí sigo. He tenido en mi equipo unos 6 universitarios a lo largo del tiempo, y casi todos han sido trabajadores bien mediocres, bien directamente malos (lo cual siempre me ha resultado muy curioso, da la impresión de que hay gente que sirve para estudiar pero no para trabajar). Al mismo tiempo, gano lo mismo o más que bastante gente con carrera + máster (si bien, repito, es un sueldo bastante normalito, pero la cosa está como está).
Al llegar la cuarentena, me he salvado donde muchos otros han caído, precisamente gracias a la naturaleza de mi trabajo. Sin embargo, las 2 primeras semanas tuve grandes dudas existenciales y ansiedad. Me doy cuenta que, con mis 27 años, estoy al límite de poder cambiar de sector. Puedo ser torpe en muchas cosas, pero estoy convencido que podría haber sido un buen teórico, un buen articulista. Mucha gente a mi alrededor insiste a lo largo de los años que yo “valgo mucho más” (hay personas que piensan que directamente estoy tirando mi vida, desperdiciando completamente mi potencial), y yo mismo soy consciente de que podría haber aspirado a algo bastante interesante.
Me encanta la Gestalt, y por eso valoré la posibilidad de estudiar Psicología. Sin embargo, nuevamente, al investigar, constaté una y otra vez el panorama desolador, en boca de la practica totalidad de las opiniones. O te la juegas a las opositoloterías, o tienes enchufe (no es el caso en absoluto), o tus padres son ricos y te plantan una clínica para poder empezar (luego ya se verá si eres bueno o si la hundes en un par de meses), o eres 1º de tu promoción (seamos realistas…). Poco más. Tienes Recursos Inhumanos, que proyecta mayores expectativas, pero no me interesa para nada. Así pues, nuevamente, me hallo contra la espada y la pared, en este eterno dilema vocacional-existencial VS mundo real. No me veo trabajando toda la vida en esto. De hecho empiezo a estar ya quemadillo, y además me siento objetivamente justificado (muchas personas han pasado por aquí, y yo soy una rarísima excepción de “mantener la posición” durante tantos años). Pero, ¿qué hacer? Estudiar variantes (web, diseño, 3D, etc) no me llama la atención. No solo eso, sino que las ofertas del sector piden ya que lo sepas hacer todo (que sepas hacer el equivalente a 3 Grados Superiores, por el precio de 1), y los salarios son con frecuencia iguales o inferiores al que ya tengo (limitándome a conocimientos de 1 GS + trato con cliente y gestión del equipo). Es un absurdo lo mires como lo mires. Me siento como en una sartén suspendida a 30 metros de altura (altitud que va ascendiendo según cumplo años). Si me quedo, me quemo, y, si salto, me (muy probablemente) suicido.
La realidad es bastante triste. O estudias carreras estilo Medicina, Ingeniería, Bioquímica, Física, Química, Matemáticas, etc, o a jugar a la ruleta rusa el resto de tu vida. Cuando tu talento natural (por decirlo así) no encaja en dichos ámbitos, date por jodido. Estudiarás para arrepentirte de haber “perdido” el tiempo, o, como es mi caso, tendrás la perspicacia de seguir una ruta alternativa más razonable, para terminar teniendo clavada la espina de no haber luchado por lo que realmente te hubiera realizado como profesional y, en importante medida y en consecuencia, como persona. Hay gente en los comentarios de arriba que han estado dando tumbos de aquí y allá sin concretar demasiado en lo laboral. Yo, en cambio, he dado en la diana como una flecha y, sin embargo, y a pesar de no sentirme desgraciado por tener un trabajo estable y donde he hecho bastantes colegas, me siento vacío, a la deriva. Si se perdiera el cliente, si la empresa cerrara, yo no sería nadie. Porque, como no me apasiona lo que hago, no tengo ningún interés en actualizarme, estudiar cursos (por otra parte, apenas tengo tiempo), moverme, etc. Mi energía se consume en el trabajo y, aunque la tuviera, carecería de motivación. Veo el ostión asegurado, antes o después, pero, al mismo tiempo, me hallo en una parálisis constante, en un punto muerto. Es una partida que siempre queda en tablas. Lo he analizado de mil formas diferentes, y no encuentro respuesta. Tengo básicamente 3 opciones:
1. Seguir como estoy, y entregarme por tanto a quemarme y a la providencia en el largo plazo.
2. Estudiar cursos para ampliar mis capacidades profesionales (a pesar de que eso no mejoraría mi sueldo), y buscar alternativas en otras empresas.
3. Tirarme a la piscina y estudiar algo humanístico, a pesar de las casi nulas posibilidades de encontrar trabajo de ello.
¿Lo más razonable? La segunda opción, por supuesto. El problema es que, aunque no lleve toda una vida trabajando, sé bien cómo funcionan las empresas a estas alturas ya. Amiguismos, lameculismos, hipocresía descarada y mandos que solo saben delegar (y llevarse los méritos cuando la cosa va bien, a la par que echan la culpa a los últimos monos cuando las cosas van mal). Convenios pasados por el forro, sueldos mediocres en el mejor de los casos, vivir para trabajar, etc.
También sé cómo funciona el mundo académico, ya lo he comentado anteriormente: un absurdo con paja por doquier, una metodología absolutamente ineficaz y unos profesores que se otorgan mucha dignidad personal (finísima la piel) pero luego la culpa de todo es siempre del alumno (no de ellos, que cobran por ser bastante pánfilos en general).
En esta sociedad mecánica y estresada, las ciencias han adquirido una importancia enorme, en detrimento de las denostadas humanidades, al no ser “productivas” y, por tanto, no generar dinero que, como todo el mundo sabe, es lo único que importa. No me las quiero dar de adivino, pero me temo que todo se vaya a la mierda de aquí a unas décadas precisamente por eso, porque no hay base humanística alguna en la sociedad, salvo en aquellos casos en los que se usa la autodidáctica (como es mi caso) o se fue lo suficientemente ingenuo como para estudiar una carrera relacionada.
Así pues, he de depositar mis perspectivas realistas en el mundo técnico, que me chupa la sangre semana tras semana, a la par que me culpo por no tener valor suficiente como para arriesgarme a luchar por lo que me gusta, culpabilidad que se mezcla con la frustración de los datos realistas del mundo laboral: angustioso cóctel.
Ciertamente, vivimos en una sociedad que vive subyugada por eslóganes del tipo “Si tú quieres, puedes” o “Nada es imposible” o “¿Cuál es tu excusa?”, que tanto les gusta a los coach (muchos de ellos –que no todos– meros charlatanes con una retórica muy engaña chavales, por cierto). Pero se pasan bastante por el arco del triunfo a Ortega, y, he de decir, que a mí me parece infinitamente más justo su yo soy yo y mi circunstancia y si no la salvo a ella no me salvo yo. Esos eslóganes “motivadores” no son más que perfumes para disimular el tufo de sistema y sociedad que hemos generado entre todos. Y casi todo el mundo lo sabe en el fondo, pero ahí seguimos, tragando.
En fin, palabras, palabras, palabras. Puedo mantener mi status quo o jugármela. Me da toda la impresión de que, haga lo que haga, me arrepentiré (y si no es antes, será después). Mis talentos son los que son, y el mercado es el que es. En fin.
Saludos,
Gracias, Alejandro, por contar tu experiencia de forma tan detallada.
Esa frase que suelo decir, “trabaja en lo que puedas pero persigue lo que quieres, aunque sea un minuto al día”, ¿crees que tiene sentido?
A veces, la elección de la carrera profesional no es tanto una cuestión de intereses como de paciencia y planificación.
Hola Alfonso,
Esa frase me parece, en efecto, perfectamente lícita y razonable. A veces me encuentro por ahí charlas motivadoras que, aunque pretenden incitar un impulso, un “empoderamiento” en el oyente, analizadas con la objetividad en mano, pueden quedarse fácilmente en meros fuegos artificiales. La motivación es buena, pero también conocer la realidad, y está claro que no es lo mismo querer trabajar de Ingeniero Industrial (+ máster elegido cuidadosamente) que de astronauta (un ejemplo extremo, pero se entiende lo que quiero decir), por mucho que el segundo tenga una vocación y motivación estratosféricas. No sólo eso, sino que el capital de los padres y los contactos que se tengan, pueden ser muy decisivos también. El esfuerzo y planificación son fundamentales, sí, pero también la demanda laboral de tu objetivo vocacional, tu circunstancia (y la de tu familia), capital, etc.
El otro día compré unos cuantos libros de autoayuda (incluido tu libro, por cierto), para irles echando un vistazo ahora que el claustro me está otorgando un poco más de paz y tiempo libre. Creo que mi principal problema puede describirse con aquello que le dice Porfiri Petrovich a Raskolnikov en cierta conversación de “Crimen y castigo”: «Me hago cargo de lo que debe experimentar una persona desgraciada, orgullosa, altiva y poco paciente, sobre todo poco paciente, al verse sometida a una prueba semejante.» En el libro “Tus zonas erróneas”, el autor dice que: «El objetivo es ayudarte a comprender por qué estás atrapado en esta zona de autoderrota. (…) Los tipos de comportamiento a los que nos referimos son actos cotidianos que pueden parecer perfectamente aceptables pero que en realidad son perjudiciales para la propia felicidad. (…) Esto implica observar seriamente y con atención el sistema de apoyo psicológico que te has construido para mantener este comportamiento de autofrustración, en vez de abandonarlo. (…) “¿Qué saco yo con este comportamiento” y “¿Por qué persisto si me perjudica?”». Creo que aquí hay muchísima reflexión pendiente. De hecho, creo que es el quid de la cuestión. En este sentido, creo que la herramienta del Eneagrama puede ser extremadamente útil también. En mi caso, como E5, vivo en una permanente “parálisis por análisis”, bloqueo (estrategia del ego) que adormece/suprime el que pase a la acción. Lo que sucede es que todo esto puede entenderse, admitirse y, por supuesto, es muy fácil de exponer. Pero aplicar soluciones personales, no es tan fácil. Incluso cuando puede parecerlo, no lo es tanto.
«A veces, la elección de la carrera profesional no es tanto una cuestión de intereses como de paciencia y planificación.»: no te niego que tampoco me he matado a buscar posibilidades día y noche, aunque sí me he metido, a lo largo del tiempo, largas sesiones de búsqueda de información (incluyendo ofertas académicas oficiales), opiniones, así como reflexión personal, y no termino de ver salida práctica real a mis inclinaciones vocacionales, a mis aptitudes naturales (por decirlo así). La única respuesta más o menos clara habría sido ser periodista, aunque, incluso en esa respuesta, ya se sabe… (precisamente, en esta misma entrada adjuntas un vídeo parodiando el tema…, y no sin razón). Y que hay muchas veces que no sé si soy perspicaz o presuntuoso, y en realidad haya gente como yo a patadas, currículum trémulo en mano (acaso la línea pueda ser bastante fina), y lo que distinga a los que consiguen lo que quieren de los que no sea una mezcla de perseverancia/superación personal y un no menos importante “estar en el sitio adecuado, en el momento adecuado”, para lo cual, con frecuencia, necesitas también la llave del “contacto/guía adecuado” (con esto no me refiero a enchufe necesariamente).
Por lo demás, muchas gracias por esta entrada, tan representativa. Hemos sido criados de forma muy paternalista en general, y tenemos tan metido en la psique que es de justicia que la satisfacción vuele, dócil, a nuestros anhelos, que resulta verdaderamente traumático, en no pocos casos, darse de bruces con la realidad. Resistirte a la misma sin una estrategia válida terminará por troncharte, y aceptarla desde el rencor (es decir: resignarte) terminará sacando lo peor de ti. Por eso quizás lo mejor sea bien mirar arriba con estrategia, y tratar de alcanzar el objetivo; bien mirar hacia abajo y dar gracias a la vida por lo que se tiene (el agradecimiento y la humildad erradican el rencor y el autoveneno en general).
«Pero divago demasiado. Y como divago, no hago nada. Verdad es que también podría decir: divago porque no hago nada. Hace más de un mes que he tomado la costumbre de divagar tumbado días enteros en un rincón, llena la cabeza de tonterías» (Crimen y castigo).
Un saludo,
La vocación no se espera, la vocación se construye. Nos puede interesar casi todo si le damos una oportunidad pero es un error intentar encontrar el sentido de la vida en un trabajo.
No hay que resignarse a un empleo no motivador pero tampoco es buena idea idealizar las alternativas.
Comparar continuamente lo que hacemos con lo que supuestamente “deberíamos estar haciendo”, genera frustración y autoengaño.
Soñar con lo improbable nos impide disfrutar de lo cierto.
Hola Alfonso,
Muchas gracias por tu respuesta. Me parece un enfoque muy sensato, práctico y realista. A mí esto es lo que me sirve, la verdad.
Ciertamente es mejor construir con ladrillos que con nubes…
Saludos,
Hola Alfonso, ¿qué tal vas?
He vuelto a esta entrada, tras ser despedido en abril de este año.
Tras releer algunas aportaciones de otros, así como las mías, quería ponerme en contacto contigo por si pudieras borrar mis comentarios en esta entrada a lo largo de los años (aparte del presente):
Alex 31 agosto 2014 a las 14:21
Alex 5 diciembre 2013 a las 22:19
Alejandro 13 junio 2020 a las 06:20
Alejandro 15 junio 2020 a las 05:36
Alejandro 21 junio 2020 a las 05:54
Alejandro 15 noviembre 2020 a las 08:47
Alejandro 15 noviembre 2020 a las 09:06
Fundamentalmente es a causa de algunas imprecisiones y, sobre todo, el tono o alguna palabra existente en ellos, no acordes a mis convicciones actuales.
Si consigo dar una vuelta a mi vida, quizás en un futuro escriba una entrada unificando de forma más coherente y vertebrada mi experiencia laboral/vocacional.
Un saludo y gracias de antemano.
Alejandro muy buenas noches, leí tu publicación muy atentamente y no pude evitar notar tu capacidad de escritura y y autoanálisis. Soy un argentino de 32 años que migro este año ( si , el peor año posible) aquí a tu pais. Vengo de 2 carreras sin terminar ( arquitectura 4 años y economía 3 años) y con un trabajo en mi pais que nunca me lleno. Me senti bastante identificado con lo que publicaste y quería decirte simplemente que si sabes realmente en que podes llegar a ser bueno y que te motivaría a levantarte cada mañana, lo hagas sin mirar atras.
Estoy atravesando un proceso similar y en búsqueda de “eso” que me haga sentir realizado en el día a día, como decimos en mi pais ” que no decaiga” y a meterle a la vida que puede no ser perfecta, pero es una sola y vale la pena explorarla.
Hola Gastón,
Me alegra que el comentario te haya servido de algo.
La verdad es que al final hay que poner en la balanza una serie de factores, y es eso lo que hace que la cosa resulte tan compleja. A veces nos centramos mucho en el “qué” hacemos, sin tener en suficiente consideración el con “quién”, “dónde”, “cómo”, etc. Creo que se puede estar en un trabajo que, a priori, sea tu vocación y, no obstante, que un combo de “jefe”, “sueldo”, “compañeros”, “horario”, “inestabilidad”, “metodología”, te terminen amargando la vida tanto o más que no estar haciendo un trabajo que te resulte vocacional. Así pues, tanto se angustia uno que gana 800€ porque es muy poco como uno que gana 2500€ y vive inmerso en una competitividad enorme, unas expectativas implacables, un jefe psicótico, unos compañeros de trabajo con el puñal afilado, etc. Al final, hay que hacer balanza, de estas y otras cosas, y de ahí sacar las conclusiones pertinentes, con la mayor objetividad posible.
En mi caso, siempre he odiado madrugar. Se dirá que todo el mundo, ciertamente, detesta madrugar, pero el caso es que la gente se levanta y llega incluso con antelación a los sitios. En mi caso, un sueño profundísimo y una falta de motivación me retienen en la cama de forma penosa a veces, ya desde niño. Pues bien, tengo la enorme suerte de estar en turno de tarde. Esto, además, me ahorra la hora de la comida (lo que no quita que cene en la oficina, en 20 minutos, delante del monitor), lo que hace que pase menos tiempo en la oficina. No sólo eso, sino que llego enseguida a la oficina, al vivir relativamente cerca y no haber tráfico alguno a esas horas, tanto al ir como al volver. Bueno, y ahora, con lo del coronavirus, llevo bastantes meses trabajando desde casa, así que la comodidad es total en ese sentido.
Pero lo más importante, en mi opinión, es el ambiente, los compañeros. Y en esto, quitando alguna excepción, llevo 5 años contento. Ciertamente, la compañera con la que mejor me llevo (ella hace 4 años que está en la empresa, año y medio menos que yo), amaga regularmente con irse, que está harta, que quiere algo mejor, etc (el tema del coronavirus es lo único que la ha apaciguado un poco en ese sentido, pero aún así me lo sigue comentando). Si ella se fuera, perdería una motivación a tener en cuenta. Por supuesto que es mejor estar en un sitio por ti mismo y no por los demás (de ahí la relevancia de la vocación), pero no se puede ignorar que el contexto es también muy importante.
Por cuestiones como estas –aparte por supuesto del coronavirus y la decadente situación laboral–, me mantengo en el puesto. Cierto que hay momentos en los que me siento abatido, desesperanzado, vacío e, incluso, quemado. Pero trato de contextualizar y de valorar lo que tengo, no ya a nivel laboral, sino vital en general (familia, amigos, etc). Por otra parte, le debo muchas cosas a este trabajo. Si miro mis contactos en el móvil, la practica totalidad han venido del trabajo.
Como decía Alfonso arriba: «No hay que resignarse a un empleo no motivador pero tampoco es buena idea idealizar las alternativas.» Creo que es una reflexión que debe ser tenida muy en consideración. A veces tratamos de justificar nuestra insatisfacción presente en una supuesta satisfacción futura, y resulta que, cuando llegamos a alcanzar dicha satisfacción, resulta no corresponder a nuestras expectativas, de una u otra forma, y fijamos una nueva expectativa (“Esta sí, esta es la buena, ya verás”), con la que probablemente ocurra lo mismo. Al final es un poco como el asno que sigue eternamente a la zanahoria. Pero por supuesto esto tampoco implica conformarse con un empleo con unas condiciones denigrantes o que nos esté amargando, literalmente, la vida. Pero fíjate que en mi trabajo “no vocacional”, he sacado bastantes cosas positivas, y he aprendido, creo, a ser más maduro y mejorar mis relaciones sociales.
Finalmente, y a pesar de ser un creyente ciertamente mediocre (de hecho hasta hace relativamente poco era agnóstico), sí poseo ciertas convicciones religiosas. Creo, al igual que Dostoievski en su relato “El sueño de un hombre ridículo”, que todo se solucionaría con “Amaros los unos a los otros como yo os he amado”. Al final, más allá del trabajo y los resultados sociales, creo que es esencial mejorar como personas. Es esta una sociedad en la que vales lo que consigues, lo que haces, lo que produces, etc. Esto es porque se le llama a lo bueno, malo, y a lo malo, bueno. Celebro que a Jesús –y, por ende, a Dios conforme el cristianismo– le dé absolutamente igual lo exitoso que seas. “Bienaventurados los pobres de espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos”, se nos dice. Alejándonos de lo que el mundo nos sugiere y tienta, probablemente verifiquemos que lo más importante es ser, pese a los innegables e inevitables defectos, buenas personas. No sólo eso, sino que termina siendo la clave de la felicidad de uno y, en cierta medida, de los que te rodean. Desde una cosmovisión religiosa –y, repito: yo soy muy mediocre en este sentido–, el tema de “ser o no ser” en base a las expectativas del mundo, o personales pero meramente laborales, deja de tener una importancia tan atroz, y se atenúa esa sensación de tener constantemente una fría espada contra el cuello. Esta vida solo es un parpadeo, “es sueño”, que decía Calderón. Recuerdo, al visitar un osario en Palermo, la impresión que me causó tener enfrente a decenas de cadáveres (todavía con sus ropas), de hombres, mujeres, niños, e incluso algún bebé; no todos eran esqueletos, había también algún difunto momificado. Apenas alargando el brazo, podría haberlos tocado. Tome conciencia plenamente de estar mirándome en un espejo. Toda una vida de frustración, conflictos, de intentar ser especiales, y la verdad es que todos somos el mismo esqueleto. Un abrir y cerrar de ojos, y se acabó. En este sentido creo que no hay frase que lo exprese mejor que la que se lee en el osario de Wamba: “Como te ves, yo me vi, como me ves te verás. Todo acaba en esto aquí. Piénsalo y no pecarás”. Ciertamente, creo que los monjes (sean de la religión que sean), toman un camino de sabiduría excepcional. Se desprenden de todas esas sonrientes cadenas que nos ponemos. Ahora, yo mismamente, estoy rodeado de objetos que he ido adquiriendo con mi salario –el salario no es otra cosa que vida, pues el dinero es a cambio de horas de vida–, que me hacen sentir mejor equipado, más seguro, y, en el fondo, no dejan de ser pequeñas cadenas que, en su conjunto, te retienen y limitan.
Pero bueno, dicho todo esto, sí que me planteo, efectivamente, mi vocación, mi sentido de ser en este mundo. Todo se verá. Por ahora, aquí sigo, en este trabajo que nunca sé a ciencia cierta si dejar o no, aunque, como decía, este contexto adverso –que viene a sumarse a una no precisamente rimbombante situación laboral desde la crisis del 2008–, me tranquiliza hasta cierto punto en el sentido de que tampoco puedo quejarme, dado el percal. Pero, pensándolo fríamente y en la línea que venía hablando, al final me doy cuenta que la pulsión más profunda del ser humano, por tópico e ingenuo que pueda parecer, es amar y ser amado, y que eso no depende del tema laboral ni académico (y, si depende, es que probablemente no hablemos de amor). A veces pienso que podría trabajar, yo qué sé, plantando tomates –no digo que sea un trabajo indigno, solo que no es lo que encaja con “mi potencial”, precisamente– si estoy rodeado de gente que me quiera de verdad, si en casa esperara el amor.
Por lo demás, y a pesar de que la situación es la que es, te deseo mucha suerte en España. Ojalá te lleves cosas positivas de esta experiencia. Y bueno, entretanto, a reflexionar, aprender, y seguir desentrañando esa tarea, cotidiana a la par que magna, de encontrar el sentido de nuestra existencia, y el camino a la felicidad (que a veces se encuentra donde menos esperábamos, en cosas pequeñas y no grandes).
Un saludo.
No se cómo llegué a este blog pero puedo decir que me ha ayudado a igual no sentirme tan perdida y pueda descragar lo que sienta en estos momentos.
He sido una chica de excelencia desde chica gracias a mi mamá, que siempre estuvo para ayudarme y motivarme.
Al pasar al bachillerato tuve la elección de competir por una universidad privada también de las mejores en México con beca (debía estar en la misma escuela) o irme al bachillerato de la mejor universidad de México (público)
Escogí la segunda ya que siempre me han preocupado mis papás en el tema económico, además de que para cambiar de ambiente que también en ese momento creí que lo necesitaba.
Desde el principio sabía que no me habia gustado y extrañaba mi antigua escuela pero ya no podía hacer nada, ya estaba ahí.
Además me había costado mucho trabajo estar ahí ya que era por examen.
Pasó el tiempo y me fui acostumbrando al grado de conocer a grandes amigos y ahora sí que vivir la etapa de preparatoria.
Pero me fui perdiendo en cuanto a estudios, ya no era la misma niña de excelencia que había sido por casi 15 años.
Después encontré a un maestro que gracias a sus clases, note mi apasionado interés por la Medicina.
Sus clases me encantaban e incluso al siguiente año solo escogí un grupo que no me gustaba por el simple hecho de seguir aprendiendo.
Mis opciones que tenía iban enfocadas al Área 2 (Ciencias de la salud)
Tenía Química, Medicina y Nutrición.
Al final lamentablemente mi escuela entro en un paro estudiantil por casi 4 meses y después llegó la cuarentena.
Al momento de escoger carrera decidí tomarlo todo un mes antes.
Analice todo, y sabía que de nutrióloga por más que me.gustara, al menos acá en México, no puedes vivir de ello.
Después analice Química y realmente no se cómo también estaba en mis opciones, si no era buena y no soportaba estar más de dos horas en ello, pero tal vez fue por influencia de mi mamá.
Al final tenía ya solo Medicina y Negocios internacionales.
¿Cómo surgió Negocios?
Un chico me contó de ella como dos meses antes, me gustan actualmente los idiomas ya que en la prepa tuve la oportunidad de ver francés y seguir con el inglés, y es una carrera que te permite viajar.
Laboralmente suena también atractiva y la escogí.
Pero…después de meterla pase una etapa de depresión muy profunda.
Medicina realmente me brillaban los ojos al hablar de ella y conocer más pero mis papás, mi hermana e incluso algunos amigos me decían que no me veían en ella.
Que no era lo suficientemente capaz de estar ahí.
Empecé a creerme eso, además de que al menos acá en México igual es muy mal pagada y con malos tratos, a menos que tengas una especialidad y ahí ya ganas bien pero es hacer tu vida hasta tener 30 años.
No había pensado en eso realmente ya que solo pensaba escogerla por gusto.
¿Realmente hubiera tenido la vocación de ser doctora?
Actualmente me encuentro tratando de estudiar para el examen de Negocios pero me cuesta trabajo, no me apasiona tanto como Medicina.
Solo que nadie me ve ahí, mi trabajo no valdría hasta tener 30 años y me dio miedo intentarlo.
Por otra parte, la escuela en que estoy entro en muchos problemas y desde mi punto de vista queda lejos de ser la máxima casa de estudios de México.
Me arrepentí bastante en la decisión de mi bachillerato ya que veo a mis amigos y me gustaría poder aspirar a una beca y no haber estado en paro tanto tiempo.
Me siento arrepentida y mal.
¿Cómo te dejas de justificar por decisiones pasadas?
¿Y, negocios será lo mío?
Aún estás a buen tiempo de estudiar lo que te gusta y hay otras opciones en Medicina, Biología, Química o Biomedicina que es la investigación, puedes obtener becas del Conacyt estudiando postgrados y viajar al extranjero a estudiar algunos de ellos. Pero infórmate bien.
Increíble, aunque para los que hemos cometido todos los errores y no vemos salida, como yo, me parece que me da más fuerte en la herida.
Yo cometí el error de estudiar algo simplemente porque me gustaba. En aquel entonces pensé “me haré un master después y algo saldrá”, pero claro, super desinformada… Luego sucedieron esas cosas de la vida que no se pueden controlar y acabé mudándome a otra ciudad, con otro idioma y donde un máster me cuesta más que mi vida, y todo quedó en nada.
Ahora he hecho dos cursos de estos del gobierno, que supuestamente te ayudan con un poco de inserción laboral. Trabajos que no solo creo que no me gustarán, sino que además me dan miedo, y de todos modos, ¿para qué? Si los trabajos apenas duran ya nada… Yo quiero una estabilidad, y solo me doy contra paredes.
Me siento decepcionada, y fracasada, por haber dedicado tanto tiempo a esforzarme y estudiar y al final ser otra más que debe trabajar de lo que haya -ojo, que no me parece ni mucho menos deshonroso, simplemente elegí esforzarme para no tener que tomar ese camino, y aquí estoy-. Y ahora lucho contra la ansiedad de un futuro incierto con unos dones que apenas puedo explotar porque no me darán para vivir, buscando trabajo de lo que haya aunque no se ajuste para nada a mí y me haga infeliz, sin experiencia, sin historia laboral previa, en medio de una pandemia, con unos estudios en la espalda que no son más que un lastre y la cantinela de que empiezo tarde a trabajar, porque a mi edad ya debería estar cotizando.
Si alguien ha trabajado de lo que no le gustaba y ha conseguido ser feliz pese a todo, me encantaría oír su testimonio, porque no consigo ver la luz al final del túnel.
Hola Algam,
Si no es mucha indiscreción, ¿podrías decir qué estudiaste y tu edad actual? La verdad es que me entra curiosidad, leyendo ahora tu experiencia.
Más allá de eso, te diría que los errores –si es que realmente lo fueron, pues a veces nos confundimos nosotros mismos y/o nos confunden los demás– son extremadamente útiles para aprender, por mucho que, en primera instancia, te hagan sentir como una mierda (y, ciertamente, lo hacen, los muy ****). La frase «Lo intentaste. Fracasaste. Da igual. Prueba otra vez. Fracasa otra vez. Fracasa mejor.», expresa esto bastante bien. A veces no encontramos sentido a las cosas, pero hay algunas circunstancias en las que terminamos hallando, con el tiempo, algún tesoro en donde sólo había, aparentemente, basura y más basura.
Saludos,
No te frustres. Yo, después de más de diez años sin estudiar (alternando trabajos que tenían que ver con mis estudios previos con otros que no) decidí estudiar una carrera que era sólo porque me gustaba y así buscar algún trabajo relacionado con mis estudios previos en una nueva ciudad. Ha resultado un fracaso en ambas expectativas. Hay cosas de la carrera que me gustan, pero otras las odio. Era mejor comprar libros como aficionado de las facetas que me gustan y seguir con los antiguos trabajos y tener una vida más relajada. Lo que me frustra como a ti es que con mi edad ya debería estar cotizando algo más, hasta ahora nunca coticé más de media jornada y si sigo estudiando sin compaginar con algo, que no parece, pues tiempo que sigue pasando sin cotizar. Y te digo que el trabajo que realicé durante los últimos cinco años no me gustaba absolutamente nada, pero era feliz, estaba en un entorno familiar, tenía un salario asegurado y veía pasar el tiempo en vano. Decidí cambiar para explorar un mundo nuevo y mirar a ver si alcanzaba un trabajo de más horas, pero me veo peor. Y el tema de las carreras es complicado. Porque adquieres unos conocimientos, pero, como no la acabes no tienes el título. Y en cuatro años pueden pasar tantas cosas como que un familiar o uno mismo enferme, que te ofrezcan un trabajo etc que a lo mejor no la acabas. Y eso es tiempo perdido. Sin embargo, si cualquiera de esas cosas te pasan estando trabajando ya no es tiempo perdido porque has tenido una cotización que queda reflejada y si tuviste suerte hasta unos ahorros.
Quería decir que NO veía pasar mi tiempo en vano
¡Hola, Algam! Creo que estudiar algo simplemente porque te gustaba no fue un error, sino un gran acierto porque el mundo necesita gente que ame lo que hace y que disfrute del camino, de su carrera universitaria y de su trabajo.
No es simple idealismo, en mi caso ser realista y pensar en las salidas laborales sí que fue un gravísimo error y me trajo muchos problemas a todos los niveles. Ojalá yo hubiera estudiado lo que me gustaba desde un principio, pero con 18 años pensé más en las salidas laborales. Justo me pilló la crisis económica del 2008 que se alargó varios años y a pesar de estudiar algo que desde el minuto 1 sabía que no era para mí tuve que emigrar. La sensación de impotencia fue brutal.
No ha sido un camino de rosas. Después de dar muchos tumbos y de ahorrar unos años por fin conseguí estudiar lo que me apasiona desde niña. Sin embargo, la cosa se volvió a torcer al llegar la pandemia por diversos motivos. A día de hoy miro para atrás y me arrepiento mucho de no haber estudiado lo que quería desde el primer momento. Mi pasión y vocación me mantienen enfocada y me hacen ver los fracasos como aprendizajes. Además, en algún momento suele llegar la recompensa por todos los esfuerzos.
Como consejo, no descartes la opción de emigrar. Yo lo hice después de estudiar una carrera que no me gustaba, que supuestamente tenía salidas y con unas condiciones precarias y la experiencia no fue buena, pero aprendí y sobreviví. Si emigras para dedicarte a algo que te apasiona las posibilidades de éxito son mucho mayores.
El artículo es fantástico. Administración y Dirección de Empresas es estos momentos es la carrera mas demandada. No ocurre lo mismo en la Argentina, donde en las Facultades de Ciencias Económicas existe la llamada carrera de Contador Público, digamos un simil a Licenciado en Contabilidad que está separada de la Licenciatura en Administración de Empresas. Esta dicotomía Contador-Administrador es un invento latinoamericano, vaya a saber uno porqué, quizás porque primero se creó la Licenciatura en Contabilidad y luego la Licenciatura en Administración de Empresas y en lugar de haber hecho una sola carrera de Administración de Empresas, separaron la formación contable de la formación Directiva o Gerencial. Decisión en la que nunca estuve de acuerdo porque una persona preparada para la Gestión Financiera debe tener muchos conocimientos contables, cuanto mas mejor. Ocurre que la mayoría quiere estudiar para Contador porque éste es el que firma los balances y hace la Auditoría de los Estados Contables, mientras el Licenciado en Administración de Empresas no tiene dictamen, no firma absolutamente nada, Es un consultor de empresas, aquel que lo puede ser. No son muchos. Entonces el estudiante prefiere estudiar la carrera que le permite ser independiente y firmar. Para un estudiante, la firma genera status, si no hay firma, no hay status. Si bien existe la Auditoría Administrativa, no existe como en la de Estados Contables un dictamen obligatorio desde el punto de vista externo (lo debería haber). Sería la auditoria para el Licenciado en Administración de Empresas. Si fuera así, estaríamos a manos Contadores y Administradores y seguramente estaría muy peleado que carrera tiene mas estudiantes. Recuerdo que una de las frases que me decían en los pasillo de la facultad los estudiantes de contabilidad, era: ” tu carrera es para la relación de dependencia”, claro porque el estudiante de contabilidad sueña con hacerse millonario poniendo un estudio contable, es que se piensa que la independencia genera status, trabajar para otro aunque sea un CEO o un CFO y gane mucha plata, se ve como que al profesional lo “exprimen”, le quitan libertad. Muchos decían, si tengo un estudio contable, no dependo de nadie. Como ven, nada de vocación, todo es conveniencia económica y status predeterminado por usos y costumbres del país, perooo ¿vos sentis pasión por la contabilidad? Si me contestan que sí la mayoría, no les creo. La verdad es aburrido, poco dinámico, tedioso mas aun en un país como Argentina donde las reglas de juego cambian todo el tiempo, y hasta ingrato diría yo, peeeroooo, da de comer. Administración de empresas es una carrera mas dinámica, para emprendedores, innovadores, líderes etc etc…., pero no tiene dictamen, le falta la tan ansiada firma, , es difícil abrir una consultora de empresas. No cualquiera es consultor, no hay mucho trabajo para los consultores, en cambio los contadores liquidan sueldos, impuestos, llevan contabilidades, hacen auditoría de cuentas etc etc…. y la pregunta es la misma, pero Ud, porqué eligió contabilidad???? Porque le da de comer o porque realmente le gusta???? Las respuestas nunca serán sinceras!!!!!
Hace ya mucho tiempo de este artículo pero aun así me gustaría contar mi experiencia.
Tengo un Grado en Comunicación Audiovisual y un Máster en Comunicación Digital. Era de los que incaba codos para aprobar el examen y hacía los trabajos para aprobar e ir consiguiendo créditos. Hice unas prácticas en la televisión de la facultad (ojalá me hubieran tocado unas de verdad) y en el último año de carrera ya estaba mirando másteres por que veía que después de salir no iba a saber hacer un trabajo realmente. Total, que acabé eligiendo el máster que he mencionado anteriormente y tras terminarlo y empezar a buscar trabajo me di cuenta de dos cosas:
La primera: seguía sin saber hacer un trabajo de lo mío. Quería trabajar en un departamento de comunicación. Era un trabajo de oficina y la publicidad era una rama de la carrera que me atraía.
La segunda: con el tiempo he llegado prácticamente a odiar la mayoría de salidas de mi carrera. Odiaba la idea de dedicarme al diseño gráfico porque no tenía suficiente formación, me repugnaba trabajar en el cine y aunque la edición de vídeo no me disgustaba en la carrera, a la hora de practicar por mí mismo para adquirir más nivel/repasar me dí cuenta de que no quería, me instalé los programas de edición pero no me ponía a ello porque literalmente no quería hacerlo.
Total, que ahora con 25 años estoy estudiando unas oposiciones de administrativo por la estabilidad que ofrecen. Prefiero literalmente estudiar oposiciones a ver algo remotamente parecido a “mis estudios”. Puedo decir perfectamente que he cometido los errores 1, 2, 5 y 8. El segundo párrafo del 7 es más o menos lo que pensaba cuando tenía 18 años, luego más con 23… En esencia era como mi plan B así que no sé si considerarlo error o no la verdad.
Pero no digo esto como algo negativo… en parte. Estoy contento de haber tomado la decisión de opositar, lo único es que me siento una persona bastante inútil por haber estudiado una carrera a la que no me voy a dedicar.
Soy consciente de que el error es culpa mía. Culpa de mi yo de 18 años que no estaba en su mejor momento por resumir, pero culpa mía a fin de cuentas. Si con dicha edad tuviese la mentalidad que tengo ahora seguramente habría elegido economía, pero sabía que la persona que me hacía bullying en bachillerato iba a ir allí o a administración de empresas. La conclusión es que con 25 años no quiero estudiar otra carrera y quiero algo que me garantice estabilidad económica para ser feliz, lo tengo muy claro.
Desconozco completamente si alguien leerá esto dada la antigüedad de este artículo, pero solo decir que me he sentido completamente identificado. Si alguien me leyese sólo decirle que muchas gracias por dedicar un poco de tiempo en leer esto.